Poems [Michaeng]

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Chaeyoung.

La conexión de nuestros ojos no es capaz de romperse. Se mantiene aún cuando el silencio reina sobre nosotras y el viento un tanto helado choca sobre nuestros rostros.

¿Tenía sentido el que mencionara que no era necesario el hablar? Porque, sencillamente no hacía falta el que alguien soltara palabra alguna para comunicarnos. De alguna manera, podría decir que hablábamos con nuestros ojos.

Sí, mi corazón se encontraba latiendo como loco.

Sí, el nerviosismo dentro de mí estaba a flor de piel.

Y sí, sentía como si en cualquier momento fuese a dejar de ser capaz de respirar apropiadamente.

Todo por el simple hecho de tenerle frente a mí.

Regreso a la realidad en cuanto parece soltar algo que parece imperceptible para mi sentido de audición.

— ¿Disculpa?-. Parpadeo un par de veces.— Perdona, no te escuché bien. Últimamente he tenido un par de problemas con el poner atención-. Formo una ligera mueca para después reír cortamente ante mi broma formada.

No reacciona ante mi intento de broma. En vez de aquello, se mantiene observándome fijamente, lo cual me logra desconcertar un poco.

Me estaba mirando un tanto diferente a comparación de antes.

— Uhm... ¿Está todo bien?-. Cuestiono llevando mi zurda hacia su hombro cercano.

— Chaeng...

— ¿Sí?-. Elevo mis cejas mientras mi atención permanece sobre ella.

— Lo lamento.

No alcanzo a cuestionar el "¿por qué?".

Si de por sí ya me había resultado difícil el mantenerme estable, esto fue lo que en definitiva arruinó los intentos que había hecho para conseguir dejar de lado mis sentimientos y hacer que todo siguiera su curso natural y predestinado.

Me estaba besando. Myoui Mina me estaba besando.

Había conseguido acercarme a ella gracias al haber tomado en un movimiento rápido, el cordón blanco de mi prenda superior. Sus labios fueron los que dominaron en su totalidad todo el beso, ya que apenas y pude corresponderle este.

Sentí aquella descarga nuevamente. Esa que solo he sentido con ella.

Caí en cuenta de lo que estaba pasando luego de unos segundos. En cuanto lo hice, fui yo quien se separó abruptamente.

Fue un beso corto.

— No-. Alcanzo a soltar con mi pecho subiendo y bajando continuamente.

— C-Chaeng, yo...

Niego un par de veces al levantarme de donde estaba sentada anteriormente y dar una última mirada hacia ella.

Luego de aquello, sin poseer aún un buen sentido de orientación, comienzo a alejarme de la banca de madera a pasos rápidos, los cuales hacen que luego de un tiempo empiece a correr sin tener como tal la idea de algún rumbo que seguir.