Vuelve a mí © Cloudville

16; Hay algo en Hiden Covey que no está bien

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CAPÍTULO 16

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-¿Y si hablas con él? -giré a verle con extrañes. Finnegan estaba detrás de mi con una pequeña sonrisa en sus labios.

-¿Y yo por qué? -inquirí.

-Algo me dice que seguro tú lo vas a animar -sus manos se posaron en mis hombros brindándome apoyo. Hiden llevaba más de media hora en el balcón de la habitación, todo tras lo que pareció ser una discusión con Oliver.

Finn se veía preocupado por ello, Bianca y Oliver hablaban en la puerta de la sala en voz baja. Oliv se veía calmado a diferencia de Hiden, que le temblaban las manos posadas en el barandal que no le permitía caer del balcón. El resto de los chicos estaban sentados en los sofás todavía, hablando entre ellos, murmurando posiblemente de lo ocurrido.

Aunque estoy segura que ambos se esforzaron por hacerlo privado, principalmente Oliver, quien no quería arruinar el cumpleaños de Hiden.

-No lo creo -comenté mirando a Finn por encima de mi hombro.

-No estás obligada a nada -sonrió.

-Entonces, ¿por qué me lo propones?

-Porque llevas mucho tiempo mirándole con esa expresión divertida -acusó logrando que mis cejas se fruncieran.

-¿Cuál expresión?

-Esa de curiosidad y preocupación a la vez -despeinó mi cabello tras contestar, dando media vuelta para alejarse-. ¡Suerte!

¿Esa era una expresión divertida?

Solté un sonoro suspiro para tomar camino hasta las puertas de cristal que aislaban el balcón, al deslizarlas llamé la atención del de ojos cafés que anteriormente me daba la espalda.

-Ah, eres tú, ¿Qué quieres? -dijo con poco interés mirándome tan solo de reojo. Aunque sus palabras no sonaron groseras.

-Nada -afirmé encogiéndome de hombros para detenerme a su lado, imitando su postura mirando hacia el bosque a la distancia-, ¿O es que tú crees que quiero algo?

-Todos quieren algo.

-Entonces sabes la respuesta a ello, te lo dije en el Festival.

-¿Aún sigues queriendo eso? -soltó una pequeña risilla irónica.

-Si, aunque las ambiciones siempre crecen o cambian cuando hay alguien de por medio.

-¿Quién se interpone entre tus ambiciones? -giró a verme con una sonrisa burlona-, ¿Dylan? -volvió a mirar al frente.

-Algo así.

-¿Dónde está ella? -preguntó en un tono bastante bajo al cabo de unos segundos.

-En un lugar donde ni tú ni yo podemos sacarla -por tercera vez, logré que me mirara, pero no dio indicios de querer dejar de hacerlo-. Hiden, yo solo quiero traerla de vuelta.

-¿Dónde está?

-¿Cuál es la posibilidad de que me parezca tanto a ella?

-No me pongas acertijos, solo quiero... -dejó sus palabras sin continuar. Preció un susurro, casi una suplica.

-Intento hacer que entiendas.

-¿Te parece fácil de entender?

-Por ello me esfuerzo -con eso logré que su expresión de preocupación se relajara un poco-. ¿Desde hace cuanto conoces a los Mackenzie?