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Los días pasan y las heridas sanan.
Por varios días el dolor persevera en mi cuerpo. No era nada grave así que puedo moverme con libertad.

Cuando las visitas a los chicos se avilitaron arrastré a Hinata conmigo para visitar a Naruto. Naruto al verla le sonrió y ella casi se desmaya. Naruto solo le hablaba a ella, parece que le resulta interesante...

Hinata empezó a ir todos los días hasta que Naruto se fue.

Los que están mal son Neji y Choji. Cada vez que podía iba a ver como estaban, en especial a Neji.

Él está más suelto conmigo desde que acepté salir con él, es como si pudiera hacer todo lo que siente. Cuando estoy a su lado es más tierno, no es tan frío, se la pasa jugando con mi mano y le encanta darme besitos cortos. Se ve feliz y lo demuestra de una forma tímida.

Puede que le cueste decir cosas lindas, pero a medida que el tiempo fue pasando se volvió cariñoso.

Naruto se va de la aleda con Jiraiya. No lo volveremos a ver por años.

En estos años todos progresamos. Tsunade me tomó como su discípula apenas se me curaron las heridas. Un mes después, Ino y Sakura se unen.

Todo lo que ella me enseña lo aprendo rápido. Esto gracias a mi clan, sin mis ojos o mi talento medicinal innato, sería más difícil.

Tsunade me enseña muchísimas cosas y gracias a su ayuda tengo una cuarta argolla en los ojos, lo que significa que tengo mejor control, habilidad y visión que antes.

Estos tres años fueron agotadores, el entrenamiento fue aún más duro. Pasamos los exámenes chunin e hicimos misiones peligrosas. Incluso, kanguro, Temari, Neji y yo superamos las espectativas y ya somos jonin.

Pero por fin, hoy, después de tanto tiempo, logro el sello de fuerza.

Corriendo me despido de Sakura y Tsunade para ir a ver a Neji. Tengo que mostrarle lo que logre.

Rápidamente lo encuentro, está hablando con Lee. Corriendo me acerco a ellos

- Chicos, miren- señalo mi frente entusiasmada- es azul- digo aún más feliz.

- Ohhh- grita Lee, se pone aún más feliz que yo. Él me abraza y comienza a saltar conmigo en brazos.

No puedo evitar sonreír, me contagia la felicidad. Por fin me suelta y vuelvo a tierra firme.

- Te queda lindo- me halaga Neji mientras muestra una pequeña sonrisa.

- Gracias- le sonrío. Me acerco a él y me pongo de puntitas para darle un pico a modo de saludo.

Ya tres años que estoy con él ¿quién diría que ibamos a durar tanto?

- Sigo sin entender porqué usas una pollera y un pantalón al mismo tiempo- digo con una sonrisa en la cara al apreciar su nueva ropa.

- Lo dice la que lleva una campera que no abriga- Neji sigue el juego. Lee se ríe.

Es verdad, todos cambiamos nuestras ropas.

Como dijo Neji, tengo puesta una campera finita que termina a la altura de las costillas y es manga corta. Ni siquiera está abrochada. Solo está ahí por que me queda di vi na.

En la espalda de la campera negra con toques turquesas, se encuentra el logo del clan.

Bajo la campera llevo puesto un top enrejado negro. Para la parte inferior un pantalón tiro alto cómodo y ceñido que me deja los tobillos al aire.

Todo mi conjunto es negro salvo por los detalles de la camperita.

- Pero me queda divino- pongo una de mis manos en mi cintura desnuda.

- No más que a mi- Lee pone amabas manos en su cadera y se reclina en un solo pie.

- Aah- Neji suspira con cansancio mientras niega con la cabeza.

- Eu divino- llamo a Lee- ¿Ya le dijiste a Tenten?- él de acerca rápidamente a mi y me tapa la boca.

- Shhh- me calla y mira para todos los lados, luego niega con la cabeza.

- ¿Le vas a decir? Porque... ¿quién podría rechazar al guapo más guapo de la Aldea?- sus ojos brillan.

- ¡Ahí voy Tenten! Ohhhh- grita y se va corriendo.

- Que patético- dice Neji al verlo correr.

- Patético fuiste vos que no te declaraste- bromeo y él frunce el ceño.

- Mentira, yo te expresé todo lo que siento, solo que te desmayaste y no llegaste a escuchar lo último- dice con vergüenza mientras me mira a los ojos. Tiene los cachetes colorados.

- Awww tenés los cachetes rojitos- digo con ternura. Él aparta la mirada con vergüenza.

Agarro a Neji del brazo y tiro para darle un besito en la comisura del labio. Él sabe que le dejé el labial marcado y me mira con los brazos cruzados mientras suspira. No le gusta que le dejé marcas.

- ¿Vamos a comer algo?- dice al fin y me toma de la mano.

- ¡Si!- entrelazo nuestros dedos y lo arrastro hacia un restaurante- hoy tengo plata ¡invito yo!

- ¿Vas a poder fracasada?- sonríe de costado.

- Fracasada tu chota- pateo suavemente su tobillo, Neji solo suelta una pequeña risita.

El lugar que elegí es bastante normal, no tiene muchos lujos ni es un puesto ambulante, es algo que puedo pagar.
Luego de comer decimidos sentarnos en un banco a disfrutar de la tarde, el clima está precioso.
A Neji le cuento todo lo interesante que describí hoy, la verdad no es mucho pero la conversación se va por las ramas hasta que dejo de hablar de la nada.
¿Ese es Naruto? ¡Hace años no veo a Naruto! Estoy segura que es él. A lo lejos lo veo sobre un poste de luz, mi vista no falla, es él.

- NARUTO- grito para llamar su atención. Me paro y camino un poquito. Neji me sigue.

Él baja del poste y viene hasta nosotros.

-_____ cuanto tiempo- sonríe- te quedaste chiquita- me revuelve el pelo.

- Ni que fueras alto- bromeo- además tengo una altura promedio.

- Ey Neji- Naruto lo saluda.

- Ohh Naruto- de la nada aparecen Shino y Kiba. Kiba lo saluda.

Ellos se saludan y hablan un poco.

- ¿Ya se enteraron?- pregunta Kiba- hay fiesta en la mancion Hyuga.

- Hinata me comentó algo- dice Neji fríamente.

En la esquina vemos que Hinata se asoma. Viene hasta nosotros.

- Chicos- nos llama tímidamente- hoy voy a hacer una fiesta ¿quieren venir?- ella juega con sus dedos.

Siempre Fuiste Vos (Neji y tú/vos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora