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Cap. 7: Clase de arte

Cap. 7: Clase de arte

|Este capítulo es ChanBaek y TaoRis|

By BaekHyun.

No entendía la razón por la que KyungSoo era tan tímido, era adorable, pero a veces me atormentaba lo ingenuo que podía llegar a ser. Las pocas materias que compartíamos siempre se la pasaban hablando de los hermoso y sexy que era JongIn, a mi parecer hasta su nombre me incomodaba, tenía un aire de "mírenme todos, soy genial" que no compartía para nada. Los tipos así no eran de mi agrado, sin embrago, si a mi pequeño pingüino le gustaba, no tenía nada más que aceptarlo.

Disfrutaba mucho las clases de arte, muchísimo, y sí, "disfrutaba" en tiempo pasado. Desde que ChanYeol se había cambiado a arte, no dejaba de perseguirme a todos lados, era como un enorme cachorro. No podría decir que me disgustaba, en realidad era muy divertido.

Recuerdo lo primero que me dijo cuando nos conocimos.

—Hola — me extendió la enorme mano, mirándome con un brillo en los ojos y una enorme sonrisa — soy Park ChanYeol, pero puedes decirme ChanYeol, Yeol, orejón, Yoda, Dumbo... — mientras yo parpadeaba varias veces con la boca abierta por la impresión, luego la profesora le interrumpió.

—Jovencito, acaba de integrarse a esta clase ¿y ya está interrumpiendo? — el enorme nomo perdió la sonrisa y se disculpó varias veces antes de volver a sentarse y sonreírme nuevamente.

—Soy BaekHyun. Un gusto conocerte, enorme nomo orejón— le susurré para no ser reprendido.

ChanYeol siempre sonreía, a veces daba miedo porque no sabía qué pasaba por esa alocada cabecita.

Pero ahora entendía todo.

Se suponía que debíamos buscar un buen lienzo el cual plasmar, de la naturaleza claro. ChanYeol me suplicó, literal, poder hacer la tarea juntos y de paso conocernos más. Al final terminé en su casa, sentado en el sillón de una humilde casa con el enorme nomo orejón arrodillado enfrente mío.

—Estoy enamorado de ti, BaekHyun. Por favor, acéptame. — Un pitido en ambos oídos resonaba como si marcara el fin de mi corazón. Tragué en seco y quise responder, de verdad quería; no sabía qué debería decirle. Mi mente se mantenía en blanco, y pude regresar a la realidad cuando ChanYeol se paró y vi que sus manos apretaban tanto que sus puños se tornaban blancos. Alcé la cabeza y vi los ojos del grandulón humedeciéndose.

—Haré lo que sea BaekHyun, solo acéptame. — ChanYeol siempre estaba feliz, siempre. Me empezaba a doler el corazón verlo así, aún no sabía si sentía algún tipo de atracción hacia él. Reía todo el tiempo con él y mis travesuras y bromas él las entendía, al contrario de mis amigos. Podía juguetear y haces estupideces con este enorme nomo de sonrisa atemorizante.

—Es que... no sé. ChanYeol...

—Puedo hacer que te enamores de mí. —Lo dijo muy seguro. ChanYeol es abrumador.

—Me agradas Yeol, me gusta estar contigo, pero... a comparación tuya tú tienes tus sentimientos claros y en orden, yo no. — el alto se sentó a mi lado dejando sus manos libres. Me miró dejando atrás los ojos brillosos a punto de llorar.

—Debo calmar mi corazón— se tocó el pecho, ¿acaso se estaba arrepintiendo? — te daré el tiempo que necesites, pero antes de eso. ¿me podrías permitir darte un pequeño beso?

Y una vez más, ese pitido en el oído dejándome atónito, es que este grandulón sabía cómo paralizarme. Me estaba atacando de una manera que ni yo conocía.

Una cosa era que mi personalidad era ser hablador, alegre y juguetear y hacer bromas todo el tiempo, pero también era algo maduro para mi edad.

Pero cómo se responde maduramente ante alguien que se confiesa y ahora te pide un beso; si me hubiera robado un beso fácilmente lo abofeteaba, estaba en mi derecho después de todo. Pero ChanYeol detrás de su cara de ingenuo, no lo era.