Poco a poco iba recuperando su conciencia. Su visión aún estaba algo borrosa y su cabeza le dolía demasiado. Lo último que recordaba era haber estado buscando a su... bueno no sabría como llamarlo exactamente.
Trató de moverse o almenos ponerse de pie, pero su cuerpo no le respondía.
No podía hablar, sus brazos y sus piernas parecian estar atados por unos contenedores de metal, al parecer con tecnología que él había visto en en los altos mandos de OPICA.
Miró con atención sus alrededores, estaba encerrado en algún lugar con paredes metálicas, no, no era un lugar exacto. Sentía las vibraciones debajo de sus pies, sea a donde fuere lo estaban transportando con un vehículo especializado.
Trató de crear una sacudida eléctrica para deshacerse de sus esposas, pero sus poderes fueron inutilizados. Debía pensar rápido. Tenía que buscar a los demás, tenía que encontrarlo a él. No podía, no quería perderlo.
Una gran sacudida se hizo presente, interrumpiendo sus pensamientos. Habian llegado a su destino, y pronto sabría quienes fueron los que lo secuestraron, y que probablemente secuestraron a todos los demás.
Cerró los ojos al escuchar pasos acercarse, no tenía idea en dónde estaba, ni siquiera pudo adivinar el lugar dónde encontraba la puerta, pero escuchó como se abría lentamente. Trató de calmar su respiración, y concentrarse, solo había una oportunidad.
Unos pasos se acercaron hasta él. Sintió como lo subian a una especie de silla de ruedas, esta estaba conectada con esos contenedores de metal que cubrian sus piernas, sus brazos y parte de su boca, y lo arrastraron fuera de aquel vehículo.
Sintió la como el sol chocaba con su rostro, como el aire mecía ligeramente su corto cabello. Grave error.
Apenas vio la oportunidad, cuando uno de aquellos hombres se había separado lo suficiente de su compañero, abrió los ojos y como pudo se impulsó impactando su cabeza con la quijada de uno de los hombres de negro armados.
Mientras este caía al piso el otro no dudó ni un segundo de disparar en contra suya con lo que parecía un arma de alto calibre, pero con gran agilidad uso aquellos disparos para deshacerse de aquellos contenedores de brazos y piernas. Cada bala fue a dar directo con el metal mientras el rubio esquivaba y se acercaba cada vez más al hombre de negro.
Logró liberar sus brazos y sus piernas y una vez lo suficientemente cerca, arremetió la cabeza de aquel hombre con parte del metal desgastado por las por las balas.
Pero escapar no iba a ser así de facil...
Lo rodearon apenas cayó el segundo cuerpo inconsciente al piso.
-Alto ahí prisionero, BETA-07- no le importaron los numeros, ese codigo ya no significaba nada para él, no desde que logró ser libre, no desde que él lo liberó.
Dispararon a matar, por todos los angulos imaginables. No había escapatoria, pero no podía morir sin verlo sonreír otra vez. Debía rescatarlo.
Lanzó un grito de impotencia y dolor siendo cubierto por un campo eléctrico el cual detuvo cada bala en el aire como si estas estuvieran paralizadas en el tiempo. Dolía, dolía no ser lo suficientemente fuerte.
-¿creían que no era una amenaza solo por un maldito número?!- gritó extendiendo aquel campo electrico hasta paralizar a todos los soldados uniformados -tal vez no sea tan fuerte Wonder..., ¡pero soy un Stotch!- declaró golpeando el piso con fuerza para liberarse de la carga que apenas era capaz de sostener.
Las balas cayeron al piso y los hombres, muertos, cayeron junto a ellas. Él solo cayó de rodillas exhausto, tal vez no pueda usar una carga eléctrica durante un tiempo, y por eso necesitaba salir de ahí.
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Héroes || South Park AU
FanfictionBendición de Dios, maldición o evolución. La humanidad está a punto de descubrirlo cuando un grupo de jóvenes comienzan a recorrer las calles con antifaces y poderes más allá de la compresión científica actual. No todo es lo que parece y los enemigo...