Harry vivió una mentira, lo traicionaron, lo perdió todo solo tiene aquel giratiempos que le dio el antes de morir, siente su alma desvanecerse sin el, el era su alma gemela, toma una bocanada de aire y gira, escucha pasos apresurados pero ya era ta...
Hoy era el partido de quidditch, Gryffindor vs Slytherin, el día con el troll lo avían regañado por salir de esa manera descabellada, pero Harry estaba satisfecho con lo ocurrido, hoy no asistiría al partido, por fin avia dado con una pista del corazón de Hogwarts después de tanto tiempo y no quería ir aún partido que por lo menos ya sabría como terminaría, con la victoria de Slytherin, ya que como no estaba muy probablemente perderían, también recordaba la cara molesta de Granger y Ronald el día después del troll, ah como desearía tener una cámara para haber inmortalizado ese momento ese día río con ganas, al estar todos en el partido empezó su misión, así nadie lo molestaría, siguió buscando entre los rincones, hasta que lo encontró en lo más profundo de Hogwarts justo en medio del castillo, si que estaba grave esa oscuridad que lo cubría era demasiada.
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Tenia que purificar lo, ya que si no lo hace puede ser contraproducente para todos, así que poniéndose manos a la obra investigaría para purificar lo, tendría que pedir un báculo de sacerdotisa que pertenecía a su familia, los Goblins podrán ayudarlo, con eso en mente salió para empezar a experimentar.
Ya abia pasado el tiempo y aún no avía encontrado las palabras perfectas, algunos alumnos ya se avían ido a empacar sus cosas, pudo saber que Draco se avía quedado pero eso sí que lo extraño, en sus recuerdos el se avía ido, solo negó, primero lo primero, salió de su habitación tal vez con algo de aire fresco lo aga relajarse, camino por los casi vacíos corredores, viendo como los alumnos se iban a sus hogares.
Ya era navidad, despertó con una pequeña sonrisa, pudo ver unos cuantos regalos, así que fue a abrirlos, unos eran de los gemelos con una nota de que pedía su amistad, Harry sonrió volver a tener de amigos a los gemelos sería hermoso, así que acepto pero se los diría en persona, Harry pudo ver otros regalos uno era de la Señora Weasley, ese lo quitó inmediatamente de su vista tenía hechizos de ataduras y eso no le gustó para nada, otros eran de Granger y de Ronald, tenía muchos hechizos, si que estaban desesperados, tomo otro regalo y era de Zabini unos chocolates Italianos sonrió abiertamente eran sus preferidos y otro de Nott de chocolates de Suizos, con una nota de que pedían su amistad, aquellos que fueron sus salvadores, le pedían su amistad, tomo otro regalo y era de color verde con plata, al abrirlo se encontró con una caja musical al abrirla se sorprendió era la misma pieza que avía escuchado de Draco, al ver la nota era de Draco.
"Espero que te guste y me dejes ser tu amigo, así que por favor ¿Aceptas mi amistad?"
Harry no podía creerlo soltó lágrimas tanto de dolor como de felicidad, su corazón lloraba ante los recuerdos ésos recuerdos que lo atormentaban día y noche, que aveces no lo dejaban dormir y lo llevaban al día de la muerte de Draco y de George y de Zabini de todos aquellos que quiso, no podía dejarlo y aunque supiera que estaban vivos pero su dolor era mucho más grande, le daría la respuesta mas tarde, abrió el regalo que conocía muy bien era el de Dumbledore que contenía la capa de invisibilidad, leyó la nota.
