9. Mi nuevo secretario - Primera Parte - Mewgulf-(Zaintsee) Terminada

Cuatro

Gulf se levantó muy contento y esperanzado.

-Hoy por fin puede que al fin deje ese tugurio, tendré una oportunidad de cambiar mi vida.

Después de desayunar, se duchó y se puso muy guapo para causar la mejor impresión en esa gran empresa pues debía usar todas las armas eran necesarias para conseguir el puesto.

Cerró su apartamento para ir a la empresa Suppasit y caminó hasta la parada del autobús, dónde esperó uno que lo llevó justo a la puerta del gran edificio.

Suppasit Athletic Corporation constaba de diez plantas de oficinas, era impresionante y magestuoso, este entró y se dirigió a la recepción, donde había dos chicas rubias muy sonrientes.

-Buenos días, ¿qué desea?-le dijo una de ellas.

-Si emm...vengo a una entrevista con la señora May, soy Gulf Kanawut.

La chica lo comprobó en su lista rutinaria, encontrándolo enseguida.

-Muy bien, señor Kanawut... coja el ascensor y vaya a la planta diez.

El chico siguió las instrucciones de la recepcionista y subió mirándose al espejo muy sonriente y esperanzado

-Este es mi lugar y ésta es mi oportunidad-se dijo a sí mismo.

Las puertas del ascensor se abrieron y acto seguido se acercó a la mesa que había frente a él, donde pronto apareció ante él una mujer mayor con su pelo casi canoso por completo y múltiples arrugas en su cara.

-Buenos días, soy Gulf Kanawut.

-Ah si... la cita de las nueve... Muy bien, siéntase ahí, por favor-indicó ésta.

El moreno miró extrañado y esta lo notó.

-¿Te pasa algo?.

-Bueno pensé que me entrevistaría el dueño de esta gran emp...

-El señor Suppasit aún no ha llegado-interrumpió esta seriamente-... de todos modos yo hago la primera entrevista, luego él entrevistará a los más aptos para el puesto.

El moreno se sentó pero ya no estaba tan seguro de conseguirlo pues aquella mujer le parecía demasiado sangrona y exigente.

-Bien comencemos...¿Has traído algún currículum, documento, título o carta de recomendación?, ¿algo muchacho?.

Gulf le entregó su portafolios con sus papeles perfectamente archivados, los cuales May revisó mientras anotaba datos en su blog de notas.

-¿Qué esperas de este empleo, Gulf?- le preguntó entre tanto.

-Pues bueno, en principio quiero que me de estabilidad económica, me saque del restaurante mugriento donde trabajo y me pueda comprar un lugar decente donde vivir.

-Está bien pero eso es a nivel personal pero a nivel profesional, ¿qué es lo que ansias?.

-Pues quiero llegar a lo más alto y quiero tener opción a codearme con otras empresas, otros países y mostrar lo mejor de nuestros productos.

May asintió y lo apuntó.

Después de varios minutos de preguntas y respuestas en las que este fue sintiéndose más cómodo, la mujer fotocopió todos los documentos para hacerle un expediente de posible empleado y lo citó para volver a las cuatro pues sería cuando su jefe llegaría de la reuniones y de la comida que tenía ese día.

El moreno frunció el ceño pues a esa hora era cuando estaba en el restaurante trabajando, debía inventarse algo para no ir y poder acudir a esa entrevista con el dueño o perdería esa gran oportunidad.

Volvió a casa y Mild ya había regresado de su "paseo mañanero", el cual constaba en ir a follar con el vecino de arriba pues tenían una especie de relación y este llegaba al amanecer de su trabajo en una discoteca.

Mild conoció a Zee en una junta de vecinos, el moreno llevaba una semana allí viviendo y aún no conocía a nadie, habían hablado y habían conectado enseguida, por lo que desde entonces, ya llevaban ocho meses de intensos encuentros mañaneros pues la discoteca cerraba a las seis de la mañana y por el día este dormía y el más bajo estaba en el restaurante.

-Amigo-le habló Gulf-...tienes que decirle al jefe que estoy muy enfermo y no podré ir a trabajar... Tengo otra entrevista a las cuatro en esa empresa.

-Está bien pero me tendré que comer tu trabajo...me deberás una muy gorda eh.

-Menos que follemos, te concederé lo que quieras-le dijo este riendo.

-Bueno no me tientes que todavía puedo cambiar de idea... Además no gracias, yo ya tengo a quien me folle.

-Cuanto te quiero, amigo.

-Si, si y yo a ti.