You, my favorite photograph (Pausado)

23: Dumb and Dumber

Como de costumbre, desperté un poco tarde y todo gracias a los mensajes de Chris.
No era hora del almuerzo pero definitivamente no era hora del desayuno, aun así Chris me conocia tanto que sabía que aun estaba en la cama y me exigia que llegara con cafe, o no llegara.
Me reí y levanté rapidamente de la cama.
No tomo tanto arreglarme y salír del departamento directo al estudio de Chris.
Compre café para ambos y algunas donas para el equipo y me dirigí tranquila al lugar.
Cuando por fin llegué al segundo piso, me encontré con un rostro familiar.
Jack, el fotografo principal de Chris, estaba devuelta.
Él me sonrió alegre.
— No esperaba ver a mi Jefa hoy —dijo emocionado, haciendome reír—. Gracias por ayudar otra vez, Jefa. De verdad, muchas gracias. Siempre eres tan amable.
Jack era un joven estudiante en epoca de examenes, y esa era la razon por la cual lo remplazaba a veces. Era un chico agradable y no paraba de agradecerme cada vez que lo ayudaba.
Me llamaba "Jefa", aunque realmente no lo era. Chris solía decír que era porque me admiraba.
En cualquier caso, otros habrian despedido al chico rapidamente y conseguido un fotografo que este libre. Pero Chris era demasiado amable, y a mi también me agradaba, asi que no podía pensar en una mejor opción para que todos salieramos beneficiados.
— No debes agradecer, Jack. Lo hago porque me gusta.
Él sonrió.
— Mi Jefa es realmente genial.
Rodé los ojos.
—Antes que nada, dime como te fue en tus examenes —dije, sonando como una hermana mayor.
Jack sonrió orgulloso.
— Soy el primero de mi clase.
— ¿Qué? ¡Eso es maravilloso! —dije emocionada. Jack no solo se ocupaba del trabajo, tambien se esforzaba en sus estudios y admiraba eso—. Toma esto como un regalo de felicitación —dije entregandole la caja de donas.
Jack la tomó encantado.
— ¿Debo compartir?
Eso me hizo reír.
— Bueno, lo compré para todos pero creo que mereces toda la caja.
— Sigue soñando —oí una voz de mujer.
Me giré y saludé a Sally con la mano.
Ella sonrió, tomó una dona y siguió de largo.
— Tienen suerte de que me gusta compartir —se quejó Jack.
— Si, pero asegurate de comer algunas porque el monstruo come galletas las robara todas —dije, señalando a Shane.
Él se acercó y quiso tomar mi café.
Me alejé y le di mi peor mirada.
— Oye, nunca compartes —gruñó.
— Por ultima vez, deja de robar mi cafe, Shane.
Jack le sonrió de manera burlona.
— Mi Jefa trajo donas, y dijo que  puedo quedarmelas  todas.
Shane lo miró con mala cara y luego a mi.
— El niño tiene trato especial solo porque te dice jefa —llevo la mano a su corazon—. Y yo que te llamo amor, ni siquiera eres capaz de darme un poco de tu cafe.
Hice una mueca de disgusto.
— Diuh y doble diuh.
Shane rió.
— No olvides que me amas.
— No olvides que podría derramar cafe caliente en tu enorme cabeza —amenace.
Él se encojió de hombros y robó una dona antes de volver a trabajar.
Jack negó con la cabeza y tomó una.
— Comeré una y volveré al trabajo, Jefa. Chris está en su oficina.
Le sonreí y dejé que se marchara. Este niño era como un hermano pequeño.
Me dirigí a la oficina de Chris y golpee una vez antes de entrar.
— No sé por qué te gastas en golpear si vas a pasar de todos modos —se quejó sin siquiera levantar la cabeza de sus papeles.
Rodé los ojos y deje su cafe en el escritorio.
— Se dice "Gracias por el cafe, Emma".
— Ya era hora de que trajeras mi cafe, esclava —dijo simplemente, tomando un sorbo.
Me senté en el sofa bebiendo el mio.
— Algun dia voy a golpearte tan fuerte que lamentaras llamarme asi.
Chris sonrió.
— Oh, nena. Eso jamas pasará.
Puse los ojos en blanco.
— Entonces... sé que Shane puede solo con el equipo pero, ¿qué haces  encerrado en el estudio? Siempre eres obsesivo y perfeccionista.
Chris suspiró y se levantó del escritorio.
Se sentó a mi lado pesadamente.
— Estaba hablando con algunos clientes. Esta campaña es muy importante —Chris me miró de reojo—. La semana que viene habra un evento. Quieren que viaje y este presente el dia del lanzamiento.
Lo miré sorprendida.
— ¿Viaje de negocios?
A Chris no le gustaba hacer esos viajes de negocios. La razon principal es que no queria dejarme sola, y aunque no me gustaba que dejara su trabajo por mi, tampoco me gustaba tenerlo lejos por mucho tiempo.
Chris era la unica persona que tenia, y si él no estaba, estaría completamente sola.
Mi cabeza era un lio cuando él no estaba. Ya  que era muy dependiente de Chris, me aterraba que se fuera demasiado tiempo. Como si no volviera.
— La campaña durara cuatro días. Con el viaje y todo... debo ausentarme una semana.
Miré mis manos un poco triste.
¿Una semana? ¿iba a estar sola una semana?
— ¿No puede ir Shane? —me quejé.
Chris suspiró.
— Sabes que Shane no tiene idea sobre estas cosas, por eso me dejó a cargo de las negociaciones.
Tecnicamente Shane también era el jefe, ya que ellos habian abierto el estudio juntos. La pequeña empresa estaba a nombre de ambos, asi como compartian las ganancias y pagos. Pero Shane decia que no tenia madera de empresario, tampoco de jefe, asi que dejaba que Chris se hiciera cargo de todo el negocio, mientras él se ocupaba del equipo tecnico y demas.
Era gracioso porque a veces incluso él trataba a Chris como su jefe.
Mi corazón dolió un poco y me sentí estupida, porque sabía que en realidad no era la gran cosa.
— Bueno —tomé un sorbo de cafe, fingiendo estar bien—. Es importante, y no puedes decepcionarlos.
— Solo me preocupas tu —dijo rodeando mi hombro.
Apoyé mi cabeza en su hombro y dejé que me abrazara.
— No me gusta que estes lejos mucho tiempo. Me asusta.
Mis ojos picaron como si fuera a llorar.
Solo pensarlo hacia que mi corazón doliera. Siempre temia que Chris desapareciera algun día. Que se fuera y jamas volviera a mi.
Sabía que era tonto, que parecía una niña pequeña. Pero incluso el miedo me hacia imaginar cosas, pensar que se iba de viaje y que podia suceder un accidente.
— Nena, no lo pienses demasiado. Aqui, mirame —Chris tomo mi rostro e hizo que lo mirara—. Voy a volver, lo prometo. Volveré y te molestaré como siempre.
Suspiré.
— Me siento sola cuando no estas.
— Puedo intentar llevarte si no te sientes comoda aquí sola —dijo frotando mi cabeza.
— No, supongo que tengo algunas sesiones. Estaré bien —mentí. No tendría mucho trabajo la semana siguiente, pero lo preocuparía más si le decía. Lo miré como si fuera una niña pequeña—. Voy a extrañarte, asi que debes traerme regalos.
Chris rió.
— Llevaré una maleta extra solo para tus regalos.
Traté de no pensar demasiado en el proximo viaje de Chris. Aun faltaban unos dias, asi que hice a un lado mi angustia.
Solo era  un viaje mas de los que habia hecho. Un viaje de negocios importante para su futuro.
Podia soportarlo. Podia soportar una semana.
Chris comenzó a molestarme como de costumbre y mi angustia desapareció un poco. Ambos terminabamos nuestros cafes cuando Shane entró.
— Oye, se supone que debes tocar la puerta —me quejé, haciendolo reir.
— Oh, perdón. ¿Interrumpía sus besos y abrazos? —broméo.
Shane era de las pocas personas que entendía nuestra relación pero le gustaba bromear con eso.
— Interrumpiste las lagrimas de Em porque debo dejarla por unos dias —dijo Chris levantandose y esquivando mi puño.
— Te salvaste.
Shane ocupó su lugar en el sofá y pasó un brazo sobre mi hombro.
— ¿Por qué tiene que ir Chris y no tu? —miré a Shane como si estuviera triste.
Él sonrió.
— Porque vas a extrañarme si me voy.
— ¿Desde cuando se llevan tan bien? —dijo Chris, levantando una ceja.
Shane lo ignoró.
— No te preocupes, amor. Yo cuidaré de ti.
— Entonces prefiero ir corriendo con Chris —me burlé.
— Acaban de rechazarte, amigo —dijo Chris satisfecho—. Acaban de rechazarte por mi.
— Oh, vamos Emma —apoyó su cabeza en mi hombro y puso lo que se suponia era un rostro seductor—. Puedo comprarte café todos los días.
— Bueno, asi la cosa cambia —dije, fingiendo pensarlo.
— Emma, ¿de verdad me cambias asi? ¿por cafe? —dijo Chris, llevando su mano al corazon.
— Correccion, café gratis —asentí—. Ademas, él se queda y tu te vas.
— Auch.
— Acaban de rechazarte, Chris —se burló Shane—. Acaban de rechazarte por cafe, y por mi.
— Solo por cafe. Por ti, ni en mis peores pesadillas —mire a Shane de reojo y golpee su cabeza.
— Eso dolió.
Click.
Ambos miramos a Chris quien acababa de tomarse una foto con su telefono
— ¿Qué haces? —dije mirandolo sospechosamente.
Chris solo se encogió de hombros y tecleó algo en su telefono.
Después de un momento el telefono de Shane sonó con una notificación de facebook.
Lo abrió y me mostró la pantalla mientras sonreía.
— Felicidades amigo, fue una buena toma.
Chris habia actualizado su perfil con una selfie de él señalandonos. Detras se veía a Shane recostado sobre mi hombro y habia capturado el momento donde lo golpeaba, solo que desde ese angulo parecia como si estuviera acariciando su cabeza.
El titulo de la foto rezaba "Emma acaba de cambiarme por Shane, y por café gratis. ¿Desde cuando se llevan bien? No me agrada.", y nos había etiquetado a ambos.
Miré a Chris con mala cara.
— Oye, no subas eso. Las personas creeran que me gusta este tipo.
Chris sonrió triunfante.
— Es lo que ganas por abandonarme.
— De acuerdo, sigan fingiendo que no estoy escuchando como me rechazan —se quejó Shane, mirando la pantalla de su telefono.
  Otra notificación llegó y esta vez tomé mi propio telefono para verlo.
Vi horrorizada como Shane habia comentado la foto con la frase "Esta enamorada de mi y ya no puede ocultarlo".
Lo golpee en el hombro con toda mi fuerza.
— ¿Que demonios es ese comentario?
— Es lo que ganas por rechazarme —dijo simplemente, frotandose el hombro.
Chris comenzó a reír y lo fulminé con la mirada.
— ¡Dejen de estar publicando estupideces y vayan a trabajar!
Shane salió de la oficina riendo, con el ego lo suficiente inflado.
Chris se acercó y besó mi frente, luego esquivo mi puño y salió de la oficina también riendo.
A veces esos dos eran un caso perdido.