Eran justo las ocho de la mañana de un nuevo día, cuando Mew llegó a la consulta de su psiquiatra y amigo Saint Suppapong, entonces se anunció e impaciente y se sentó donde la secretaria de éste le indicó.Minutos después el castaño apareció dándole paso a su despacho, rápidamente, por lo que el empresario se tumbó en el diván y esperó a que este se sentase para escucharlo.
Cuando el psiquiatra estuvo listo habló.
—Muy bien Mew... cuéntame que te ha ocurrido.
El empresario suspiró profundamente.
—Me estoy volviendo loco...ayer casi despido a mi nuevo secretario sólo porque me hizo un regalo.
—Pero... ¿por qué pasó eso?, ¿qué te llevó a enfadarte tanto?.
—La tarde anterior me llamó Janis para que tomásemos algo, así que dejé mi trabajo y fui a su casa... Ella me esperaba muy arreglada y seductora...No sé porqué fui, realmente yo no tenía ganas de hacer nada.
—Creí que esa mujer te gustaba mucho—Interrumpió Saint—... Tú mismo me has dicho que te encantaba el que esté siempre dispuesta para ti... ¿por qué no te relajaste con ella?.
—Bueno si pero es que la verdad ya lo había hecho.... Ya había eyaculado y no tenía esa necesidad, además creo que ella ya no me gusta como antes.
El terapeuta sonrió muy interesado.
—¿Acaso ya tienes una nueva conquista?.
—No nada de eso— respondió este apenado.
—¿Qué ha cambiado entonces?—preguntó este mientras apuntaba en su libreta.
—Bueno, no sé...supongo que es por mi nuevo secretario.
—Él que casi despides ayer.
—Si ese...Quise agradarle el primer día de trabajo, así que fuimos al restaurante y lo estábamos pasando muy bien, entonces el pidió el postre, y de pronto todo se fue a la mierda.
—¿Por qué dices eso?, ¿qué pasó?—volvió a preguntar el psiquiatra.
El empresario lo miró y respiró profundamente para coger valor.
—Pues pidió el maldito postre y como le gustaba tanto, empezó a gemir y a moverse sensualmente disfrutando de cada trozo que se metía en la boca... Saint, lo hubieras visto, era jodidamente erótico.... Empecé a sudar y me emplamé casi sin darme cuenta... Corrí al baño y de un momento a otro me encontré haciéndome una paja en el retrete mientras pensaba en él.
—Vaya... si que estuvo bien esa comida—dijo este sonriendo.
Mew lo miró con una media sonrisa.
—Bueno... el caso es que cuando subíamos en el ascensor, esos recuerdos volvieron, él estaba tan cerca... Respiré su aroma llenando mis pulmones y recorrí con la mirada su precioso cuerpo...oh joder, estuve a punto de agarrarlo y poseerlo allí mismo pero en vez de eso salí corriendo del ascensor y me encerré en el despacho... Tiempo después llamó ella y me pareció muy buena excusa para salir de allí y no cometer una locura.
—Entiendo... así que te gusta tu nuevo secretario pero no quieres que lo sepa... Accediste a verte con Janis para no enfrentarlo, ¿no es así?—dijo Saint asintiendo.
—Emm... s-si creo que sí.
—Continuemos... cuéntame que pasó en casa de ella.
—Estaba muy sexy vestida y me esperaba con dos copas de vino, me quitó la chaqueta y me aflojó la corbata... Como te dije, ella quería que follasemos pero yo no, de hecho no se me levantó en ningún momento... Se enfadó mucho y discutimos muy fuerte y luego me tiró algo que cogió de la mesa, un portaretratos aunque no me alcanzó pues logré esquivarlo a tiempo sino me hubiese abierto la cabeza.
—Y ...¿qué más pasó entonces?
—Salí de allí y me fui a mi casa, luego me duché y me dormí pero a eso de las tres me desperté por las pesadillas, tomé una pastilla y conseguí dormirme dos horas más pues a las cinco volví a despertarme todo sudado y temblando.
—¿Las pesadillas con tus padres, otra vez?.
Mew negó con la cabeza.
—No, ésta vez eran con Gulf, mi secretario
—¿Con tu secretario?...y dime, ¿Qué pasaba en tu pesadilla?, ¿lo recuerdas?.
Éste asintió muy nervioso.
—E-El se reía, me humillaba mientas ocupaba mi sillón y mi despacho... Ese chico se apoderaba de la empresa de mis padres y me dejaba sin nada.
—Que interesante... ¿Ocurrió algo más?— preguntó el psiquiatra muy intrigado.
Este tragó saliva.
—Si Saint, ayer en la mañana cuando llegué al despacho en mi mesa había tres portaretratos con fotos de mis padres y mías.
—¿De dónde salieron esas fotos?
—De un álbum que tengo en mi despacho y que suelo ojearlas cuando los hecho mucho de menos... así los siento más cerca de mí.
—Supongo que Gulf lo hizo ... ¿eso te enfureció?.
—Si, realmente me volví loco...los tiré al suelo y le grité fuera de mi...lo hice llorar.
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9. Mi nuevo secretario - Primera Parte - Mewgulf-(Zaintsee) Terminada
Fiksi PenggemarÉsta historia esta dividida en tres partes. Mew Suppasit, es un hombre de veinticinco años, muy atractivo y millonario pues es dueño de Suppasit Atlantic Corporation. Gulf Kanawut, es un hombre de veintidós años, licenciado en empresariales y muy am...