Amelia
Dos días habían pasado desde aquel beso con Daniel, joder, siempre se me complican las cosas. La verdad es que necesito tanto besarlo, estar en sus brazos de nuevo y más pero tengo que entender que estar con él es imposible después de que me haya traicionado. Estaba en la mesa con mis abuelos, desayunando.
- Amelia - Dijo mi abuelo - ¿Ahora vas con tu padrino por lo de tu comercial?
- Si abuelo - Sonrió - Con el éxito que tengamos, todo el dinero va para la Unicef para los niños necesitados
- Saliste igualita a tu madre - Dijo mi abuela y sonreí - Siempre intentando ayudar a las personas
- Tengo todo abuela, quiero solamente ayudar a los niños necesitados - Le di un sorbo a mi café con leche - Abuelo, ¿me vas a dejar en la oficina de mi padrino?
- No - Lo mire fijamente - Lo siento, me surgió un asunto urgente en la oficina pero te voy a pedir un taxi
- ¿Y cómo voy a saber yo cuál es el taxi? - Río - No es gracioso, hay millones
- Es un Mercedes Benz clase C - Alcé una ceja - Es un auto negro, no es grande, es pequeño y debe estar afuera del penthouse
- Qué moderno el taxista - Río mi abuela - Bueno, me tengo que ir, je les aime
Les di un beso en la mejilla a cada uno, fui a mi habitación a buscar mi celular, me hice una cola de caballo y me dirigí a los ascensores del penthouse. Estaba comenzando primavera pero en Francia al principio siempre hace frío. Por eso me puse unas calzas con lineas negras y blancas, sweater blanco, abrigo caramelo y unas botas negras. Salí del ascensor, me despedí del conserje y salí del edificio. Efectivamente, había un Mercedes Benz esperando en la calle, me dirigí, abrí la puerta de los asientos de atrás y me senté.
- Bonjour - Me puse el cinturón - Je vais au bureau de...
Me quedé congelada, unos ojos verdes me estaban mirando, era Daniel. Esto si era el colmo, en verdad que si. Me saque el cinturón y salí del auto rápidamente, estaba apunto de entrar al edificio cuando me alcanzó.
- ¿Qué quieres? - Me miro fijamente - Contéstame, no te me quedes mirando
- Te dije que no me iba a ir de aquí hasta que te recupere - Reí sarcásticamente - No estoy bromeando
- ¿Me estás siguiendo? - Negó - ¿Y entonces cómo sabías que necesitaba un taxi?
- Por tus abuelos - Me quedé congelado - A ellos les conté todo lo que pasó
¿Qué más me faltaba? Iba a tener una conversación seria con mis abuelos, estaba llegando al límite.
- Ja, esto es el colmo - Suspiré - Ni de coña me voy a subir a ese auto prefiero caminar
- Pero si son 4 kilómetros caminando - Lo mire fijamente - Es más rápido en auto
- Tienes razón - Saqué mi celular - Voy a llamar a Adrien para que me venga a buscar
Estaba apunto de llamarle cuando me quitó mi celular de las manos, iba a reprochar mientras me cargo, estaba en su hombro, típico.
- ¡SUÉLTAME! - Estaba pateandole - ¡BÁJAME EN ESTE INSTANTE!
Abrió la puerta del copiloto y me depositó en el auto, me cerró la puerta mientras estaba intentando abrirla pero la maldita puerta estaba con seguro. Escuche como abrió la puerta del piloto, se sentó y me miro fijamente.
- Ponte el cinturón - Lo ignore - Joder
Se acercó a mi mientras me ponía el cinturón, mi respiración se estaba acelerando, era algo inevitable cuando estaba cerca de él. Se acomodó en el asiento mientras él se ponía su cinturón.
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Ella
RomanceDaniel Vera quedó destrozado con el rompimiento con el amor de su vida, Amelia Romero. Pero descubre la verdad acerca de su traición y decide ir a Francia para recuperarla a toda costa. Su amor sigue estando a flote y más fuerte que antes pero algun...