𝙵𝚊𝚟𝚘𝚛.-𝐘𝐮𝐧𝐚𝐧𝐝𝐨

11.

–¿Cómo estás? Hay muchos rumores....

Armando aparta su mirada de su celu para ver al menor. Solo se dedicó a observarle con un rostro serio, intimidando a Juanjo. Era de noche y se encontraban en la sede, escuchar todas las cosas que comenzaron a decir los clientes cuando llevo el cuerpo de Yin a un Taxi, fue la gota que derramó el vaso.

–Bien, no quieres hablar.....

Miro alrededor en busca de otra presencia. Encontró al Chino sobre la isla de la cocina, ha notado el drástico cambio de humor de ambos. Quisiera ayudarlos pero ellos no colaboran.

–Chino lleva días así de extraño... –Susurro, solo para Armando, así no llamar la atención del pelirrojo.– Se ha quedado mucho rato mirando a un lugar con un sentimiento que no podría decirte.... Está más callado de lo normal, no sé.... Me preocupa.

Miro de reojo a Armando, notando que le ponía atención pero aún así no mirándolo. Con una mirada de confusión se ha quedado mirando en el suelo, haciendo una mueca.

–¿Que crees que le pasé?.–Preguntó al fin.

–Creo que necesita hablar con alguien, Tonet lo ha intentado pero no puede sacar nada. Al parecer tiene un problema contigo....–Miró con preocupación el rostro del mayor, jugando con sus dedos con nerviosismo.– Cada vez que te mencionaban en el taller, él se tensaba.

Efectivamente Yun tenía algún problema con el. Juanjo lo iluminó, dejaría todo este juego y hablaría las cosas con Yun. Le sonrió al menor.

–Perdón por mi actitud antes y gracias por decirme esas cosas.–Se levanta del sofá decidido a hablarle al pelirrojo.

Una vez llegando a su lado, se da cuenta que el otro dormía. Mueve con delicadeza el hombro de este, no recibiendo respuestas. Suspiro, tomó con delicadeza el cuerpo del otro entre sus brazos, le dio una última mirada a Juanjo antes de comenzar a subir a los cuartos. Se adentra a la habitación del pequeño entre sus brazos, acomodandolo en la cama.

Estaba por irse pero noto algo extraño. Se acercó nuevamente a Yun, poniendo un dedo debajo de su nariz, no respiraba. ¡¿Cómo llegaron a esto?! ¡Hace poco el menor estaba respirando!. Alertó a los demás sin saber que hacer, la idea de hacerle respiración boca a boca le pasó por su mente. Mientras esperaba a los demás, se acercó a sus labios juntandolos para comenzar con la respiración, luego para separarse y hacerle presión en el pecho. ¡Ni siquiera se había ahogado en la piscina para hacer tal cosa!.

Luego de minutos en repetir lo mismo, con la presencia de algunos de la mafia, Yun dio señales de poder respirar. Rápidamente se aleja para darle espacio, lo observó toser y respirar con desesperación para seguidamente ir rápidamente al baño y vomitar. Armando les dio una señal para que estuvieran tranquilo y cancelaran la ambulancia.

Se acercó al baño viendo con lastima al pequeño cuerpo junto al inodoro. Acarició suavemente su espalda para tranquilizarlo, escuchandolo llorar.

–Ya tranquilo..... Ya pasó..... Tranquilo. –Le ayudó a levantarse, sosteniéndolo por si perdía el equilibrio. Vio como tiraba la cadenas y enjuagarse todavía con las lágrimas en los ojos.

–L-lo lamento.–Se giró para mirarlo, rompiendo más en llanto. Abrazo fuertemente el cuerpo del contrario, sintiendo la tranquilidad apoderarse de su cuerpo.– D-de veldad.... No quelia alejalme de ti, ela necesalio.... Peldon pol sel egoísta.... Me has ayudado mucho y yo te lo agladezco de esa folma...

¿Necesario para que? Acarició su cabello con una sonrisa en su rostro, dios..... Yun era todo un caso.

–Tranquilo, tranquilo.... Está bien....

Estuvieron unos minutos abrazados para al fin separarse. Se quedaron mirando a los ojos, dirigió su mano a las mejillas de Yun, acariciandolas. Se fue acercando lentamente para al fin juntar sus labios, era solo un toque, no había movimiento pero para ellos era más que suficiente.

–Debemos ir al hospital para que te revisen.–Agarro la mano de un sonrojado Chino para bajar donde estaban todos. Al momento de llegar todos demostraron la preocupación que sentían por su jefe, junto con abrazos y un par de insultos. Entre risas le avisaron que iban al hospital, saliendo juntos para dirigirse a un auto.

El camino fue en silencio pero uno cómodo. Llamaron a un doctor, atendiendo los. Los llevaron a una habitación para empezar con la revisión.

–Uhm.... –Este sonido alertó a ambos. Observando el rostro serio del doctor mientras este revisaba los latidos de Yun con el estetoscopio. – Podría decir que estas bien pero hay algo que no me cuadra.... Tienes los latidos a una velocidad fuera de lo común ¿No te sientes agitado?.

Yun negó con un poco de miedo. Miro a Armando buscando tranquilidad pero el estaba peor que el.

–¿Eso es malo?.

–Deberíamos hacer un par de pruebas más, según nos contó él dejó de respirar de repente. Eso no es normal, te sacaremos un poco de sangre para hacer algunos exámenes y necesito que me acompañes a otra sala para hacerte una tomografia, para ver si no se daño tu cerebro ¿Necesitas que te mandemos al psicólogo?.

El pelirrojo iba a negar, no lo encontraba necesario, la voz de Armando lo hizo detenerse, escuchando como le explicaba las recientes pesadillas, causándole un gran cambio en su comportamiento. Lo miro enfadado, era privado eso.

–No me mires así, es por tu bien.

(...)

A los días después los resultados estaban listos. El doctor los miraba con atención, el de sangre estaba bien. No mostraba rastros de consumo de drogas, el neurológico estaba bien. No, espera, había algo.

–Que cojones.....

Se acercó más a la computadora, aumentando el zoom. Nunca había visto algo así, llamó a recepción para crear una reunión de súper importancia, sus compañeros debían de saber esto y si tuviera suerte encontraría una respuesta. No olvido a la psicóloga elegida para el paciente, debía de saber esto para estar al tanto de la situación de Yun Kalahari.

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Lamento la demora, se me olvidó xd.

Al fin Yun tendrá ayuda profesional 😔👊🏻.

Más adelante se verá que le pasó a Yun. Por ahora ¿Alguna teoría? 👀

Cuídense muchito, nos leemos pronto, muak✨✨💫💫