Capítulo LX: Luz roja

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KKTown, Seúl, Corea del Sur...

Shin Hye se sentó a lado de su amiga y suspiró muy cansada.

- " ¿Estas bien?¿te lastimaste?" - le pre-
guntó Layla.

- " Estoy bien...¿cómo has estado en este
tiempo? ¿como va todo recientemente?
" - le preguntó preocupada, pues no la a po-
dido ver por su apretada agenda.

- " Todo va bien..." - le respondió.

- " Eso es bueno " - sonrió - " Estas muy
bonita combinando con los niños " - la
halago.

- " Fue idea de Amy, ella es toda una fa-
shionista, y a decir verdad me conven-
ció usando a mis hijos en mi contra, ¿no
es así par de traidores miniatura? " - bromeó.

Mi-Yon miró hacia otro lado y Wei Yue,
dormía, a ese niño si que le gustaba dor-
mir todo un día para jugar toda la noche.

Shin Hye rió por lo bajo al ver a Mi-
Yon actuando ignorante ante su madre.

- " Esa Amy, y estos niños... Pero luces bien " - repitió.

- " Si, aunque no me gusta traerlos y exponerlos a las cámaras, pero si los paparazzis los siguen es peor, enton-
ces no importa si los cuido, tarde o temprano los reconocerán..." -

- " Pero... si no te gustaba, no los hubie-
ras traido aquí, aunque lo que dijiste no
es malo... Aunque los protegiste de las
cámaras, tu hermana y Li Yini expusie-
ron su imagen, lamentablemente la prensa los seguirá, y tarde o temprano
esto pasará..." -

- " Y es mejor que yo lo haga, a que lo hagan otros... igualmente tienen guar-
daespaldas. Contrate uno para la ca-
sa, y dos para Mi-Yon en la salida del jardín de infancia..." -

- " Eso es bueno... Oh, camarero, espe-
" - detuvo al hombre de las bebidas, a-
garró una copa de sojū de la bandeja - "
¿Quieres? " - le preguntó ofreciéndole u-
na copa.

- " No. Así, estoy bien " - respondió.

- " Mami, ¿que es eso rojo?¿es jugo? " -
le preguntó Mi-Yon apuntando las copas
de Vino que llevaba un mozo.

- " No, no es jugo, es vino, aún no lo pue-
des beber, eso es malo para los niños " - respondió Shin Hye al notar la curiosidad de la hija de su amiga.

- " Oh~ " - emitió Mi-Yon al descubrir que era eso.

- " Gracias " - le susurró.

- " De nada " - le susurró en respuesta a su agradecimiento.

- " ¡Señoras y señores!¡Por favor entren
a la sala de proyección ordenadamente,
los invitados tienen un asiento con su
nombre! " - hablo el director Park por el
micrófono.

Layla acomodó al adormilado Wei Yue
entre sus brazos y con cuidado se puso de
pie

- " Layla, creo que hay que esperar un poco e ingresar después de que la ma-
yoría de ellos hayan entrado al salón y
esten acomodados, en vez de que este-
mos todos amontonados y te lastimes " - comentó Shin Hye

La Emperatriz Del CINEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora