IV

256 39 28
                                    

– precalentar el horno a 120 grados, esto sería más fácil si tuviera un encendedor – decía mientras encendía su horno – o si tuviera una Flareon, je, je...

En ese momento, recordó lo que pasó hace una semana en la casa de su vecina Kelly cuando alucinó.

Séptima, Regina, por su nombre y por la ya antes mencionada, debes saber que es una Flareon, para no hacer esto largo, ella es mi personalidad más alegre que tengo

En eso, se quedó pensando de lo que dijo y se retractó mentalmente – creo que haber pasado tiempo con ella me afectó.

Luego de haber preparado su pastel de queso, se fue al baño a ducharse antes de comer, cuando salió, se vistió con una buso blanco y pantalón jean azul.

– ok, ya está todo listo

Dijo partiendo 2 trozos colocándolos en 2 platos, sirviendo 2 vasos de sidra y poniendo música lenta y relajante.

Entonces, fue interrumpido porque alguien tocó la puerta – ya voy – contestó él antes de dejar inconcluso el llenado. La llamada a la puerta volvió a sonar, pero esta vez un poco más fuerte – dije que ya voy.

Al abrir la puerta, vio a Skyler frente a él – hola – saludó tierna, pero Brener solo cerró fuerte la puerta con tal de que algo peor no pase.

– ¿qué quieres?

– hablar contigo

– ha, ¿en serio? ¿cómo las otras dos veces? – pregunté molesto

– no, esta vez es de verdad

– no, ahora no quiero hablar con nadie en este momento

– ¿por qué? ¿hice algo malo? – preguntó azorada

– tengo una cita, Skyler... y si voy a hablar con alguien solo será con Kelly o con... Camerún, creo que así se llamaba... ya que son las únicas que parecen tener la habilidad de escuchar y hablar de una forma normal...

– una... ¿una cita? – preguntó Kelly tras la puerta algo desorientada, luego de unos segundos, su voz no volvió a escucharse

– ¿Kelly? – abrí la puerta esperando verla, pero ella ya no estaba – diablos, la he liado... – dije cerrando la puerta.

Se supone que Charlie debió haber venido, creo que se le hizo tarde, es muy poco elegante que tu primera cita sea en tu casa, pero no importa, al menos ordené todo para este momento, pero si le pedí salir conmigo a Charlie fue porque Rafael me lo ofreció y no porque quiera, tal vez sea una oportunidad.

El tiempo pasaba y Charlie no aparecía, el pastel se estaba enfriando y pues, no es lindo comerlo frío, aunque es pastel de queso, así que, no le veo problema.

Decidí llamar a Charlie, pero ella no contestaba – ¿por qué sigo pensando en volver a hablar con Sky... digo, Kelly? Fue su voz la última que escuché tras la puerta... ¿debo verla antes de mi cita? No, eso sería muy estúpido luego de haberle dicho que no quería hablar con ella.

Brener dirigió la mirada a la puerta y me quedé pensando no en una brillante idea que digamos.

– no lo hagas, no lo hagas, no... lo... hagas, Brener

Ya afuera de mi departamento, en frente del departamento de la Eevee.

– Kelly, ¿estás ahí?, si lo estás... di algo... Kelly – seguía tocando – Kelly, ¿Kelly?

– ¿qué quieres? – abrió ella molesta

– hola, ¿estás ocupada?

– no, ¿por qué? – preguntó seria

Eevee Del 204 [Resubido]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora