Capítulo 21.

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Con el pasar de los días, JiMin fue capaz de sentirse más cómodo con los cambios en su nueva relación con el príncipe, aunque mantuvo sus formas adecuadas delante de aquellos que no estaban al tanto de su situación.

En cambio, en privado, el rubio le mostró a su príncipe que poseía un espíritu divertido, competitivo e incluso atrevido. Fue idea de Minnie esconderse en algún armario de limpieza viejo para poder besarse, pues tanto él como YoonGi estaban de acuerdo en que esperar se estaba haciendo imposible.

También fue Park quien logró despistar a los guardias de los jardines y esconderse entre arbustos mientras ellos les buscaban, y JiMin lo hizo sólo porque quería tiempo a solas con el peliazul.

YoonGi tuvo su parte en las travesuras, convenciendo a Minnie para que se escabullera con él por las noches y así dormir juntos en la habitación del futuro regente, quien había descubierto que su sueño se volvía infinitamente mejor cuando sostenía al joven rubio entre sus brazos. JiMin jamás lo admitiría si se lo preguntasen, pero la primera vista cada mañana del cabello azul del príncipe en todas direcciones, y sus hermosas facciones mostrando descanso y paz, fascinaban al mayordomo a niveles que no lograba describir, la maravilla de que aquel cuadro fuese suyo cuando abría los ojos antes del alba era una de las cosas que Park atesoraba con el corazón.

Por supuesto, en ocasiones discutían, y a diferencia de cómo el príncipe había lidiado con el tema de la fallecida reina de Moon, parecía un hombre relativamente razonable en varios aspectos, incluso si de pronto su mal genio salía a relucir, y en aquellos malos días, ni siquiera se dignaba mirar en dirección a JiMin, simplemente le despachaba lejos, una actitud que a Park le enfureció constantemente.

Sin embargo, ambos consideraban que su relación marchaba bien y había momentos en que los dos comenzaban a hablar de sus planes a futuro, concordando en que sólo anunciarían su emparejamiento una vez que éste se mantuviera estable, lo que significaba que pasaría el cortejo y la propuesta de matrimonio a puertas cerradas.

Algunas veces guardar el secreto se hizo emocionante, como cuando se reían tontamente después de besarse tras la puerta de la sala de música con el riesgo de que alguien les hallase en tan comprometedora posición, pues de alguna manera se sentían niños traviesos haciendo de las suyas.

En otras ocasiones, el pecho de JiMin dolía al ver cómo los mensajeros de otros reinos, e incluso la realeza de éstos venía con grandes propuestas de uniones en sagrado matrimonio, ello debido a que el joven heredero de Moon, ya con 25 años, se encontraba en edad casadera, y si bien Moon no era el reino más próspero de todos, se mantenía bastante bien con los recursos y la paz. Park tenía muchas ganas de interrumpir en las cenas que se ofrecían en cortesía a los huéspedes, que resultaban ser las princesas candidatas para las proposiciones y en donde el príncipe heredero tenía que hacer presencia de manera obligatoria y complacer a sus visitas.

Seguro que muchas de ellas se encontraban deseosas de ser abrigadas en aquellos pálidos brazos, sin saber que éstos ya acomodaban a un joven cada noche.

Pero entonces, Minnie recordaba que él, a los ojos de otros reinos, no era más que un humilde sirviente, y de la misma manera, siguiendo esa perspectiva, el príncipe peliazul se encontraba disponible, sin planes de sentar cabeza en un futuro próximo.

Luego de aquellos cumplimientos de deber social de YoonGi, el príncipe trataba de aliviar el dolor que podía ver en aquellos iris grises de su joven mayordomo, llevándole a su jardín especial y recostándose con JiMin apresado en su pecho, mirando las estrellas en la calma de la noche.

Ninguno decía nada, ¿qué había que decir? JiMin estaba muy consciente de que estaba siendo totalmente incoherente, pues estaba en completo acuerdo con mantener en las sombras todo, y en realidad, el príncipe heredero siempre declinaba con amabilidad cada propuesta e insinuación que se le hacían, así que no había más que hacer.

El menos esperado -YoonMin-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora