Harry's princess 𝗵.𝘀

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Chasqueaba mi lengua, esperando a que Pete llegara a casa de Connor. Justamente estaba con la falda más corta que tenía en mi clóset, además de que era mi favorita. Con esa falda, provocaba a miles de micropenes. Incluyendo a la de Connor.

-- hey nena -- me alcanzó un fernet.-- ¿Te gustan? -- asentí con inseguridad. Nunca los había probado. Pero por lo que Brianna me había contado. Son amargos.

-- gracias -- sonreí. Connor y yo de pequeños teníamos una relación un poco rara. A los trece años tuvimos ciertos roces. Luego se metió con mi prima. Buh. Eso fue asqueroso. Al menos no metió su micropito en mi. -- diablos, es tarde -- me levanté del mueble y comencé a mirar los cuadros de la familia de Connor. Su madre era muy joven cuando lo tuvo. Su padre era ya algo viejo. ¿O tal vez era el padre de su mamá? Salgo de mis pensamientos cuando Connor se acerca a mi y con rudeza acerca mi trasero a su miembro -- oh vaya, eso se siente tan... -- y antes de terminar, sentí vibrar mi celular. -- ¡ups! Te lo perdiste -- doy la vuelta y mirándolo fulminantemente a los ojos,respondo a Pete. En buena hora. -- te demoras un santiamén

-- ¡estoy afuera!

Colgué rápidamente y me dirigí a por Pete.

-- el maldito quería follar conmigo -- murmuré. le dí un golpe en el brazo, luego le hice la señal para que pase y de una vez por todas largarnos de ahí. -- bueno, - suspiré -- nos tenemos que ir Connor. Fue divertido venir a tu casa -- sonreí sarcásticamente. Claro que no fue así, lo único que hicimos fue hablar de porquerías y nada de acción. Buh.

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--¡Fue tan aburrido! -- exclamé. Solo quería ir a casa. -- Como sea, pudimos haber follado. Aunque en realidad no era tan apetecible. Ya sabes, es un chico tan patético.-- me recosté sobre el respaldar. Dios, esos asientos son como estar sentada en el regazo de Shawn Mendes.

-- Eres una perra Morgan Bonner -- sonreí. Me encantaba serlo. Ya saben,joder a los hombres de esa manera. -- te admiro nena.

-- lo sé -- hice un puchero. Lo miré. Pete no estaba mal. Era tan apetecible, pero muy sano. Aún así lo amaba. -- cariño, me encanta que seas pasivo -- besé su mejilla. -- buh, llévame a casa. Mañana Brianna, tú y yo iremos a la fiesta de Louis Tomlinson -- mordí mis labios. Ese chico se me antojaba desde tercer año.

--¿ con quiénes te acuestas para darte el lujo de estrenar una fiesta así? -- reí a lo que dijo.

-- eso es estúpido Pete -- negué mientras reía. No había chico más sano que Pete. -- simplemente, se trata de ser la puta que todos quieren pero que todas odian, ese es mi secreto -- en serio disfrutaba hablar con Pete. Pero lamentablemente había llegado a casa. Y vaya sorpresa, había un auto de lujo estacionado. -- adiós nena. Te veo mañana. -- le mandé un beso volado. Ya saben.

Mientras me iba acercando a la puerta principal. Me dí cuenta que había un invitado ¿Acaso eran los amigos del idiota de mi hermano?
Abrí la puerta lentamente. Como si se tratara de que fuera una ladrona en fuga.

--¡Morgan Bonner. Llegas muy tarde! -- mierda, me había olvidado de subir por la escalera del vecino. -- deja tus cosas ahí, lávate las manos y ven a cenar. -- rápidamente fui a hacer lo que me dijo mi madre. Claro, aún no había visto quien era el invitado. De seguro era alguno de los amigos de mi padre. Buh. Que aburrido.

Apresuradamente caminé hasta llegar a la sala. MIERDA .
Aquellos ojos tan hermosos. Aquellos labios. Vaya... No tenía palabras.
Quedé estupefacta al topar miradas con él, pero no dude en retirar rápidamente mi vista. Me senté y casi por negligencia, comencé a llenarme la boca de brócoli.

-- Morgan -- dijo mi mamá. La miré , luego a mi padre. Y por último al hombre este. Diablos. Hubiera preferido quedarme en casa de Connor dándole una mamada a duras penas. -- ¿No vas a saludar?

-- oh, cierto -- sentí como mis orejas quemaban. Miré al hombre nuevamente y le estreche la mano. Oh mierda, estoy en graves problemas -- Hola, Soy Morgan -- dije casi vomitando el brócoli-- digo,buenas noches.

-- buenas noches señorita Morgan -- me sonrió. Diablos. Esa sonrisa. Me mojaba tanto. Sus ojos eran tan penetrantes, sentí estar en el cielo mientras lo miraba. Sin embargo,cuando recordaba estar con mis padres, volví al infierno. -- Harry. Harry Styles -- que nombre tan hermoso para un hombre tan calenturiento ¿Verdad que sí?
Asentí, mientras me acomodaba la falda. -- mucho gusto.

-- el señor Styles es jefe de tu padre, Morgan. -- juro que casi vómito el brócoli restante en la hermosa cara de Harry Styles. Miré a este hombre y trague saliva a duras penas.

-- oh, vaya -- sonreí. Tan solo me imaginaba siendo follada por Styles y el mundo se me iba a hacer trizas. -- eso es bueno -- metí un poco de carne a mi boca. En estos momentos no me importaba comer como animal.

-- ¿Te gusta la comida? -- asentí. Claro que no, estaba horrible. De seguro lo hizo mi hermano. -- lo hizo tu hermano. -- mi padre sonríe. Con más razón, estaba horrible.