¿POR QUÉ?

Capítulo 14

Simón

No he visto a Madd desde hace un día, hoy le daban el alta. Es mi cumpleaños, y no lo siento así, no es igual si no estoy con ella, nada es igual sin ella. Trato de darle tiempo, de darle espacio, de que se sienta bien.

Se que no es fácil despertar y darte cuenta de que parte de tu vida ha sido robada, y mucho menos de esa forma tan drástica.

También me han robado parte de mi vida, y al igual que ella no pude hacer nada para detenerlo, aunque el robo no fue directamente hacía mi. Fue hacia mi padre.

Y lo más egoísta es que fue el mismo quien se robo la vida, muchos creen que falleció por haber enfermado, eso fue lo que hizo creer mamá. Pero la verdad es que el se suicidó, dejándome, dejándonos.

No le importo una mierda el sufrimiento de su hijo y de su familia. Quedé demasiado mal con eso, sobre todo por qué fuí yo quien encontró el cuerpo colgado de mi padre en el baño, quedé muy mal que no quería tener contacto con nadie, ni siquiera con Madison.

Chris es el único que lo sabe, fue mi amigo y mi confidente, al igual que yo lo fui con el, cuando solo teníamos ocho años y el perdió a su hermana.

No se lo dije a Madison, por qué me daba demasiada vergüenza decir que mi padre se colgó porque ya no quería estar con nosotros, y es que aún no entiendo, el tienda todo lo que un hombre podría desear, tenía una familia que lo amaba, era un buen padre y un gran esposo, un trabajo estable, ¿Acaso no era feliz?.

Esa es la única pregunta que me he hecho desde que el decidió irse.

He logrado sobrellevarlo, pero su recuerdo aún duele.

Me aleje de Madison un tiempo por ser un cobarde y nuevamente lo vuelvo hacer, y ni siquiera es culpa suya, otra vez no puedo mirarla a la cara, es culpa mía que ella haya pasado por todo aquello.

¿Qué clase de persona deja sola a la chica que ama?. Así es, la amo demasiado, pero no puedo decirle, aún no, no después de esto, quiero ganarla nuevamente pero quiero esforzarme.

Me hace mucha falta verla, abrazarla y sentir sus hermosos labios unidos a los míos, pero no puedo, me siento demasiado culpable—idiota— eso es lo que soy, ¡Carajo!, ¿En que estaba pensando?, ¿Cómo se me pudo ocurrir una idea tan absurda?.

La voz de Chris me saca de mis atormentados pensamientos. —Ya deja de culparte—. Habla el rubio, sirviendose gaseosa. —Jamas hubiéramos imaginado que eso ocurriría.

Lo observo un momento con el ceño fruncido, hasta ahora entiende que si fue culpa mía.

— Es que si es culpa mia—. Le informo —Yo la dejé sola, por mi culpa se fue... debí seguirla, aún si ella se molestara, debí quedarme.

—Está bien—. Contesta con cierto tono de cansancio. —Si, lo acepto, no debimos dejarla sola, eso fue muy estúpido, pero lo hicimos... Lo hicimos porque jamás pensamos que algo así pasaría. Pero no quiero verte así, Sarah también se echa la culpa, y... Y yo no quiero que se sientan así, ¡Carajo!.

Se levanta del sofá y se dirige a su habitación, tal vez tiene razón, jamás hubiera pensado que algo así le pasaría. Pero aún así no debí, no debí dejarla sola.