El chico de Uber

El sonido de la miseria

Adrien

Tres meses habían transcurrido desde la desaparición de Marinette.
Luka y yo seguíamos enfrentando las averiguaciones sobre el asesinato de Lila su representante y yo el de una mujer a quien ni siquiera conocí .

- No tiene nada qué temer señor Agreste, todo esto es únicamente para que no quede una sola duda de su inocencia.

El detective a cargo del caso de Kagami, jefa de Marinette y de aquel psicópata , me repetia por millonésima vez, la terrible forma en que aquélla había sido secuestrada, bruralizada y asesinada.

- ¿ Desea cambiar su versión señor Agreste?

- No. Yo nunca conocí a esa mujer y desconocía si tenía una relación con Nathaniel Kurtzberg.
La única ocasión en que estuve en el departamento de ese hombre fue cuanto Marinette Dupain Cheng y él, me recibieron en un desayuno.
Jamás recorrí en departamento y mucho menos tenía idea de la horrorosa inspiración que ese loco empleaba para sus terribles obras de " Arte" y aseguro, con mi libertad de por medio, que la señorita  Marinette no es cómplice sino una víctima y que cada segundo en que no la buscan, ese... monstruo la prepara para convertirla en parte de su galería de horror.

- Entendemos su preocupación señor,  le aseguro que,  la búsqueda de la señorita Dupain Cheng,  siguen vigente. En cuanto el presidente de Alemania acepté cooperar con nosotros,  ese hombre será atrapado y extraditado.

- ¿Pero, saben algo de ella?

- Lo lamento mucho pero,  usted no es familiar de la señorita y además sigue bajo investigación.  Todo lo relacionado a ella es confidencial.

- Si, eso pensé pero ella no tiene familia. Está sola.

- Le pido que sea paciente. El viudo de la señora Kagami ya está cooperando y aseguró que jamás lo vio a usted cerca de ella e identificó a Kurtzberg como alguien muy constante en la vida de la víctima.
Es solo cuestión de días para que usted pueda ser libre de salir del país.

Saliendo de la jefatura, Luka entraba dejando una horda de fanáticos con pancartas de apoyo y reporteros a granel.

Al parecer el público lo apoyaba 100% y las declaraciones de decenas de víctimas de sus difuntos ex patrocinadores y unas más, víctimas de Lila, respaldaron su inocencia.

- Adrien ¿Noticias?

Dijo cuando pasaba a mi costado sin mirarme directamente y cubierto por su capucha.

"¿y ahora me hablas, imbécil ?"

Desde aquel día en que Marinette salió del país no habíamos cruzado palabra y mucho menos nos vimos, hasta hoy .

A ambos nos detuvieron en el aeropuerto por disturbios al tratar de detener el avión de Mari y la prensa sacó especulaciones al por mayor de él, que si quería escapar, que si tenía miedo, que si era un asesino sanguinario etc. pero al parecer la gente adora las historias de amor y su versión de intentar rescatar a su amor secreto de las garras de un monstruo le retribuyeron bastante.

- Aún nada.

- Si puedes, ve a mi casa en la noche.
Tenemos que hablar.

Sin mas pasò de largo y yo continúe mi camino.
Me pasé el resto del día trabajando hasta la noche pero sin dejar de pensar en mi adorada Marinette.

Adrien, necesito que vengas al hospital.

Alya fue dada de alta

¿Puedes?