Capítulo 23: Eres tu✔️

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Su aliento se atasca cuando la ve. Una chica con cabello castaño y ojos redondos cafés. Su rostro redondo y esa expresión angelical que la caracteriza.

Ochaco Uraraka.

Pero...¿como?
¿Cómo podría ser ella?

Ella camina con ojos perdidos y rastrea el lugar con una pizca de pánico que logra alertarlo.

Y después las pupilas cafés se clavan en él.

—¿Quién eres tú?—Su voz, su jodida voz suena confusa, no hay reconocimiento en su cara de ángel.

Él bien podría estar alucinando. Pero ese olor que tan bien conoce le dice que es real y que la mujer que se encuentra frente a él es su hembra.

—¿C-Cara de ángel...?—Cuestiona con voz ronca, estira una mano hacia la fémina pero esta retrocede con los ojos abiertos de par en par.

—N-No te conozco—Niega con la cabeza de forma frenética y eso le rompe el corazón, el olor de su miedo lo estremece.

Como el día que la encontró en el bosque con heridas.

¿Por qué tanto castigo? Se la quitan y se la devuelven sin recuerdos.

—¡Blast..!—Kirishima se acerca corriendo y frena de golpe cuando ve a la castaña. Parpadea tres veces seguida y luego mira a Bakugo en shock—. ¿Que mierda, hombre? Debo estar alucinando.

El rubio no responde y se limita a mirar a su mate como si fuese a desaparecer en cualquier momento. Los temblores violentos que parecen recorrerla le muestran que no debe presionarla.

Pero, joder.

Después de tanto tiempo sus manos pican por tocarla, por abrazarla y escuchar su corazón latir. Que ella le diga que lo ama. Soñó con ello ciento de veces.

—¿Que vienes a decirme?—Pregunta a su beta sin explicarle nada.

—L-La tumba de Ochaco no está...

Y Bakugo gruñe, de forma violenta y sin reparos. Su confusión es tan avallasante que intenta reprimir las sensaciones que lo embargan, nada tiene sentido. Absolutamente nada.

—No creo que sea una coincidencia—Prosigue el pelirrojo sin quitar los ojos de la temblorosa morena—. Desaparece la tumba y luego e-esta aquí, viva.

Las cejas de Bakugo se fruncen y ladea la cabeza de forma pensativa. Analiza de arriba a abajo a su hembra, tiene la ropa hecha jirones y lodo alrededor de su rostro contando al hecho que parece desorientada.

¿Que mierda pasó? Ninguna criatura podría revivirla, los hombres lobos no cuentan con ese tipo de poderes.

La única con el poder de hacer eso es la Diosa luna pero luego rogar que no se la llevara Bakugo simplemente comenzó a pensar que no tenía caso, ella no le haría caso y no le traería de vuelta a la azabache.

¡Algo está mal en ella, hay algo diferente!—gimotea inquieto rys—. Debes escuchar bien.

Tragándose algunas cuantas maldiciones se concentra en sus oídos auditivos escuchando el latido constante de su corazón y entonces lo nota.

No está latiendo de forma humana.

Es el latido de un hombre lobo.

Eso explica la extravagancia de su olor, algo más puro y poderoso. Terrenoso.

—¿Como mierda?—Brama. Sintiendo su ira crecer se acerca y ella alza la cabeza con los labios temblorosos, sin embargo su barbilla no baja. La valentía presente en sus inocentes facciones—. ¿Cómo mierda estás de regreso?

La mate del alfaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora