𝐋𝐎 𝐐𝐔𝐄 𝐘𝐎 𝐒𝐄 𝐃𝐄 𝐓𝐈 || THORGAN HAZARD ||

✾| • treinta y siete • | ✾

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Conduzco lo más rápido hasta la dirección que Lizbeth me envió por whatsapp. Dejo mi automóvil en el estacionamiento y entró al lugar ¿Un club nocturno? ¿Qué está haciendo Lizbeth aquí?

Camino entre la gran cantidad que personas que hay en este lugar, no veo a Lizbeth en alguna parte. Miro mi teléfono y veo que está en línea, le envío un mensaje preguntándole dónde está.

"El pasillo que lleva al baño" Guardo mi teléfono y camino hasta llegar al pasillo que conduce al baño. Escucho un par de gritos, al parecer una discusión, en el baño de mujeres, abro la puerta y veo a Lizbeth, la expresión de su rostro no es la mejor. Pero también miro a ese tal Ricardo, sabía que no podía confiar en él.

— ¿Qué está sucediendo? — Intento acercarme a Liz, pero Ricardo se adelanta y la toma de la cintura, estúpido.

— ¿Acaso no te enseñaron a tocar? — Miró a Liz, esto no me da una buena señal.

— Cierra la boca idiota — Me acerco a él y lo apartó de Lizbeth — ¿Te hizo algo? ¿Intento hacerte daño? — Miro a Lizbeth y ella solo le abraza — Ya está todo bien, ya estoy aquí — Susurró mientras acarició su espalda dulcemente.

— Pero mira que tiernos — Me separó de ella y vuelvo acercarme a ese imbécil — ¿Qué me vas a golpear? ¿Vas hacer lo mismo conmigo como lo ir le hiciste a ese chico cuando intentó sobrepasarse con Liz? —

¿Cómo lo sabe? ¿Cómo es que él sabe todo eso?

— Thorgan — Siento la mano de Liz sobre mi hombro — No hagas algo de lo que te puedas arrepentir? —

—No te quiero ver cerca de ella, no te quiero ver cerca de mi chica idiota — Le suelto un golpe a ese idiota, por eso termina en el suelo.

Tomó la mano de Lizbeth y salimos del baño y del club nocturno en general. Nos subimos a mi auto y conduzco hasta su departamento.

— Podemos ir a tu casa, no quiero estar sola — Asiento.

Cambió el rumbo hasta mi casa, ninguno de los dos dice nada en todo el camino. Después de veinte minutos llegamos a mi casa.

Abro la puerta y me hago a un lado para que ella entre, miro mi teléfono y le mandó un mensaje a Erling diciéndole que Lizbeth está conmigo sana y salva.

Al escucharla llorar guardo mi teléfono y voy al salón principal.

— Todo está bien — La abrazo, me duele verla de esta manera y todo es por mi culpa.

— Gracias por ir, eras a la única persona que quería ver... Contigo me siento segura Thorgan —

— Y yo te dije que te protegería de todo — Acarició su mejilla — Y lo voy hacer Liz, te amo — Murmura y beso sus suaves y delicados labios.

— ¿Entonces si me quieres? ¿Si me amas? — Murmura al separarnos — Pero tu te vas a casar con Anne... —

— No, no me voy a casar Liz. Porque a quien quiero y amo es a ti — Lizbeth sonríe y me abraza — Liz —

—¿Qué sucede? — Limpio sus lágrimas con mis pulgares.

— ¿Ricardo intentó hacerte daño? ¿Intentó sobrepasarse contigo? — Noto como Liz baja la mirada — Necesito que seas sincera conmigo —

Lizbeth suspira — Está tarde lo encontré el centro de la ciudad y me invitó a cenar, acepte porque creo que con eso me iba olvidar de lo sucedido pero todo se salió de control, él intento... — No dice más y termina llorando.

Estuve un rato más a su lado hasta que Erling y Danny llegaron, los dejó solos por un momento.

— Gracias por cuidarla — Miro a Erling entrar a la cocina.

— Fue mi culpa todo lo que le pasó Erling —Mi amigo me mira sin entender.

Le conté todo lo sucedido a Erling sobre Liz, las expresiones de su rostro decían todo.

—... Pero ahora sé que la quiero Erling, la quiero a mi lado y no permitiré que nada ni nadie le haga daño — Terminó de hablar.

— Si Lizbeth quiere estar contigo,reparte su decisión pero no sé si Danny lo haga. Pero solo hazla feliz Thorgan, y cuídala sobre todo de ese tal Ricardo — Asiento — Algo en él no me agrado, sabía que no podía confiar en él —

— Lo sé, no me daba confianza. Solo por Liz no le di su merecido pero si lo vuelvo a ver no creo que pueda controlarme — Dije.

— Ni yo — Respondió Erling.

Erling y Danny estuvieron por un par de horas hasta que se fueron de mi casa. Subí a mi habitación y mire a Liz que ya estaba dormida, me acerco a ella y beso su frente.

— Te quiero Liz, descansa pequeña — Murmuró y beso nuevamente su mejilla.

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