XI

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   Pasaron varios meses de lo sucedido. No le presto atención a los días porque normalmente para mí es indiferente pero, sé que lo que estaba haciendo lo sostenía por bastante tiempo. De hecho, eso mismo me hizo entender que no todos los días eran como yo pensaba.

   No llegué a un acuerdo con Sasuke. O sea, me refiero a que no sabemos que es lo que somos. Bueno, sí, somos hermanos. Pero todo esto ¿Cómo se clasifica? Porque no nos vemos como una pareja —Aunque en realidad yo no lo veo así— pero tampoco fue algo de una noche, o algún error. Tal vez el término correcto sea amante pero me da terror usarlo porque inconsciente pienso en lo que le estoy haciendo a Izumi. Y pensar en ella me traslada a las palabras que alguna vez usó mi hermano para clavarlas en mi pecho como dagas criollas.

   "Cualquier ser humano que tiene dos dedos de frente se puede dar cuenta de que ustedes están casados porque les conviene, no les quedó de otra o solo uno realmente está enamorado. Y claramente, no lo eres tú, hermano. Porque si así fuera, ni siquiera hubieras pensado en continuar lo que yo empecé. Y todo lo que dijiste anoche... Definitivamente no se trata de alguien feliz con su matrimonio".

   Mierda, es que él tenía tanta razón. No quería dársela pero la tenía. No es una excusa pero, la realidad es que Izumi forma parte de la más miserable estrategia para satisfacer mi alrededor y especialmente a mis padres. No quiero decir que no le tengo un cierto aprecio o que no le tengo cariño pero si hubiera sido de otra forma, ella sería más una compañera, una mejor amiga que mi esposa. Ni siquiera me hubiera casado y gracias a Dios, a los astros o lo que exista, no tengo un hijo porque para él sería una tortura. O tal vez ella. Bah, ni siquiera tiene sentido pensar en el género de los hijos que nunca tendré.

   "Comprendo que la cuides y la trates de esa forma, después de todo se acostumbraron a fingir, ¿O no? No me parece mal. Pero tarde o temprano se destruirá porque las estructuras que no tienen una base sólida, se derrumban. Y yo no tengo problema en ser la demoledora"

   Es que, si tan solo Sasuke supiera que con Izumi nunca hubo una base, ni una estructura, no hubo nada. En realidad lo que hicimos —o más bien lo que yo hice— fue querer arreglar con pegamento un vaso de vidrio roto en mil pedazos, juntar pedazos destrozados e intentar armar algo similar a la pieza original con el sobrante. Una simple puesta en escena de la más burda y barata que existe de lo que se debe hacer según lo que está impuesto.

   Nunca iba a haber algo como lo que plantea. Todas las relaciones que tuve fueron así, sin pies ni cabeza o como dijo él, sin bases sólidas. Ofreciendo mi amor como una joya cuando era simple bijouterie porque intentaba desesperadamente corregir algo que era incorregible, borrar con goma la tinta de un bolígrafo. Deshacerme de ese sentimiento intenso que tenía por Sasuke. Y que aún conservo como los primeros días.

   Vaya, que sorprendente es el efecto "Sasuke" en mi persona, ¿No lo creen? El mismo podía hundirme en un pantano de desgracia y humillación pero también podía llevarme al cielo y tocar nubes, nubes de algodón de azúcar. Él aún desconoce su poder, pero si tan solo lo conociera, sería un completo desastre.

   Porque él no lo sabe, pero yo estoy encadenado a él. De hecho, me tiene de la correa como un perro. El podría jalarla y yo iría junto a él, caminaría con él a dónde sea. Haría lo que sea porque no me molestaría ser su esclavo. Y si llegara a desobedecer, me dejaría golpear con látigos. Todo por lo que me hace sentir

   Porque estar con él es como volver a vivir en el pasado. No lo malinterpreten, mis mejores épocas fueron cuando yo era adolescente y no sabía absolutamente nada de la vida o en realidad, muy poco. O no le daba tanta importancia,  hasta cierto punto estaba repleto de inocencia. Sasuke me transportaba a esos momentos donde yo alguna vez fui feliz. Me hacía sentir joven con su sencilla presencia. Y todas sus locuras hacían que mi corazón pudiera latir a mil por hora y a su vez, provocaba un huracán de sentimientos y sensaciones. Me hacía sentir vivo, cosa que no había sucedido hace diez años.

Rosa Pastel [ItaSasu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora