Parte 9

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Iruka y Kakashi casi no hablaban, su relación se basaba en los encuentros sexuales, en realidad Iruka era quien hablaba y el otro solo escuchaba, y no era que el doctor fuera un habla mierda, el hombre que consideraba su pareja era un muro inquebrantable, por eso se le hizo sumamente extraño que hiciera esas preguntas

- ¿Rin es tu paciente? ¿está enferma? -

Iruka dudo en responder, recordó lo que Rin le pidió cuándo la acompaño a fumar minutos antes

- doc. ¿podrías no contarle a tu novio el por qué somos amigos? No quiero perder el trabajo, no quiero malentendidos ni pesar- le decía la mujer.

El más que nadie sabía de la necesidad económica que ella tenía y la enorme responsabilidad que arrastraba a diario, siempre la había admirado -tranquila, somos amigos porque se nos dio la gana, esa será mi respuesta- le decía mientras le quitaba el cigarrillo de los labios para arrojarlo al suelo y pisarlo

- Lo lamento, pero no podré contarte, es su vida, no se la puedo soltar a alguien que apenas la conoció- Iruka le respondió a Kakashi –solo puedo decirte que somos amigos porque se nos dio la gana- el castaño sonrió

-Umm ok entiendo- dijo resignado Kakashi mientras se hacía de sus propias conclusiones

- ¿y que hace un asesor de fotografía? el doctor era un fanático de cambiar de tema cuando la incomodidad lo invadía ¿Por qué no me contabas que hacías eso?

-no lo vi necesario-

La mirada de Iruka se fue a piso un poco resignado y dolido ¡es tan evidente que no le importas! ¡no eres nadie para él! Pensaba intentado inútilmente controlar lagrima que estaba a punto de salir. Como le dolía sentir tanto por él y no ser correspondido ni un poco.

Cuando Kakashi vio la reacción del castaño recordó las últimas palabras que le dio Rin, él ni siquiera sabía porque seguía yendo en búsqueda del doctor, era algo que no podía explicarse, era la única persona aparte de la "fisgona" que él frecuentaba, el resto eran personas que veía una o máximo dos veces -además es muy aburrido si lo comparamos con la vida de un doctor- intentaba aliviar la cagada que acaba de cometer –don cabrón me podrían llamar-

-yo- Kakashi se estaba ahogando en sus sentimientos de culpa –yo, lo lamento, no soy bueno contigo- lo escupió tan rápido que Iruka no lo creía

El silencio reino nuevamente, llegaron hasta el auto de Iruka que se encontraba en el parqueadero del hospital

- ¿es tu auto? - le dijo el doctor al peliplateado señalando el carro en el que habían llegado ayer

-no, es el de Rin-

- ¿queeee?- decía con duda -pero ella tenía otro, uno gris- se respondió mentalmente –lo tuvo que vender- , su expresión fue de lastima, ella odiaba que la gente la viera así, pero no pudo evitar pensar en que a ella se le estaban acabando los recursos.

Intento cambiar de tema para que Kakashi no se percatara de su sorpresa - ¿iremos a tu departamento? la verdad hoy quisiera descansar la noche fue complicada- era una negativa a los usuales encuentros descontrolados que se daban.

-umm- la voz del peliplateado fue seca y desinteresada, después de la decepción de la noche anterior, quería coger con alguien y pensó que Iruka estaría tan disponible como siempre y más después de la disculpa.

-podríamos dormir un rato y después ver una película, también debes estar agotado- menciono el doctor, nunca lo habían hecho a pesar de que ya lo había propuesto en varias ocasiones, pero pensó que esta vez sería una excepción.

DISTURBIA (Kakarin) (Kakayama)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora