Abandonada.-|Jacob Black|

Capitulo 38: Visita inesperada

Narra Madison Cullen:

Permanezco en el límite del bosque sumamente nerviosa esperando a Jacob. A lo lejos veo a Jake y a su lado una cosa peluda, al verme esta correr hacia mi, ¡Es mi Kiara!...Pero...Aún es una pantera. Extiendo mis brazos y al faltar pocos centímetros se lanza hacia mi aterrizando en mis brazos como una tierna y pequeña gatita nuevamente.

-¡Kiara!.-La atraigo hacia mi y la abrazo con fuerza.-Ohh, estoy tan feliz de verte.-También aliviada, se supone que aún no debe alejarse mucho de mi. Soy una pésima madre. Aunque...-No puedo creer que te transformarás. ¡Aún no era tiempo!. ¡No debiste ir detrás de ese vampiro!, ¡pudiste salir herida!

-¡Meow!

-Bobita.-Me incorporó con ella en mis brazos y miro a Jacob.-¿Donde estaba?

-Intentando trepar a un árbol.

-Gracias por traerla.

-No es nada.

-¿Te dio muchos problemas?.-El niega, sin embargo miro los rasguños que Kiara le ha hecho.-¿Seguro?

-No es nada.

-Eso no parece nada. Déjame curarte.

-Tranquila, se curará solo.

-No con heridas causadas por ella.-Apunte a mi gata.-Vamos, curare tus heridas sin peros.-Indiqué que se sentara en un tronco partido, así lo hizo.

-¿Que tiene que ver qué me rasguñe tu gata?

-No es una gata común y corriente. Es un espíritu protector.

-Ya veo...¿Sigues molesta?.-Pregunta luego de unos momentos de silencio, evitó mirarlo y continuó curándolo. Elevó mi varita y la colocó sobre las heridas. De a poco van desapareciendo.

-Si.

-Lo siento, pero...

-Ahórratelo. No quiero saberlo.

-Maddie...

-¡No!

-Maddie...

-¡Enserio!, ¡No!

-¿Porqué me evades?

-Porqué eres un idiota.

-Eso ya lo dijiste.

-También te dije que no quería hablar contigo de ese tema, y aún así aquí estás, molestándome de nuevo.

-Lo siento.

-Ya me lo dijiste.

-Maddie, voy a protegerte. ¿Lo sabes, no?

-Comienzo a creer que no te convenceré de no hacerlo.

-Pues no, no lo harás. Voy a protegerte con mi vida si es necesario. Porque te amo y no quiero volver a perderte.-Solté un suspiro.

-Aunque fuera verdad lo que dices, ya no puedo creerte, no después de todo....Lo siento Jacob.
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Días después...

-Llegarán pronto.-Informa Alice mirándonos.

-¿Cuando?

-Es algo incierto. Un día, quizá dos. Se mueven de prisa, será pronto.