Las complicaciones

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Quien a sí encadenare una alegría
malogrará la vida alada.
Pero quien la alegría besare en su aleteo
vive en el alba de la eternidad.

( La Eternidad de William Blacke)



Aquel día nos encontrábamos en la taberna del diablo sin Matt, ya que su madre le pidió ayuda en Idris, nos encontrábamos debatiendo cosas de bodas, ya que antes de salir papá me dio una especie de charla, diciéndome que tenia que participar en los preparativos de la boda.

- Jamie, pero por muy falsa que sea esta boda- Thomas suspiro mientras se frotaba los ojos- tiene razón... ¿Vas a dejar a Cordelia sola metida en un lio que fue por tu culpa?

- Si, lo sé Thomas, es solo que tengo muchas cosas en la cabeza y me distraigo.

- No empieces otra vez con lo de Grace- mirando sus muñecas para ver si la pulsera seguía ahí- Matt se esforzó mucho en crear el mínimo de respeto hacia Cordelia de tu parte.

- Si, pues la saben que esa es una de mis dificultades- los dos miraron sin entender- A Matt le gusta Cordelia – hubo una reacción de cansancio en sus dos amigos- no sé cómo sentirme al respecto.

- ¿y Cordelia? Que dice al respecto- Thomas, claramente tenía ganas de indagar más.

- No estoy seguro, solo veo que se fuerza a si misma para que todo sea como antes, y, además, veo que se siente muy cómoda con Matthew últimamente. - Y él se sentía celoso de eso, era con él con quien tenía más sintonía.

Ya se encontraban en camino al instituto cuando Christopher comienza a balbucear que venia Anna corriendo con Ariadne. Apenas frenaron la chica les cuenta a sus amigos lo sucedido, James sin pensar aviso para que los llevaran a socorrer a su hermana y a Cordelia.

Al salir se encontraron con algunas de las puertas del piso destruido con charcos de sangre, Cordelia fue la primera en investigar con Cortana en las manos, en un segundo sitio que volaba golpeándose contra la pared, Lucie la ayudo a pararse, pero la aparto porque la cosa que la había atacado. Por fin pudieron ver mejor que era un vampiro, pero estaba totalmente deformado, era una cabeza la cual se encontraba ensangrentada y unos oscuros ojos negros sobresalían, su cuerpo era casi redondo sus extremidades cortas, aun así, parecía que habían aumentado su rapidez y su fuerza.

Cordelia miró a Lucie y esta asintió susurrando el nombre de su espada "Nuriel", se abalanzó hacia delante con su cuchillo serafín en mano mientras Cordelia vio el movimiento del vampiro, solo un milímetro y Cordelia salto atravesando al vampiro desde la nuca hasta el pecho, justo en ese momento diviso que se acercaba uno a la espalda de Lucie, esta rápidamente dio vuelta completando el "circulo de la vida" decapitando al monstruo.

Dieron unas vueltas y se encontraron un vampiro que estaba en el suelo por la fata de sangre, Cordelia ni lo dudo, necesitaba respuestas, Lucie le grito, pero era tarde. El vampiro somo la muñeca de Cordelia y comenzó a recuperar la conciencia, antes de empezar a sentirse mareada Lucie despegó al chico.

- ¿Cuántos eran? ¿Qué pasó? - Lucie inquirió mientras se ocupa de su pareja con runas

- Eran cinco o seis creo ... puede que menos, hubo un robo a un brujo, era una esencia demoníaca. - El chico tiritaba sin comprender muy bien donde estaba.

- Una de las muchas enfermedades demoníacas- dijo Anna con Ariadne a su espalda – ya me lo parecía tenían sangre muy oscura y con un leve olor a icor.

- Así parece- dijo Lucie mirando el vestido con algunas partes desintegradas y manchadas- Daisy, estarás bien- le dijo acariciando los cabellos

- Iré con Ariadne al Instituto a entregar la información para que todos sean advertidos de este fenómeno, y tu chico ¿Cuál es tu nombre? ¿puedes irte a casa o necesitas ayuda?

- Mi nombre... es Víctor, y estoy bien -miro a Cordelia- Muchas gracias, señorita, le debo mi existencia. - Le tomó la mano y ella le correspondió con una sonrisa.

- Está bien Víctor igual, tú eras el único que podía explicar que había pasado. Mi nombre es Cordelia Cairstairs- luego presentó a sus compañeras- si tienes problemas de este tipo otra vez comunícate con alguna de nosotras. - Anna le explicó al chico donde podía encontrarla a ella, y luego tomó a Ariadne y se fueron rumbo al instituto.

En unos minutos mas tarde mientras Lucie y Cordelia se hallaban limpiando con la ayuda de Víctor, llego un carruaje que aparco con rapidez. De ahí, aparece un James con una expresión de alivio. Lucie corrió hacia su hermano y le contó lo sucedido, salieron también Christopher y Thomas, que escucharon en silencio y hablaban por lo bajo. Cordelia seguía cansada, pero Víctor la había ayudado, el lucia como un joven de 15 años, pero su aura de madurez (ahora que se había calmado) era difícil de ignorar.

- Estas bien- se acerco James- Gracias al ángel – mirando directamente al vampiro le dijo- Muchas gracias por socorrer a mi hermana y a mi prometida.

- Su nombre es Víctor- dijo Cordelia- él es James- Víctor es quien presenció lo que paso. - lo miro – Vete a descansar por ahora si sucede algo ya sabes donde en donde encontrar a Anna o a mi- le dijo dándole una gentil sonrisa mientras le tocaba la redonda y pálida mejilla. El chico apretó la mano de la chica contra su mejilla.

- Esta bien señorita Cordelia- dio una pequeña reverencia y se despidió de James.

- Daisy, vamos al instituto, le enviaremos un mensaje a tu madre ¿de acuerdo? – le dijo con dulzura.

- Si, esta bien. Gracias James- y le dio un beso en la mejilla antes de desplomarse.

Los demás se agitaron y se adentraron en el coche rápidamente en dirección al instituto.

Cordelia y JamesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora