Lo mire nuevamente, no podía creer lo que decía, mi cuerpo temblaba pues dome al “tigre”, estaba haciendo lo que muchas querían y no podían, de lo que muchas desean.
Apreté con fuerza sus manos, acomode mi garganta tragando saliva, hable nerviosa ante la sorpresa—Si, Si—Dije apenas audible, para después casi gritarlo—¡SI QUIERO!—Le dije fuerte, me acerqué con fuerza a él, y lo abrace desde su cuello.
Me apretó desde la cintura, envolviéndome con ambos brazos, sentí su respiración pasar delicadamente por mi cuello, era la sensación más grata que había sentido en mucho tiempo, el estar juntos no se compara con nada.
Mientras las armónicas melodías daban paso entre la noche, sonando y llegando dulces a nuestros oídos, nos apretábamos en un abrazo, nada que tuviese un doble sentido, nada que fuese más allá, era algo de amor, cariño, incluso respeto, una muestra de afecto mutuo que invade corazones.
Nos alejamos un poco, nos vimos directo a los ojos, había algunas luces, que hacían que sus ojos brillaran, se acercó a mis labios y me beso con delicadeza, como si no hubiera un mañana, chocaba con firmeza sus labios y los míos, sintiendo el cielo con cada pequeño movimiento de sus firmes labios. Apenas estábamos en el tierno beso, se escucharon unos sonidos estruendosos, que por un momento me inquietaron, hasta que mire hacía el cielo, donde fuegos artificiales de diversos colores se encendían para nuestro gusto.
—Freddy—Dije bajo regresando a la realidad.
—¿Qué sucede cariño?—Pregunto
—Escuche—Me sincere—Escuche una llamada tuya, cuando me encontraste en la mañana en la escuela, y… Me desconcertó—
Me miro extrañado, para después dar una sonrisa que inspiraba confianza, tomo con cuidado mi mejilla entre su mano—Planeaba todo para esta noche—
—¿Y esto querías grabar?—Pregunte con desconfianza.
—Si cariño—Hablo cálido—Es el inicio de una gran historia, creo que es importante tener un recuerdo, y bueno… Alan, Bryan e incluso Marisa me ayudaron, con todo esto, Marisa me aseguro que tu vendrías, ella se encargaría, me aviso por un mensaje de texto que tu no irías a donde habíamos quedado y que te engañaría para traerte—Todo comenzaba a tener mas sentido.
Le sonreí, aunque con astucia le cuestione aun mas—¿Y porque dijiste que gritaría?—Le cuestione
Sonrío—Las mujeres demuestran sus sentimientos, creí que vendrías mas animosa—
—Creo que no saber las cosas me tenía tensa, creí que volverías a ser el mismo Freddy de antes—Le dije despacio.
—El Freddy de antes no tenía como novia y futura esposa y madre de sus hijos a una reina como tú—Me dijo galante.
—Eres demasiado perfecto—Le dije entre dientes intentando no alzar su ego.
—Tu eres…—Se quedo callado pensando en que decir.
Levante la ceja esperando su respuesta aunque la complete—Tu novia—Le dije sonriente.
Me miro con una sonrisa—SI, mi novia, mi princesa, mi todo—Beso mis labios nuevamente, incluso para besar es el mejor.
Nos alejamos un poco—¿Preparaste algo más?—Le pregunte.
—Sí, ven acá—Me tomo de la mano y me llevo despacio hacía la mesa que había en aquel salón rural.
Le sonreía al no saber que vendría—¿Qué es?—Le pregunte al ver que sacaba una cajita pequeña y elegante de una bolsa.
—Mira—La abrió con cuidado, dentro de ella había joyas, todas de oro y que se les notaba que su precio era por demás alto—Es para ti—
—Freddy—Dije sorprendida—Esto luce muy costoso, no creo que—
Me interrumpió—Nada, te lo quedaras—
—Dios santo, Freddy esto es hermoso—
Saco un par de anillos, tomo mi dedo anular (En el que se ponen los anillos de compromiso/matrimonio) me enseño el grabado que tenía dentro, en el cual decía la fecha y su nombre, como si estuviéramos comprometiéndonos—Es para ti, porque quiero que siempre, me lleves contigo, aunque no estemos juntos—Dijo despacio—Tiene mi nombre, y yo llevare uno igual, solo que con tu nombre—Una lagrima corría por mi mejilla—Con esto todos sabrán que eres mía, y como el mío dice tu nombre, todas las…—No sabía la palabra adecuada para decirle a una mujer algo así como Zorra.
—¿Meretrices?—Le ayude
Sonrío con duda—¿Qué es eso?—Me cuestiono
Le sonreí sencilla—Es un pequeño sinónimo de una palabra muy similar a prostituta, tu me entenderás—Le dije segura.
—Claro—Río leve—Me lo pondré para que alguna meretriz que guste de mí, sepa que tengo dueña—dijo demasiado tierno.
—Freddy te—Quería expresar lo que siento por él.
Me interrumpió—Shh—Dijo poniendo su dedo índice en mi boca, cerrándola, saco un par de esclavas, de oro, que tenían unos corazones—Mira—Me mostro como cuando se unían a una distancia se atraían hasta quedar juntas. Me dio una con cuidado y me ayudo a ponerla en mi muñeca.
—Freddy, yo... —Suspire con fuerza—Yo te amo—Le dije viéndole a los ojos, era un sentimiento puro y verídico.
Se acercó más a mí, pego su cuerpo al mío en un hábil movimiento—Cariño, lo puedo decir desde muy dentro… TE AMO—Se acercó a mis labios cerrando los ojos, beso mis labios de una manera inigualable, con un tono diferente, con una serenidad que se hacía mayor a cada segundo, algo que era excitante y erizaba la piel con cada mínimo movimiento de su boca, con cada giro que hacía con su lengua.
Después de una pequeña cena llegue a mi casa en el auto de Freddy, nos besamos un poco antes de que bajara, me sentía especial y única, como si nadie pudiera hacerme nada.
Entre a mi hogar, Margarita “Mikela” estaba sentada en el sofá, como si fuese un figura de autoridad en el hogar.
—¿Por qué llegas tan tarde?—Pregunto molesta.
—No te incumbe—Le dije molesta.
—Si, si me incumbe, dime ¿Por qué a esta hora?—
—¿Eres policía, o qué?—Le cuestione.
—Pues, creo que en vista de que viviré aquí, y que además seré la esposa de tu padre, entonces SI, seré una policía hogareña—
La mire mal—Pues oficial, le informo algo—Hable con seriedad y acercándome a ella—Tu jurisdicción comienza y termina en mi padre, así que… Conmigo ni te metas—Le dije dejándola callada, subí al segundo piso para llegar a mi habitación, y dormir.
Desperté, otra vez, con la ausencia de tu voz, y pinte con mis manos tu silueta amor (88) Jaja Okno.
Desperté bastante temprano, me bañe y arregle para salir a la escuela no sin antes desayunar.
—¿Y eso?—Pregunto mi padre en la mesa viendo mi anillo.
Le sonreí—Algo, un detalle que me compre—Mentí, pues la familia de Freddy y la mía, ya no son tan… amigos entre sí—¿Y tú?, ¿Qué ha sido de ti?—
—En realidad, mucho… Ayer tuve una confrontación con el gran señor Pacheco, jaja—se mofo descaradamente—Les dije todo claro, el y su familia están en mi lista de enemigos, y estoy a nada de destruirlos—
Me sorprendí—No, no puedes—Dije despacio
—¿Qué?—Pregunto molesto.
—¡NADA!, que ya no tengo hambre, debo llegar a la escuela—Dije rápido, me levante dejando restos de comida en el plato, tome mis cosas y salí dejando a mi padre con las palabras en la boca.
Llegue a la escuela apresurada, buscaba a Freddy para contarle lo que mi padre hacía y que debían alejarse de él o protegerse de alguna manera, no me gustaría que nada le pasara.
Caminaba por los pasillos de la escuela, ya había una cantidad considerable de estudiantes en ella, miraba por todos lados esperando encontrarlo pronto, era malo que la primera charla después de ser oficialmente novios sea así.
—Ey tu, zorra, ¿Qué buscas?—Escuche la voz estúpida de Wendy que me exacerbaba.
Estaba inquieta y no quería pelear, bueno en realidad siempre quiero humillarla, pero hoy no estaba tan inspirada como antes—Tu virginidad, pero creo que es caso perdido—Le conteste sonriente.
—Mira, idiota—Dijo demasiado molesta, note que su grandulón subordinado y su nueva sirvienta iban con ella con caras de confianza y maldad que me inquietaban aunque no lo demostrase externamente—Ya sé que tu y Freddy ahora son novios, y créeme que no me quedare así—Se acercaba peligrosamente.
La mire bien pues con ella se acercaban sus lame botas, los tres se veían peligrosos, tensos, aunque mi negro humor no se detenía—¿Por qué?, me rociaras de tu líquido, ¿Zorra?—
—Abraham—Dijo llamando al chico que iba con ella—Hazla pedazos—dijo sin dejar de mirarme, con completa seguridad.
El joven se acercó a mi, quería golpearlo hasta que note que llevaba con el un pequeño puñal.
Quiso clavarme aquel arma punzo cortante, pero detuve con todas mis fuerzas su mano, la cual dirigía a mi cuello con fuerza—Hazlo, ¡YA!—Decía Wendy.
Creo que mi hora ha llegado, es hora de morir ¿Es hora de que mis brazos no resistan la fuerza?.
—¡SUELTALA IDIOTA!—La figura masculina de Freddy se hizo presente dando un intenso y sonoro grito, que hizo que el se alejara de mí dejándome con poca fuerza, y casi cayendo al instante, aunque ahora sus malas intenciones iban dirigidas a Freddy, ahora quería terminar a Freddy.
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Holaaa, bueno antes que nada se los pido de nuevo, ¡COMENTEN!, si quieren capítulos comenten, ya estamos en los ultimos capítulos, las invito a seguir participando en la promoción y ¡GRACIAS POR LEER!
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Angel Cruel (Freddy Leyva Cd9 Y Tu) TERMINADA
FanfictionMi nombre es _______ Sáenz soy alta, muy alta creo, mido 1.77 soy castaña, ojos marrones. Vivo en la ciudad de México. Mi vida es común, vivo con mi padre el cual nunca está en casa. Mi madre murió cuando yo era bebé no tengo hermanos, solo tengo a...