Chaeyoung.
— Oh, hola-. Saludo sorprendida al verle recargada en el marco de la puerta; su mirada se mantiene en todo momento sobre el suelo.— ¿Qué haces por acá? ¿Acaso se te está volviendo costumbre el visitarme por las noches?-. Rio ligeramente al recordar cómo, curiosamente, esta no era la primera vez que aparecía frente a mi puerta un viernes por la noche.
— Jeongyeon y yo terminamos.
Mi gesto va desvaneciendo a medida que pasan los siguientes segundos.
— ¿Qué?
¿Acaso había escuchado bien?
— Terminó conmigo hace unas horas.
Lo había hecho.
No pude evitar el abrir mi boca ante la confirmación que me estaba dando.
Habían terminado.
— ¿Estás bien?
— No. Ni un poco-. Niega para después alzar finalmente su vista y mirarme.
Sus ojos estaban enrojecidos e hinchados. De estos salían lágrimas continuamente, las cuales, en un primer instante, hicieron que reaccionara finalmente.
Cierro la puerta en un movimiento rápido para después acercarme a ella y quitar lo que vienen siendo los restos de su llanto generado en silencio. Lo hago cuidadosamente y con una clara preocupación comenzando a crecer dentro de mí.
Luego de unos segundos, al fin logro quitarlos.
Le observo con atención y sin decir palabra alguna.
— Te voy a abrazar, ¿de acuerdo?-. Alcanzo a decir luego de unos segundos.
Asiente.
En cuanto alcanzo a rodear su cuerpo completamente, es cuestión de tiempo para que me corresponda con lentitud. Sentía que tiritaba, mas no sabía si era por la manera en que la noche se sentía demasiado fresca o por otra razón existente.
Me quedo sin saber que hacer en cuanto escucho cómo un sollozo escapó de su boca.
Temblaba por la otra razón; esta era el que estaba llorando.
Mierda.
Como consecuencia de lo que estaba ocurriendo, el dolor en mi pecho comenzó a hacerse presente de inmediato, mi cabeza inició a evocar pensamiento tras pensamiento y, para culminar todo, un malestar en mi garganta empezó a crearse rápidamente.
Esta noche sería larga.
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Poems [Michaeng]
Fanfiction¿Cómo podía alguien escribir así? ¿Cómo lograba aquel autor o autora hacer que el corazón de la japonesa latiera de tal manera? ¿Quién rayos era? Demasiadas dudas, demasiadas preguntas, demasiados sentimientos encontrados que crecían conforme entrab...