Capítulo 25

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Griffin Johnson

Entro al viejo y oscuro parque, el cual está iluminado por la luz tenue de las farolas. Mis ojos se mueven inquietos por toda la zona, inspeccionando hasta el último centímetro.

Mi mano viaja hasta la cinturilla de mi pantalón, cerciorándome de que traigo conmigo mi Glock 44, cargada y con ganas de clavar una bala en el cerebro de todo aquel que se interponga en mi camino.

Busco a la mujer que me ha citado en este sitio de mala muerte, la cual me dijo que era de estatura media, rubia y estaría vestida completamente de negro.

Después de varios minutos inspeccionando el parque, encuentro a la mujer que buscaba sentada en uno de los viejos bancos de madera. Mis ojos recorren su figura, es guapa y esbelta, aunque parece una cucaracha vestida toda de negro.

Cuando nota mi presencia, se levanta del banco y se acerca lentamente a mí.

— ¡Por fin!, llevo como media hora esperándote — exclama la rubia.

— Dime ahora mismo quién coño eres y qué quieres de mí — exijo con dureza.

— Hey tranquilo — dice levantando las manos inocentemente —. Tenemos tiempo suficiente para todo.

— El tiempo no es algo que me sobre, guapa — respondo —. Así que abre esa boquita y empieza a hablar.

— Sé lo que quieres hacer — suelta de repente —. Sé que quieres matar a Jaden Hossler.

La sangre de mis venas es reemplazada por rabia, la cual recorre mi organismo ante la mención de ese nombre.

— ¡Dime quién coño eres y de dónde conoces a ese hijo de puta! — tomo su brazo con rabia.

— Relájate Johnson — aprieto el agarre de su brazo —. Siéntate y te explico todo.

La madera del banco está desgastada y astillada, y cruje cuando me siento. La luz de la farola ilumina la figura de la rubia, la cual está frente a mí.

— En primer lugar, soy Madison — se presenta —. Soy la novia de Jaden.

— Me importa una mierda, sigue — exijo.

— Hace tiempo que le sigo a todas partes, porque sentía que me estaba ocultando algo — me fijo en sus ojos, los cuales se ven azules bajo la luz de la farola —. Y fíjate, no me equivocaba.

— Me estoy empezando a hartar — me exaspero —. ¡Habla!

— Descubrí que me engañaba con tu querida y adorada esposa — dice con sarcasmo.

— ¿Y qué pinto yo en tus dramas de pareja? — pregunto.

— Tengo un plan — responde —. Y te quiero en él.

— Ah no rubia, los problemas que tengas con ese idiota son asunto tuyo, no mío — me levanto del banco, dispuesto a largarme de aquí.

— Quieto Johnson — su voz me detiene —. Yo te hice las fotos con esa mujer, y me encargué de dárselas a Blair.

Su confesión me toma por sorpresa, me hierve la sangre y mi pulso se acelera con cada segundo que pasa. Me toma pocos segundos coger mi arma y ponérsela en la sien.

— Maldita hija de puta — escupo con rabia.

— Tranquilo Johnson — dice la rubia —. Creo que no deberíamos perder el tiempo de esta forma.

— ¿Sabes cuánto tardaría en clavarte una bala en el cerebro? — clavo un poco más el cañón del arma en su piel —. Un mísero segundo maldita zorra.

TWIST OF FATE (jaden hossler)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora