Capítulo 1

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Aún recuerdo como si fuese ayer el primer día que entré en aquella vieja facultad. 

Allí estaba él, mirando un tablón de anuncios que estaba cerca de la puerta de entrada, vestido con unos pantalones de Louis Vuitton y un polo de Versace. Me fijé en su físico, ojos claros y de pelo castaño oscuro, ni muy alto ni muy bajito. Un Rolex de oro se ajustaba a su muñeca, y unas gafas negras adornaban su perfecto rostro.

El guapo extraño se percató de que alguien le miraba y se giró hacia mi dirección. Mi pulso se disparó y mis mejillas se cubrieron rápidamente de un intenso rubor, por lo que decidí girar mi cabeza hacia otro lado para que no se diese cuenta de que era yo la que le miraba.

Cuando se alejó de aquel tablón, en el que supongo que estaban las listas de cada clase, me acerqué para ver en qué clase me había tocado. No voy a mentir, estaba con los nervios a flor de piel, ya que no conocía a nadie y soy bastante tímida a la hora de hacer nuevas amistades.

Me dirigí hasta el aula 12, la cual sería mi clase durante todo mi primer año de carrera.

Estudiar psicología siempre había sido mi sueño desde pequeña, encontraba fascinante todo lo relacionado con la mente y la comprensión de la conducta humana, por lo que tenía claro que intentaría entrar a esta carrera a toda costa.

Así que aquí estoy, en mi primer año de la carrera de psicología en la Universidad de California.

Cuando entré en mi clase, mis ojos fueron a parar a un punto en concreto, aquel chico misterioso de antes. Miraba con detenimiento su móvil mientras esperaba a que llegase el profesor, tecleando con rapidez.

No me podía creer que iba a compartir clase durante todo el año con él, aunque tenía miedo de que fuese una total distracción para mí, ya que no podía apartar mis ojos de él.

Dejé de mirarle y me senté en uno de los sitios de delante, un poco alejada de él, ya que, si lo miraba durante tanto tiempo sin ni siquiera pestañear, pensaría que soy una loca acosadora, y la verdad que no quería que se llevase esa impresión de mí.

El profesor entró y comenzó a explicarnos cómo estaría estructurada su materia, los exámenes que haríamos y nos recalcaba que debíamos esforzarnos mucho. Comenzó con el primer tema y toda la clase resopló, ya que pensábamos que por ser el primer día solo habría una breve presentación y nos dejarían salir, pero para nuestra mala suerte, no fue así.

Cuando acabó el día, y después de mirar disimuladamente al chico misterioso varias veces, me fui al aparcamiento a buscar mi coche para poder irme a casa. Cuando me meto en el coche, veo como el chico moreno se sube a un precioso Aston Martin negro brillante, sin un maldito rasguño y con asientos de cuero.

Mis ojos se abren hasta que parece que se van a salir de sus órbitas al ver semejante coche, ya que se que es un coche de lujo y, por lo tanto, muy caro.

El chico moreno me mira y al ver mi reacción ríe, a lo que yo dejo de mirar y me pongo roja como un tomate.

Deja de mirarle ya Blair, al final te va a denunciar por acoso.

Veo como sube al coche y se larga, por lo que yo dejo de alucinar y arranco mi coche para poder irme a casa ya, creo que ha sido suficiente por hoy.

Los siguientes días transcurren igual, hasta que, en clase de Introducción a la psicología, el profesor Smith nos pone juntos en un trabajo. Mis mejillas, como siempre, se ponen muy rojas mientras intento reaccionar ante algo tan inesperado y remoto. Me giro y veo que me sonríe, con una sonrisa capaz de dejar a cualquier persona embarazada de cuatrillizos. 

Cuando la clase acaba, se acerca a mí y me dice que vaya a su casa por la tarde para empezar al trabajo, e incluso me pide que le deje mi teléfono para apuntar su número.

- Por cierto, me llamo Griffin- me dice mientras me devuelve el móvil.

- Yo Blair- respondo en un susurro.

- Bueno Blair, luego te mando un mensaje con la dirección y la hora a la que tienes que venir- dice sonriendo.

Me fijo aún más en su boca. Sus dientes están perfectamente alineados y blancos, y sus labios tienen un grosor perfecto.

Creo que se da cuenta de que le estoy mirando, ya que ríe levemente y se lame el labio inferior.

Se despide de mí y veo como se dirige al aparcamiento de la universidad. Estoy nerviosa, no lo voy a negar, nunca habíamos cruzado ninguna palabra, solo algunas miradas y sonrisas, pero nada más allá de eso, y esta tarde voy a ir a su casa.

Cuando recibo el mensaje de Griffin se me dibuja una sonrisa en la cara, la verdad es que tengo ganas de verle y conocerle un poco más. Me ducho y me pongo algo sencillo, acorde a mi estilo y me echo un poco de rímel y un poco de iluminador, ya que prefiero ir natural.

 Me ducho y me pongo algo sencillo, acorde a mi estilo y me echo un poco de rímel y un poco de iluminador, ya que prefiero ir natural

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Le digo a mi madre que me voy a hacer un trabajo con un compañero y salgo de casa. Subo en mi coche e introduzco en el GPS la dirección que me ha dado Griffin, la cual, curiosamente, está a pocos minutos de mi casa.

Bajo del coche y con las manos algo temblorosas, llamo al timbre. 

TWIST OF FATE (jaden hossler)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora