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TERCER POV
Cinco que fue encontrado en la biblioteca borracho aferrado a Delores, fue encontrado por sus hermanos Diego y Luther. Los dos lo llevaron de regreso a la casa de Diego, que era donde estaba trabajando, un club de boxeo.
Le había contado a su hermano Luther sobre casi todo cuando había viajado de regreso, para encontrarse con su jefe, La encargada.
Luther se inclinó hacia delante abrumado por la noticia y dijo: -¿Cuándo se supone que sucederá? Este... Apocalipsis-.
-No puedo darte la hora exacta, pero por lo que pude reunir, nos quedan cuatro días- dijo Cinco angustiado.
-¿Por qué no dijiste algo antes?- Luther preguntó a Cinco.
Cinco suspiró.
-No habría importado-
Luther lo miró y se burló: -¡Por supuesto que sí, podríamos habernos unido y ayudarte a tratar de detener esto!-
Cinco miró a su hermano sin comprender mientras hablaba.
-Encontré a todos ustedes, sus cuerpos- dijo Cinco herido pero sonaba también sombrío, recordando los cuerpos de sus hermanos.
Luther lo miró palideciendo.
-¿Morimos?- Cinco lo miró y asintió con la cabeza.
-Horriblemente- Miró hacia abajo y terminó: -Estaban juntos, tratando de detener a quienquiera que causará el fin del mundo-.
-Espera, ¿cómo lo sabes?- Cuestionó a Cinco.
Cinco metió la mano en el bolsillo y desenvolvió el ojo. Había levantado la mano y se la había arrojado a Luther.
-Esto estaba aferrado en tu mano muerta cuando te encontré. Debes haberlo arrancado de su cabeza justo antes de que cayeras-.
-¿De quién es el ojo?- Él interrogó.
Cinco exhaló.
-Como dije, no lo sé- Luther volvió la mirada.
-Bueno, hay un número de serie en la parte de atrás. Creo que quizás podrías intentarlo-
-No, eso es un callejón sin salida- Cinco se rió entre dientes -Es solo otro trozo de vidrio- La puerta se abrió de golpe y su hermano Diego entró cubierto de sangre.
-¡Pedazo de mierda! ¿Tienes idea de lo que acabas de hacer?- Luther agarró al hermano para evitar que atacara a Cinco.
-No, déjame- ¡Quítame las manos de mono!- Diego luchó en los brazos de Luther.
