AMNÉSICO (MIN YOONGI)

El fin

Suni se frotaba las manos por la ansiedad y el frio de la noche, mientras su taxi llegaba a destino, había recibido decenas de llamadas de Seokjin, Hoseok y Namjoon sintiendo como los habia traicionado, sin tener valor de contestar.

Casi estaba por llegar, asi que programó un mensaje para ser enviado después a sus amigos.

Lamento todas las preocupaciones que les he y estoy causando, pero siento que esto es algo que tengo que hacer, por mi, por YoonGi, los últimos meses fueron los mas felices de mi vida, y ustedes tres fueron parte importante de mi felicidad, pero mi lugar no esta en Seúl, no esta en el hospital, está con YoonGi, sea lo que tenga que pasar, pasará, no puedo quedarme simplemente esperando, tengo que estar a su lado, espero acepten mis sentimientos, no he perdido la esperanza de volver a verlo vivo.

Los quiero mucho a todos.

Estaba por llegar cada vez mas preocupada mientras empezaba a divisar autos de policía.

Dentro de la mansión el equipo de seguridad  notó algo que debía informar a su superior, una mujer la noche anterior se había bajado de un auto y quedado en la entrada, lo cual era raro siendo que estaban en un lugar muy apartado, no tenían vecinos cerca, y la mujer se había aparcado exactamente en la entrada, acercándose al portón de madera, de pronto retrocedió en sus pasos y se metió nuevamente al auto, saliendo del campo de visión de la cámara de seguridad.

—Cree que deberíamos informar al maestro—preguntó el guardia a su superior.

—Tal vez si o tal vez no sea nada y estaremos jodidos—el jefe de guardias dudó pero tomó la decisión de dar el aviso.

—Iré a comunicarle—Se adentró en la mansión donde Suk le impidió el paso.

—El maestro esta ocupado en estos momentos—

—Esta él  ¿"ocupado"?—

—Si y ya sabe las reglas, debe esperar a que termine—

—Es un tema de seguridad insistió—

Con mala cara Suk decidió avisar e interrumpir al Maestro, tocó la puerta de la habitación con miedo.

—¿Quien?!— bufó el hombre dentro de la habitación.

—Su jefe de seguridad, necesita hablar con usted mi señor— contestó temeroso Suk.

—¡Espero que sea algo importante!—

—Asegura que si mi señor— contesto rápidamente.

—Quédate aquí preciosura, volveré en un minuto, se acercó al cuello de Jungkook — sintió el aliento caliente del hombre.

Que el maestro hubiera salido puso a Jungkook a buscar una salida, analizaba el cuarto viendo que podría usar como arma.

Mientras tanto el Maestro rojo de cólera salió a ver que quería su seguridad que no podía esperar hasta después.

—TENDRA QUE SER MUY IMPORTANTE PARA INTERRUMPIRME—

—Lo es señor— el seguridad mostró el video de la cámara en su celular.

—¿Una mujer?, ¿Qué hace una mujer a esas horas en la puerta de mi casa husmeando en mis terrenos?—

—No lo sabemos maestro, pero me pareció sospechoso y vine a avisarle—

—¿De cuando es este video?—

—De hoy por la madrugada Señor—

—¡Y ME LO VIENES A DECIR HASTA AHORA!, FUERA Y MANTEN TODO VIGILADO—