Orange and Blue: Cuentos para niños.

21. Cuentos para la verdad

Ambos caminaban por la acera, Fluke llevando los artículos que el castaño había comprado mientras que este solo podía verlo de reojo en una expresión seria. No entendía muy bien por qué exactamente venía a su lado y lo que es mucho más importante, por qué lo había ayudado, mas sin embargo no podía saciar sus dudad debido a que primeramente no quería hablarle, y segunda no podría escucharlo bien.

Todo aquello viajaba por la mente de Tin mientras ambos esperaban ahora que el semáforo cambiara a rojo para poder cruzar, aquel mismo que solía cruzar con Can cuando ambos eran unos adolescentes, siempre se reunían en aquella parada y también se despedían en esta.

-Vamos...- Apenas escucho a Fluke decir aquello cuando el muchacho ya estaba corriendo hacia la calle.

Tin miro hacia el semáforo, el cual seguía en verde, por lo que con preocupación miro hacia Fluke, ahora el pelinegro caminaba despreocupadamente mientras un automóvil se acercaba a una velocidad excedida.

-¡Fluke! - Grito el castaño para después correr hacia Fluke, empujándolo en una perfecta tacleada que mando al pelinegro de bruces a la acera y dejándolo a él también sobre el piso a media calle. Con el corazón latiéndole a mil por hora, cerro los ojos con la esperanza de que así el impacto seria rápido.

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Pov's Can

Mi nariz estaba mas roja de lo usual, mis manos sudaban en exceso, sentía que el corazón se saldría de mi pecho y todo estaba pasando en mi desde que aquella camilla llevaba el cuerpo semi inconsciente de Tin a la ambulancia.

En aquel momento poco me importo si Fluke se encontraba bien, si Hyun me acompañaba tratando de regular mis pasos apresurados, o si bien llegaba la madre de Tin y venia junto a él; todo eso me importaba muy poco comparado con la idea de que podría perder a mi amigo en un abrir y cerrar de ojos.

-Familiares de Methadnan Tin- Llamo una doctora en voz alta, haciendo que Hyun y yo nos acercáramos hacia ella -Él se podrá bien. Afortunadamente solo tiene algunos golpes y una costilla fracturada, pero nada que no sane con analgésicos y descanso de seis semanas.

-¿Puede irse hoy? - Pregunto Hyun a lo que la doctora negó

-Se quedará en observación hasta mañana. En un momento vendrá una enfermera para que puedan pasar a verlo.

-Y ¿Cómo está el joven Pongsapat? - Pregunté una vez que recordé a Fluke.

-El esta en urgencias, recibiendo curación a sus heridas- Dijo como ultimo la doctora para después despedirse e irse.

-Iré a avisar a su madre- Menciono el menor -¿Iras a ver a Fluke?

Negué con la cabeza mientras apretaba los labios con una extraña mezcla de enojo y decepción, algo bastante confuso ya que ni siquiera sabia el porqué de sentirme así, en algo que había sido un accidente.

-Bien entonces puedes ver a Tin primero- Dijo el chico para después darse la media vuelta e irse.

Después de un rato de que Hyun se fue, una enfermera había llegado para llevarme a la habitación donde se encontraba Tin, quien a simple vista solo tenia unos cuantos morados en el rostro y la piel algo pálida.

-Solo no lo haga esforzarse ni hablar mucho- Me advirtió la enfermera para después cerrar la puerta tras de sí.

Me acerque hacia él y toque su mejilla con mi dedo anular, ocasionando que abriera los ojos de forma floja. Tenía tantas preguntas por hacer, pero seguramente ahora mismo no tenía ni siquiera energía para hablar.

-Lo siento...- Susurro débilmente desviando la mirada de mi -... No fue mi culpa.

-Cállate- Le dije algo molesto -Necesitas descanso.

A este paso no podría saber si estaba preocupado o molesto, quizá eran ambas.

Tin se enderezo con dificultad en la cama y volvió a mirarme mientras apartaba mi mano de su rostro -Tengo algo que decir...

-Creo que eso podría esperar, por ahora necesitas descansar- Dije, pero el negó con la cabeza y prosiguió.

-Me gustas- Soltó en una pequeña sonrisa

¿Qué? Acaso estoy escuchando mal.

-Estoy enamorado de ti Cantaloupe...- El dejo salir una risa que fue cortada por el dolor -Pero sé que ya te gusta alguien más y eso está bien. No te estoy pidiendo que me correspondas, sino que sepas que pase lo que pase yo estaré feliz por ti.

-Tin, yo...- No podía hablar debido a las palabras atoradas en mi garganta, las lagrimas a punto de salir y aun así no podría decir lo que tanto quería -Yo...

Estuve a punto de decirlo, tenia las palabras perfectas en mi mente solo necesitaba sacarlas de mi en un perfecto "también me gustas", mas sin embargo fui interrumpido por la puerta de la habitación abriéndose.

Era Hyun, quien se acerco con el entrecejo ligeramente fruncido, dándole un débil golpe en el hombro y un extraño regaño que Tin solo correspondió con una débil risa. No sé porque, pero después de ello me sentía un poco fuera de lugar así que Sali poco a poco de la habitación, en busca de Fluke.

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Ya solo le quedan dos capítulos Yeii!!