Ella

Capítulo 17

Daniel

Hoy día era la mierda de las universidades Harvard y Columbia, después de algunos días de preparación y organización por fin todo estaba listo, no estaba interesado en lo absoluto pero lo tenía que hacer por ordenes del director Rogers. Estábamos en el campus de la universidad, estaba con Amelia viendo los puestos que habían hecho.

- Daniel, quita esa cara de aburrimiento - La mire fijamente - Todo aquí esta muy interesante

- Tú eres lo único interesante nena, lo demás es una mierda - Bufó - ¿No te aburres?

- Por supuesto que no, es muy interesante saber sobre otras especialidades - Sonrió - Además, cada universidad hacen sus propios descubrimientos junto expertos y por eso hacemos estos puestos cada año

- Yo lo encuentro una pérdida de tiempo - Puso los ojos en blanco - ¿Qué tal si repetimos lo de ayer?

- No, Alicia escuchó mis gemidos - Se puso roja - Me estuvo torturando con una charla de hacerlo en lugares públicos mientras nos dirigíamos a la clínica 

Me asusté de inmediato. ¿Clínica? Joder, si algo le pasaba me moriría.

- ¿Estás bien? - Asintió - ¿Entonces?

- Fue a hacerme unos estudios porque según ella puedo tomar pastillas anticonceptivas - Suspiré aliviado - Si resultan bien, de todas maneras no las voy a tomar

- Joder, me asustaste demasiado nena - Río levemente - No te rías, si algo te pasara no sé lo que haría, es la verdad 

- Tranquilo, no me pasa absolutamente nada - Sonreí levemente - Y te digo de una buena vez que nunca más lo haremos en un lugar público

- ¿Por qué no? - Mi sonrisa se eliminó y le susurré - ¿No quieres que todos se enteran que te estoy follando en la universidad?

- No, aparte de eso porque no está bien, así que NUNCA más - Bufé - Quisiera cambiar de método, como el implante anticonceptivo

- Eso lo veremos en los estudios nena - Asintió - Después de que se terminé esta mierda te voy a mostrar la sorpresa que te tenía

- ¿Enserio? - Asentí - No puedo esperar pero ahora tengo que ir a buscar algo a la biblioteca, espérame aquí 

Me dio un beso en la mejilla y se fue. Me sentía jodidamente afortunado por tenerla, aunque no la merecía, ojalá jamás me dejará. Pude ver que unas chicas de diecinueve años me miraban otras no, se estaban mordiendo el labio inferior, estoy seguro que querían pasar el rato conmigo pero eso era imposible. Había una que me llamó la atención, era de estatura media, ojos color café al igual que su cabello, era atractiva, eso no se podía negar. Por una extraña razón me resultó muy familiar hasta que una de sus amigas le susurró algo y su mirada se posó en la mía, mierda, ya sabía quién era. En sus ojos empezaron a surgir lágrimas mientras desviaba la vista de mí, tenía que hablar con ella, por lo menos unos segundos. Se alejó de los puestos, camine rápido hasta ella, caminaba en una parte donde no había nadie y le agarré el brazo. 

- Emily - Las lágrimas empezaron a caer por sus mejillas - Joder, a pasado mucho

- Si, cinco años desde que me destruiste la vida - Me quedé paralizado - Pensé que jamás te volvería a ver pero mira, aquí estamos 

- Mierda, yo... - Se limpió las lágrimas - Si se que la jodí pero...

- ¡¿QUÉ LA JODISTE?! - Me quedé callado - Apenas mis papás se enteraron, me echaron de la cabeza, deje mi familia y mis amigos POR TU CULPA

- Si, me lo dijiste - Las lágrimas volvieron a bajar por sus mejillas - Aún recuerdo ese día

- Ni siquiera me ayudaste, hasta te supliqué - Me sentí un poco mal - Aunque te haya confesado mis sentimientos por ti, aún así no me quisiste ayudar en la situación que estuve por tu culpa