Angel Cruel (Freddy Leyva Cd9 Y Tu) TERMINADA

CAPÍTULO 18: Victoria

Capítulo 18:

—No sigas por favor Freddy—Solté una lagrima, toque su mejilla con delicadeza, la ternura que podía reflejar sus ojos era impresionante, por desgracia ahora mismo reflejan tristeza, volteo su mirada posando sus ojos sobre los míos.

—No te preocupes, ya no lo haré… olvídate de mi—Sonrió, se levanto del sillón y camino hacía otro lado.

—Freddy, espera—le seguí—Aun podemos ser amigos—

Hizo un puchero de inmediato, pero no contesto nada.

—Freddy, no seas infantil— seguí, pues realmente quería por lo menos tener una buena relación con el.

—¿Estas seguro que no quieres nada de mí?, ¿Ni siquiera mi amistad?.

Siguió sin contestar—De acuerdo—Finalice, me di medía vuelta y busque una carpeta para llevarla a Victoria, lo vi por última vez allí parado en una esquina de la bodega. Comencé a caminar hacia el elevador, el eco de mis zapatos se escuchaba por todos lados.

—Dije lo que tenía que decir—Grito Freddy antes de que yo saliera—Ahora ya no quiero involucrarme en más contigo—

—Si así lo quieres, respetare lo que pides—Me puse sería pero neutral, intente al máximo no parecer enfadada de ninguna manera.

Regrese donde Victoria, le entregue la carpeta que necesitaba y me senté en un pequeño sillón que había dentro de su oficina sin pronunciar si quiera una palabra.

—¿Qué sucede cariño?—Pregunto Victoria poniéndose de píe y acercándose a mi. Ella es tan femenina, pero al mismo tiempo tan vanguardista y tiene ese rol maternal que lleva a todos lados.

—No pasa nada, un pequeño error— Le mostré la sonrisa más fingida de el día,  mis ojos estaban lagrimosos, húmedos pues no aguantaba más la situación, yo no entiendo por qué de disgustarme tanto los chicos como Freddy y Jos ahora salgo con uno de ellos, y aun peor… me enamore de uno de ellos.

—Los pequeños errores forman parte de la vida, pero sabes algo… Los errores te hacen mas fuerte y te ayudan a crecer cada día más—Victoria intentaba darme consuelo.

—Y ¿Qué pasa si te enamoraste de ese error?—La mire a los ojos.

—Puede ser que no haya sido del todo un error, Recupera el tiempo—me guiño un ojo.

—¿Y si no pudiera?—

—Para el amor no hay impedimentos, ¿Quién es tu error?, quiero sinceridad—

—Su hijo—dije seca.

Victoria me vio con una cara totalmente normal, parecía que no se hubiese sorprendido ante aquello que acababa de decir. Tomo aire bien profundamente y se preparó para hablar con las palabras adecuadas.

—¿Sabes cual es problema de mi hijo?—pregunto viéndome directamente.

—No, ¿Cuál es?—

—Que es un idiota—Su seriedad era impresionante, yo por mi parte reí ante aquella afirmación.

—¿Por qué?—pregunte.

—Nunca sabe valorar lo que tiene hasta que lo pierde—

—Él ya me dijo que me olvide de él—