Capítulo 12

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Amelia

Estábamos en la cima de la Torre Eiffel, contemplando la noche, era maravilloso las luces que se podía ver desde esa vista, por algo es la ciudad de la luz. Queríamos aprovechar el tiempo perdido al máximo, ayer al despertar sabiendo que todo se había solucionado me había aliviado. Estaba viendo el paisaje, mientras Daniel me abrazaba por detrás.

- Me gusta la vista - Me di vuelta para verlo - Pero tú eres muchísimo mejor comparado a esto

- No digas tonterías - Acaricié su cabello - La vista es hermosa, no todos los días se puede apreciar una así

- Prefiero apreciarte a ti en vez de esta vista todos los días de mi puta existencia, mi amor por ti sigue creciendo cada día más Amelia - Sonreí - Jamás dejare de amarte Amelia, tenlo por hecho 

- Necesito de ti, de tus besos, de tus caricias, que me hagas el amor todas las veces que quieras porque o si no estaría seca - Sonrió levemente - Te amo Daniel, más que a nada en este mundo

Nos fundimos en un beso, apasionado pero no podíamos hacer nada más ya que estamos en un lugar público. Nos separamos y nos dirigimos al ascensor ya que iban a cerrar la parte de la cima de la Torre Eiffel. Llegamos abajo, nos salimos del ascensor y nos dirigimos al auto. Estaba apunto de abrir la puerta cuando Daniel me detuvo.

- Espera - Alcé una ceja - Anda a los asientos de atrás

No entendía nada pero aún así obedecí, abrí la puerta y me senté en el asiento de atrás. Escuche que Daniel también abrió a la puerta, se adentró, cerró la puerta y se abalanzó sobre mí. Me beso de una manera salvaje, al igual que yo, me acosté en los asientos de atrás y Daniel estaba encima mío mientras nos besábamos. Su boca se separó de mis labios y bajó a mi cuello, empezó a succionar. 

- Daniel - No me hizo caso - Aquí no

- ¿Por qué? - Mi respiración se aceleró cuando empezó a succionar más fuerte - ¿No te parece excitante?

- No es eso, solo que... - Dejó de succionar y después pasó su lengua por mi chupón recién hecho - Estamos en el estacionamiento de la Torre Eiffel, en un auto y apunto de hacerlo

- A la mierda con eso - Empezó a sacarme mi blusa azul - Vamos a hacerlo aquí y punto, joder, se me puso durísima con solo verte en sostén

- Daniel, nos pueden ver - Me ignoró mientras sacaba mi sostén - No quiero que nos vean, imagínate si... Oh cielos

Empezó a lamer uno de mis pechos, mierda, se sentía exquisito. No tenía otra alternativa, lo haríamos aquí mismo, de todas maneras sería divertido. Le saque su polera, calló en algún lugar del auto, regresó a mi pecho mientras sostuve su cabello y empezó a lamer mi pezón nuevamente pero con más rápido haciendo gemir aún más. Le dio una leve mordida a mi pezón y se dirigió al otro repitiendo las mismas acciones, estaba en el paraíso cuando sonó mi celular. 

- Ni se te ocurra - Cerré los ojos - Hazlo y tendrás consecuencias 

- Tengo que hacerlo - Agarré mi celular - Es el director, mierda, por favor no hagas nada mientras habló con él

Se mordió el labio inferior mientras conteste la llamada, si Daniel haría algo estaría muerta de la vergüenza.

- Hola Señorita Romero - Me mordí el labio - ¿Cómo está?

- Director Rogers - Daniel me lanzó una mirada picara - ¿Bien y usted?

- Muy bien, lamento llamarla a estás horas - Daniel me empezó a desabrochar los pantalones y le lancé una mirada asesina - Pero necesito informarle algo

Iba a responderle cuando me sacó las bragas junto con mis pantalones, empecé a susurrarle algunas cosas en francés, estaría muy avergonzada si el director empezará a escuchar uno de mis posibles gemidos o jadeos. 

- ¿Hola? - Empecé a ponerme nerviosa - ¿Señorita Romero?

- Lo siento director Rogers, el wifi es muy malo en el penthouse - Daniel entró dos dedos en mí y tuve que agarrarme del asiento para no gritar - ¿Q-qué me decía?

- Necesito informarle algo - Empecé a transpirar por aguantarme mis jadeos - Hubo un cambio de planes 

Daniel sacó sus dedos en mí y empezó a mover con sus dedos mi clítoris.

- ¿E-en q-que? - Cerré los ojos disfrutando del placer - ¿D-director R-rogers?

- ¿Señorita Romero, está bien? - Me preocupé - La puedo llamar en otro momento si usted desea

- N-no, lo e-estoy escuchando - Daniel empezó a mover más rápidos sus dedos - Ss-iga

- Perfecto, sigo - Me mordí el labio inferior para evitar gritar - ¿Recuerda la junta que íbamos a hacer con las universidades Columbia y Harvard?

- S-si Director - Daniel abandonó sus dedos de mi clítoris, que alivio - Lo recuerdo señor

- Ellos van a venir en dos días más - Me quedé en shock - ¿Hola?

- Lo siento Director Rogers, me pilló desprevenida - Daniel acercó su boca a mi zona íntima, mierda - ¿Y por qué se debe eso?

Daniel con su lengua empezó a dar círculos sobre mi clítoris, en este momento estaba agarrando su cabello fuerte para así no poder gritar pero sabía que iba a explotar en cualquier momento. 

- Se debe porque Harvard tuvo algunos problemas y nos pidió si podíamos adelantarlo, nosotros aceptamos... - Solté un gemido - ¿Qué fue eso?

- M-mi vecina Director, con su n-novio están al lado mío toqueteándose en el a-ascensor - Mire a Daniel, sus ojos tenían una maldad que me podían matar - Lo lame-ento pero no te-nía otra elec-ción

- ¿Entienden lo que está diciendo Señorita Romero? - Eché la cabeza hacía atrás - Porque sería u...

- M-mire y-yo voy a estar a-allí D-dire-ctor Ro-ger-s, no se pre-ocupe, mañana mismo me regr-esó en la noche - Pude ver a Daniel sonreír malicioso - M-me ten-go que ir, a-diós y graci-as por avisarme 

- Gracias a usted Señorita Romero, lamentó mucho haber arruinado algunos planes - Suspiré - Adiós y que tenga muy buena noche 

Corté la llamada y solté unos gritos de placer que tenía guardados. Daniel siguió torturándome con su lengua, le dio una leve mordida a mi clítoris y llegué al orgasmo. Estaba transpirando, odio eso. 

- Te dije que iba a haber consecuencias nena - Me estaba recuperando - Ahora vas a poder gritar aún más

Tenía los ojos cerrados pero escuché que se estaba desabrochando su pantalón, abrió algo, al minuto después entró en mí y grite nuevamente.

- Mierda, te sientes jodidamente bien nena, eres mi puto paraíso - Gemía demasiado fuerte - Eso nena, disfrútalo 

Estaba en el paraíso, enserio lo estaba. Seguimos así por unos minutos hasta que me corrí con un grito, a los segundos después él también. 

- Eso a sido espectacular Daniel - Lo mire - Pero mierda, el Director Rogers pudo haber sospechado algo

- Que se joda, nos estaba interrumpiendo - Puse los ojos en blanco - ¿Por qué te llamó?

- Tengo que volver a la universidad, van a venir dos universidades importantes y tengo que estar allí - Suspiró - Tranquilo, mañana igualmente vamos a disfrutar 

- ¿Follarte todo el día? - Negué - ¿Entonces?

- Ya lo verás - Alzó una ceja - Va a ser maravilloso, te lo aseguro

Nos levantamos de los asientos, recogimos nuestra ropa, nos la pusimos y salimos del auto. Abrí la puerta del copiloto y me adentré en él auto nuevamente, Daniel se sentó en el del piloto y nos fuimos. Definitivamente, el sexo en el auto me había encantado y se volvería a repetir.


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Hola, cómo están? Ufff, esto esta hot. @vampiirediariesfan me dio la idea de que nuestra pareja lo hiciera en el auto, me gusto la idea. NECESITARÉ TERAPIA, URGENTEMENTE!

Un abrazo :)

EllaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora