Capítulo 21

270 14 2
                                    

Jaden Hossler

Toda la sangre se concentra entre mis piernas, tensándome como nunca. Siento los fríos azulejos en mi espalda, aunque con todo el calor que emana de mi cuerpo, me importa bien poco. Sus pequeñas manos se enredan entre mi pelo mojado, lanzándose a mis labios de manera salvaje. Intento tocarla, pero me lo impide.

Coge el bote de gel y vierte una pequeña cantidad en su mano. Al igual que hice yo, frota sus manos creando espuma y las posa sobre mis hombros. Comienza a deslizar sus manos por mi cuerpo, haciéndome jadear. Su boca se entretiene con la piel húmeda de mi cuello, succionando suavemente y dando placenteros lametones. 

Mi pulso se dispara cuando sus manos comienzan a dibujar la V de mi cadera, moviéndose hacia abajo. El oxígeno desaparece de mis pulmones cuando toma mi masculinidad entre sus manos, haciendo que el último ápice de control desaparezca por completo de mi cuerpo.

Sus movimientos son lentos, mientras su mano libre se pasea por la parte superior de mi cuerpo. La respiración se me corta cuando acelera la velocidad de sus movimientos, haciéndome gemir.

— Shhh... — pone uno de sus dedos en mis labios, callándome —. No querrás que nos descubran, ¿verdad?

Niego con la cabeza, sin emitir un solo sonido. Lo que menos quiero ahora es que alguien descubra lo que está ocurriendo tras esta cortina de plástico. Mientras una de sus manos continúa moviéndose sobre mi miembro, la otra se cierne sobre mi trasero, apretándolo levemente.

— Tienes el mejor culo que haya visto jamás — ríe.

— Pienso lo mismo del tuyo — digo.

Sus labios entreabiertos me tientan, por lo que no dudo ni un segundo en lanzarme a su boca, la cual me recibe con gusto. El beso es hambriento y salvaje, a la vez que voraz. Muerde mi labio, haciendo que mi interior arda en llamas.

Siento que el orgasmo se acerca, ya que mis piernas se tensan y mi respiración es prácticamente nula. Tomo bocanadas de aire intentando llevar algo de oxígeno a mis pulmones, mientras sus manos continúan haciendo maravillas en mi cuerpo.

Varios minutos después exploto en un sinfín de sensaciones, sensaciones que solo ella provoca.


Madison Lewis

Me escondo detrás de los frondosos matorrales, intentando esconderme. Voy vestida completamente de negro, lo que me ayuda a camuflarme entre la oscuridad de la noche. Mis ojos vagan por la puerta del gimnasio, esperando con impaciencia a que Jaden salga junto a esa zorra.

Muchos pensarán que estoy completamente loca y desquiciada, pero si Jaden no es mío, no será de nadie, y mucho menos de esa zorra multimillonaria.

Aunque me diga que no, yo sé que en realidad me quiere tanto como yo a él y que es cuestión de tiempo para que volvamos a estar juntos.

El sonido de la puerta abriéndose activa todas mis alertas. La rabia corre por mis venas cuando veo a Jaden junto a esa idiota. Ambos salen riendo, con el pelo mojado, dándome a entender que se han dado una ducha.

Veo como sus labios se mueven, aunque no logro escuchar nada de lo que dicen, ya que están bastante lejos. Según se van acercando, consigo escuchar su conversación.

— Debería venir a este gimnasio más a menudo — dice Jaden.

— Puedes venir cuando quieras — dice Blair —. A Cynthia y a Quinton les has caído muy bien.

— Vendré siempre y cuando se repita lo de la ducha — dice Jaden dándole una nalgada.

La furia se apodera de mis sentidos, apretando los puños con tanta fuerza que hasta mis nudillos se han vuelto blancos. Las ganas de acabar con la vida de esa maldita fulana crecen cada vez más con cada palabra que sale de su sucia boca.

TWIST OF FATE (jaden hossler)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora