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Me dieron de alta al día siguiente, gracias a Allison, usando sus poderes para hacerlo. Ella estaba en contra, pero la había convencido de que teníamos que estar todos juntos y hablar sobre lo que Cinco nos había dicho.
Estaba sentada en el asiento del pasajero con Allision mientras conducía.
—¿Cómo fue todo, con el tipo que está viendo a V? ¿Encontraste algo sucio en él?— Ella gimió.
—No, encontré su dirección, entré pero no tuve tiempo suficiente para revisar en todas partes. Iba a revisar el ático pero él llegó a casa—.
—Mierda, ¿cómo te las arreglaste para escapar?— Yo pregunté.
—Tranquila, acababa de cruzar la puerta, entró por el frente, y Vanya me odia por cierto, antes de que fuera a su casa. Decidí decirle que algo andaba mal con él— La miré y rodé los ojos.
—Movimiento equivocado, Vanya estaría enojada, ya que ese chico probablemente la hace sentir especial, como nunca se sintió en casa— agregué.
—Vaya, dijo exactamente eso— agregó Allison.
—Sí, bueno, recuerda, yo fui una de las personas que trató de incluirla con nosotros cuando sabes...—
—La mayoría de nosotros no lo hicimos, sí, estoy empezando a aprender eso de la manera difícil, especialmente cuando salí con ella y pasé la noche, fue incómodo— reveló.
—Sí, eso tiende a suceder— Asentí. Poco después del viaje, llegamos a la casa y estacionó.
—Los chicos me van a matar por sacarte del hospital— Dijo mientras me miraba.
—Pft, ¿qué van a hacer? No pueden hacer una mierda— dije abriendo la puerta y frunciendo el ceño —pero yo tampoco puedo, ¿ayudarme?— Dije mientras rodaba los ojos saliendo del auto para hacerme apoyarme en ella.
—No Allison, no lo hagas, no la saques del hospital, no la escuches, no uses tus poderes— Murmuró ásperamente para sí misma mientras entramos a la casa.
—Sí Allison, hazlo, sácala del hospital, escúchala, asegúrate de usar tus poderes— bromeé mientras ella me miraba.
—¡¿Prime?! ¿Qué estás haciendo fuera del hospital?— Preguntó Diego viéndonos entrar de pie al salón.
—Allison me echó de menos, así que usó sus poderes para sacarme— dije sonriendo mientras me miraba con traición.
—¡Mentirosa!—.
—¿Qué?— Canté mientras guiñaba un ojo.
—Te llevamos de regreso— exigió Diego y yo arqueé una ceja.
—¿Y cómo? Si me aceptan de regreso, todos estarán— Levanté la voz tratando de burlarme de una de las enfermeras —Pero señor Hargreeves, su hermana está perfectamente sana, nos aseguramos y estaba lista para ser dada de alta— Dije usando mis manos de una manera dramática.
