Itou Hiroshi, el preso pelirrojo y ojeroso caminaba por los pasillos del ala uno, yendo directo hacia el comedor.
Entró y divisó a Seisou Vólkov sentado en una de las mesas, parecía que ya llevaba un rato esperándolo.—Ya tengo lo que me pediste— dijo Hiroshi.
—¿Y qué esperas?, entrégamelo.
Vólkov levantó la mano con impaciencia y el pelirrojo fue a entregarle un fonder amarillo con papeles dentro.
—Conseguir los documentos de ese idiota fue muy díficil porque no estaban con los del resto de presos. Estaban perdidos y tuve que robarme los de Koco para sacarles copias, así que espero que me pagues un poco más de lo acordado.
—Te daré tu miserable pago después.
Seisou empezó a ojear los papeles para cerciorarse de que no faltara nada.
—Están completos. Eso es todo, largo. Tu pago llegará a tu celda como acordamos— fue cortante.
Hiroshi hizo caso y se fue sin decir nada más.
Hacer ese encargo en particular había sido una molestia, pues no pensó que los documentos de un preso como Kanzaki Shinomiya serían tan difíciles de conseguir."¿Para qué quiere los papeles del imbécil de Shinomiya?, no vale la pena investigar a alguien tan débil como él"
Y mientras el chico de ojeras regresaba a su celda, Vólkov se había quedado en el comedor leyendo a detalle los papeles de Kanzaki.
"Víctima de abuso sexual, intento de suicidio y rehabilitación, medicamentos. Homicidio.
Planeaban ponerlo en el ala cinco, pero el espacio no era suficiente y lo pusieron conmigo.
Interesante."•
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—¿Y cómo te sientes ahora para regresar al ala uno?— preguntó Koco.
Estaban en la enfermería todavía, sin embargo, ya había pasado un mes entero y era el último día de Kanzaki ahí.
La doctora Naomi también estaba presente en su terapia, pero ella solo escuchaba y hacía preguntas de vez en cuando.Kanzaki bajó la mirada.
—Después de un mes entero aquí, comiendo bien, con todas las veces que Katsuragi y Kaname me visitaron y todo el tiempo que pasamos juntos... — por su mente pasaban los sucesos del último mes, todo había sucedido en el cuarto de la enfermería y se había vuelto especial de alguna forma —No quiero volver.
—Pero tienes que hacerlo. No puedes quedarte en la enfermería todo el tiempo.
El pecoso suspiró y después se abrazó a sí mismo, colocando sus manos en sus hombros.
—Lo sé. Y la idea de lastimarme a mí mismo para que me permitan quedarme más tiempo aquí es tentadora, y me da mucho miedo.
—Kanzaki, escúchame, no debes herirte a ti mismo por ninguna razón— Koco pronunció con firmeza. —Solo estarías huyendo y posponiendo tu regreso al ala uno. Así que debes controlarte. Tu medicamento también te va a ayudar a calmarte, pero debes esforzarte también.
—Si te lastimas para volver aquí entonces tan solo aumentarás tu dolor— Naomi pronunció, con un tono dulce de apoyo.
—Me voy a esforzar. ¿Podemos terminar aquí?— dijo, al borde del llanto.
—Antes de que tu terapia termine, tengo algo para ti.
Koco se levantó de su asiento y caminó hacia un pequeño escritorio en la esquina de la enfermería, de donde tomó un cuaderno de pasta gruesa con un estampado gris algo estrafalario y también una simple pluma.
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Soy inocente (Yaoi/Gay) PAUSADA
RomanceBorrador 6 Kanzaki es un chico víctima de abuso sexual quien termina siendo culpado del asesinato de su mejor amigo y es encarcelado injustificadamente. En Naraka, un centro de readaptación y salud mental, conocerá a Volkov y a Katsuragi, dos presos...