City Baby Wolf (Bebé lobo de ciudad*) (Kookmin) (TaeGi) (Omegaverse)

64 ~ Raro

Todo estaba en calma, una pequeña y suave respiración adornaba el silencio en el que estaba despertando. Un fuerte dolor, más bien un ardor intenso, cruzó su pecho cuando la primera gran bocanada de aire inundó sus pulmones. Con muecas, que en ora ocasión habrían resultado adorables, Jimin abrió sus pequeños ojos almendrados.

-Bebé. -Susurra dulce cuando sus ojos hacen contacto. Jimin siente y sabe al instante que está en su cama, junto a su Alfa, a salvo, y rompe en un llanto silencioso. -Ya, ya estás a salvo. -JungKook se tumba del todo en la cama, donde hasta hace poco estaba sentado cuidando y velando por su Omega, para arroparlo con cuidado de sus heridas en su pecho.

-Perdón, lo siento muchísimo. -Decía entrecortado por las lágrimas Jimin, sujetándose a puños cerrados a la camiseta del contrario en su espalda.

-Mi amor, tú no has hecho nada. -Susurra aún con miedo de alterarlo más mientras deja besos en su cabello, justo en el lugar por donde comienzan a romper las orejas de lobo y donde habían dos pequeñas heridas casi inexistentes ya.

-Ese hombre quería llevarse a YeonJun porque yo ya no les servía. -Se lamenta mostrado así el hecho por el que se siente culpable.

-Pero no lo ha conseguido. Lo que pasa es... -JungKook respira profundo y fuerza al Omega para que le vea a los ojos. -Se ha escapado. Uno de ellos murió y el otro lo tenemos capturado pero débil. -El llanto de Jimin seguía como cascadas pero su voz se había perdido, a aquel lobo y hombre no podría borrarlo de un mente jamás; a ninguno de los tres, sobretodo al que él mismo había herido. -Necesitamos que nos digas que está pasando bebé. -Pide subiendo ahora sus manos a limpiar las lágrimas incansables.

-No quiero, todo es mi culpa. -Repite negando con su cabeza. -Soy el raro, mi lobo es horrible y ellos lo quieren solo para venderlo y yo...yo no quiero que nos hagan daño Oppa. -La ansiedad, como tantas otras veces nublando su juicio y alterando por completo su raciocinio. -¡Has visto a mi lobo! ¡Todos lo habéis hecho!

-Amor ya, por favor, me duele verte llorar. -Niega Jeon acercándose a besar su sonrojado rostro por las lágrimas una y otra vez con sutiles roces. -No me gusta esto que estás sintiendo. -A través del lazo podía sentir la pena, la vergüenza y la misma ansiedad que Jimin experimentaba. -Eres un humano precioso, por dentro y por fuera, y tu lobo es del pelaje más bello que jamás haya visto. -Jimin negaba incrédulo dejándose besar entre palabras y frases. -Me ha enamorado más de lo que ya estaba de ti.

-No mientas para hacerme sentir mejor, siempre han insultado a mi lobo y mamá y papá no querían que lo enseñara porque los demás lo veían raro. -Las burlas en la guardería y el colegio, la mirada confusa de su YoonGi Hyung cuando lo vio por primera vez o el mismo temor de sus padres a que lo juzgaran...ahora debía sumarle los alagos despreciables y asquerosos de ese hombre que quería su pelaje.

-Bebé, no te voy a mentir, tu lobo es raro. -Declara JungKook sacando su lengua, rozando apenas con la punta la punta de su pequeña nariz de botón como su peculiar gesto de amor entre ambos. -Pero; ¿sabes cuál es la definición de raro? -Jimin asiente sintiéndose más calmado tras Jeon ahora lamer sus ambas mejillas húmedas. -La de verdad, la gente suele gastar ese adjetivo muy mal. -Entonces el pelirrosa duda y niega ahora, JungKook lame sus labios bordeando el contorno y después por completo esos mullidos y adorados belfos. -Extraordinario, poco común o frecuente, escaso en su clase o especie, algo sobresaliente o excelente en su clase. -Jimin jadea abriendo su boca involuntariamente, el pelinegro aprovecha para colar su lengua en la boca ajena y dar un ligero lengüetazo a su lengua. -Yo amo que seas raro.