Not Even Close「Soqi

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Ambas chicas se encaminaban por el pasillo, hablando de cosas triviales y explicando la estructura del edificio para que la mayor no se fuera a perder al terminar su clase.

La castaña le había dicho a Yuqi que sabía cuál era su aula, excepto que no había podido encontrar el pasillo de aquel departamento.

Pero a la china comenzaba a extrañarte a donde se dirigía la coreana, puesto que habían pasado ya varias clases y de los de años mayores también.

Ya llevaban un buen rato caminando, pero la castaña se veía atenta a las aulas que pasaban.

Por lo que mejor no preguntar demasiado ni molestar a nadie.

Durante el recorrido, Song se había percatado nuevamente de su separación con Soyeon en el aula. Por lo que quería terminar de llevar a la inocente muchacha lo más rápido posible para ir en busca de su..¿compañera de banco?

─¡Es ésta!─el grito emocionado de la castaña hizo que Yuqi volviera a tierra.

─Que bueno que la hayamos podido encontra- dijo la china mientras giraba la cabeza hacia el aula donde se había detenido la mayor.

Espera, ¿que?

Yuqi giró su rostro totalmente hacia la castaña.

─¿Pero si esa es mi aula?─habló boquiabierta la china─¿Estas en años menores?

La mayor sonrió.

─Estoy prácticamente cerca de terminar la carrera, por lo que me dejan ir a dar vueltas a las distintas universidades para rellenar con más información de clases de otros lugares.

─¿Pero porqué te has metido en años menores si estás a punto a de terminar?

Yuqi estaba confundida y dejaba salir toda duda a pesar de que fueran prácticamente desconocidas, lo que a la castaña le pareció adorable.

─Ahh, porque en este año ven partes muy buenas sobre varias materias─le explicó la coreana─Y mi mejor amiga está en la misma carrera aquí.

Es cierto, le había mencionado algo de su mejor amiga en el departamento.

Ambas se adentraron al aula, sin saberlo, buscando a la misma persona.

Yuqi la halló al instante, puesto que sabía dónde se sentaba exactamente, sabía a dónde debía mirar para encontrarla.

Una sonrisa esbozó de sus labios al verla.

Pero la presidenta la miró más que sorprendida.

La china no comprendía, ¿tenía algo en el rostro?

¿Había sucedido algo?

─¡Soyeon!

Todos dentro del salón se sorprendieron y giraron hacia la dueña de aquella desconocida voz.

No podía ser cierto.

Todo pasó en un segundo, dejando a Yuqi atónita junto con el resto de las personas.

La castaña había salido corriendo hasta la presidenta y se había abalanzado sobre sus brazos con una emoción incontrolable.

─¡Te extrañé tanto!─dijo abrazando aún más a la pelinegra.