Angel Cruel (Freddy Leyva Cd9 Y Tu) TERMINADA

CAPITULO 33: Yo solo te necesito a ti

Camine entre la gente, pensando en las mil y un razones para no intentar algo con Freddy, siempre recordando que aunque hayan miles de razones, siempre habrá una, solo una razón para saber que él es la persona que quiero, no se si para uno o dos meses, si sea para dos o tres años o si sea para toda la vida, pero es el único que hace que mi corazón lata más de lo normal, él… es el único que me hace sentir mariposas en el estómago cada vez que me besa, y simplemente me sube al cielo cuando toca mi piel, ya que logra erizarme por completo y hace que cada centímetro de mi deseé estar a su lado, un día, una tarde, una mañana… Una noche, o aún mejor, UNA VIDA.

Mi teléfono sonó sacándome de todo pensamiento. Lo busque entre las cosas de mi bolso, me detuve entre la gente y me hice a un lado para contestar, era Jos.

—¿Si?—

—Princesa, tenemos que hablar—Su voz era quebradiza, creo que estaba llorando—Es urgente—

—No me espantes—Hable con sinceridad—¿Te sucede algo?, ¿Estas bien?—Me altere un poco por su forma de hablar, quizás le había sucedido algo o a su familia, y después de todo… ha sido una excelente persona.

—No, nada… Bueno ven a mi casa esta en xxxxxxdireccionxxxx—

—¿Estas seguro que estas bien?—Pregunte nuevamente.

—Por favor ven, aquí te explico—Su voz era triste, distante al Jos alegre que yo conozco.

—De acuerdo, voy para allá—Termine de decir con un tanto de miedo por pensar en él, en como esta.

—Gracias—Dijo un poco más tranquilo, Colgué el teléfono de inmediato.

Mi corazón latía de prisa, y esta vez no era por buenas causas, al contrario… era por la preocupación que causaba en mí, Jos.

Tome el primer Taxi que encontré, señale la dirección que Jos me había dado. Comencé a pensar en las peores cosas que le pudieran haber pasado, pesé a que no siento que el sea mi media naranja, tengo que reconocer que sus buenas intenciones han salido a flote en diversas ocasiones, y  también tengo que decir que ha sido en todo momento una excelente persona conmigo, aunque suene repetitivo.

Apenas llegamos a su casa me baje del taxi, toque el timbre, era una casa hermosa, bastante grande que estaba cercada con un muro grande con un poco de vegetación además de que tenía un portón negro grande, con una vista espectacular, bastante bonita.

 Una persona aparentemente de servicio salió de su casa, llego hasta el portón y con una sonrisa agradable me hablo—Buenas tardes señorita, ¿Qué deseaba?—Sonriente en todo momento aquella joven mujer.

—Hola, buenas tardes… venía buscando a Jos—Sonreí—Me esta esperando—

—Claro, me comentaron que alguien vendría—Abrió de inmediato el portón dándome paso—Pase, pase, está en su casa—

—Muchas gracias—Dije amable—¿Sabes dónde esta él?—Pregunte con una sonrisa.

—Debe estar en su habitación—Dijo bastante sonriente, cuando comenzaba a cerrar nuevamente el portón.

— ¿Y eso dónde está?—Pregunte nuevamente.

—Ha es cierto—Señalo ante su descuido—Entrando hay unas escaleras subiendo la segunda puerta de la Derecha—