katsudeku one-shots

chupon♡

Vaya... Ese día no podía ser peor. Katsuki estaba en cama, enfermo. Super enfermo. Los cambios de temperatura si que eran horribles. Primero hacia demasiado calor. Luego comenzó a llover, a lo que katsuki salió para mojarse y liberarse un poco del calor. Todos le decían "oh, vamos, entra! Vas a resfriarte!!", A lo que katsuki solo respondía con un "no soy tan débil como ustedes para resfriarme por una maldita lluvia". Y mirad ustedes. Se ha tragado sus palabras.

Si bien su relación con izuku no había comenzado hace mucho tiempo. Tenían solo unas dos semanas saliendo, aunque realmente nadie sabía de su relación. Katsuki solía contemplarlo sin que él se diera cuenta, hasta que en algún momento izuku sentía la mirada de alguien encima suyo. Un día decidió poner atención, y buscar si era cierta su teoría. Y vaya sorpresa la que se llevó al ver como era que su amigo de la infancia no le quitaba el ojo de encima, parecía que ni siquiera parpadeaba. Así que se acercó a él mientras ambos se miraban. Empezó una conversación, y decidieron salir a alguna parte, donde fue que katsuki le declaró lo que sentía, y comenzaron a salir. Vaya que historia más liosa, y pues, a pesar de lo que haya pasado antes, podía decirse que su relación era muy buena.

El chico izuku estaba sentado en la orilla de la cama, al pendiente de su pareja. Cada diez minutos cambiaba la pequeña tela que se encontraba en la frente de su novio. Cada que podía, checaba la temperatura de este.

—Oh! Por una mierda!! Ya te dije que estoy bien! Vete a clases o vas a llegar tarde!!— digo katsuki mientras que con una mano tapaba su boca a la vez que tosía—. Vamos!! Muévete!!

—Kacchan!! Tengo que cuidarte, tengo el deber de hacerlo!

—Agh... Vete ya! ¿Te parece si te mando un mensaje cada que termine una jodida clase? Así sabrás cómo estoy...—dijo el rubio mientras tomaba su teléfono de la mesa de noche.

—Pues... Es una buena idea kacchan! Me iré entonces...— dicho eso, izuku tomó su mochila y abrió la puerta. Iba de camino a clases. Notaba la mirada de muchos en el. Veia como muchas chicas decían cosas entre ellas y después reían. Entre muchos ellos y ellas, apareció el chico semi- albino.

—Buenos días, midoriya. —dijo, con su expresión seria de siempre—.

—Buenos días, todoroki-kun. ¿Entraras a clase?

El chico semi-albino solo asintió con la cabeza, e hizo un ademán señalando que izuku pasará primero. El solo sonrió, y entro en el aula.

La mayoría de sus compañeros ya estaban dentro, a excepción, obviamente, de katsuki. Ah.... Iba a ser un día más tranquilo, pero para el, aburrido.

El profesor, aizawa, entro unos minutos después. Casi nadie se esperaba lo que diría:

—Bien, vamos a asignar parejas. De ahora en adelante, y toda una semana, harán ejercicio en parejas, se ayudarán mutuamente y esas cosas. — dijo el profesor, realmente no estaba del todo interesado en ver quién se juntaba con quién, así que les dijo una cosa más — pueden elegir la persona que quieran, no importa. —dicho esto, cerro su saco parecido a una oruga,y se tiro a dormir.

Todos vueltos locos se levantaron de sus asientos gritando por todos lados:

"¿¡Quieres ser mi pareja de ejercicios!?"

Muchos ya habían conseguido pareja, aunque uno de ellos estaba algo intrigado. ¿Con quien iba a estar de pareja si su real pareja estaba enferma y debía permanecer en la cama?. Empezó a murmurar como siempre lo hacía. La única persona a la que le molestaba esto no estaba presente, así que siguió asiendolo sin molestarse.

Sus murmuros se vieron interrumpidos cuando el semi-albino se posó delante de él. Izuku solo lo miraba, hasta que atrevió a decir algo.

—¿Pasa algo, todoroki-kun?