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"Kyle Pov's"
Ya hacía una semana que me había casado con Rose. Todo fue perfecto, a excepción de que no tuvimos luna de miel al instante porque queríamos esperar a la época de celo, para estar más enganchados, palabras de Kobu.
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En la manada todo estaba tranquilo, se respiraba paz por dónde fueses. Pero como siempre, uno que otro intruso que quería hacer de las suyas en mi territorio y pues como eso no es posible e imperdonable, pagaron lo que tenían que pagar, claro que no se lo comenté a Rose, ella los hubiese perdonado o incluso se hubiese enojado conmigo por lo que hice.
Volviendo al presente; a partir de mañana comenzaba la luna llena, que era cuando Kobu tomaba el control total de mi cuerpo sin yo poder objetar, también era cuando íbamos a saber que haría él con Rose, pues ella ya está empezando a liberar esas hormonas dulzosas que atraería a cualquiera, por eso estoy más alerta con ella y con mis ahora tres hijos.
Sí, después de hablarlo bien, decidimos adoptar al pequeño Andrew, ¿Por qué? Simplemente porque mi mujer se enamoró de ese niñito y como yo a ella no puedo decirle nunca que no, pues ahora ese bebé lleva nuestro apellido. Debo admitir también que me agrada esa criatura, y por alguna razón Kobu y yo lo vemos como nuestro cachorro, y ahí si no sé el por qué del asunto.
Ahora solo me encuentro en el retrete sentado esperando a que mi luna se termine de bañar, no quiso hacerlo conmigo. Mal por ella, se lo pierde.