Parte 9:No está sólo.

143 26 4
                                    

Pete se quedó estupefacto al ver como el joven pegaba un puñetazo a Ae, el joven se dirigía a darle otro golpe, pero Pete lo detuvo y dijo:

-No lo hagas, por favor. –Las lágrimas de Pete no cesaban, quería ser fuerte, pero por más que lo intentaba sus ojos no le ayudaban.

-Ae, ahora Pete no está solo, me tiene a mí, ya te dijo lo que querías escuchar, fui lo suficientemente amable para darles su tiempo, ¡pero ya! No quiero que Mi Pete sufra más, ¿No te basto todo el daño que le hiciste? Eres lo bastante egoísta como para seguir haciéndole daño. - exclamo el joven

-Detente, ¡por favor! -Exclamó Pete.

Ae, observa al Joven tenía tantas ganas de regresar el golpe, pero en cierto sentido sabía en su interior que merecía cada palabra, las dudas lo hicieron preso de sus inseguridades, pero sobre todo lo alejo del que sentía era el amor de su vida, ahora todo lo veía perdido, pero quería volver a intentarlo, no podía aceptar que todo sería diferente. Con una voz temblorosa pregunto:

-Pete ¿en realidad ya no me- por un momento la voz desaparece y se escucha entrecortada, como si doliera el terminar la oración - Amas?

-Ae, lo siento, pero ya no, ahora amo a alguien más. Ae sé que serás feliz, no te aferres a mí ¡por favor!, sé que serás feliz sin mí, antes de verme con él tu no me recordabas, estoy seguro que ahora es un sentimiento de obsesión que tienes por mí, te deseo de corazón que seas feliz. No vuelvas a mi, solamente un tonto tropezaría en el mismo error. No te odio por dejarme solo, ahora soy diferente, no necesite besar a nadie más para saber que tú eras el indicado, el único que se encargó de qué pensará lo contrario fuiste tú, no soy tan bueno, sé que nuestro final fue hace mucho.

-Pete, todo lo que dices no es cierto. Soy tú Ae.

-Ae por favor vete. – dijo él joven.

-Pete te amó , lo entiendo, pero el amor que te tuvo se esfumo, por favor márchate, como lo hiciste antes sin decir adiós. - pronunció el joven con el tono de voz más suave que su voluntad le pudo dar.

Ae permanecía en silencio, solo podía sentir un dolor en su pecho, no podía dejar de llorar, quería retrasar el tiempo para poder tomar mejores decisiones y no tener miedo de estar alado de Pete, ahora que haría con su corazón que aún se vuelve loco al escuchar la voz de Pete, su interior se hacía pedazos.

-Pete ¿qué haré sin ti? - pronunció con una enorme tristeza Ae.

-Ae, ayer estabas sin mí.

Cuando nos conocimosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora