Jeremy era el chico que sentía de todo, por alguien que no sentía de nada.
Lo que empezó como un sentimiento inocente, se convirtió en uno asfixiante y doloroso.
Jeremy Dawson lleva enamorado siete años de su mejor amiga. Trató de mil maneras deshac...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Mini maratón 1/3
Tatiana.
No pude ver más, sé que solo era un simple juego, pero por más que traté de soportarlo, no pude... es por eso que ahora me encuentro tratando de salir de esa casa lo más rápido que puedo.
Jeremy intenta estar conmigo, quererme... ¡pero nada es posible a la fuerza! No puede obligarse a sí mismo a estar con alguien que no quiere. Aunque me duela, esa es la verdad. Jeremy no me querrá de la manera que yo lo quiero, jamás.
¿Entonces por qué seguía aquí con alguien que no me quería? Ni yo lo sabía, Jeremy Dawson siempre fue mi crush y nunca pensé que después de haberlo despertado de aquella clase cambiaría tanto las cosas entre nosotros.
Pero él seguía sintiendo cosas por Judith Lowell y eso era muy, demasiado incómodo y doloroso... yo quería que me quisiera, que no hubiera otra chica después o antes de mí, solo yo. Y luego estaba Eddie, me sentía como una completa perra al sentir celos cuando ella estaba cerca de él, ¿por qué? No tengo ni la menor idea.
Soy patética, lo sé.
Mirar como ella y él conectaban era algo sorprendente, ver como ella era capaz de mantenerlo cuerdo en este mundo era asombroso. Recuerdo aquella noche cuando Jeremy perdió el control y entró en una especie de episodio, ella lo calmó, Eddie lo regresó al aquí y al ahora con solo unas palabras y su tacto... ¿que hice yo? Quedarme como idiota, atemorizada por si decidía golpearme o yo que sé, luego me sentí idiota y culpable al ver su expresión dolida cuando se percató de mi temor.
Aunque él no tuviera ni la menor idea, estaba conectado de una manera inexplicable a ella, a su pequeña morena, como él le decía. Ni siquiera me sentía tan a la deriva cuando estaba cerca Jud.
Pero de algo estaba segura, yo, Tatiana Lauder, estaba totalmente loca por Jeremy Dawson, le quería. Cuando me besaba... hacía que me olvidara hasta en cual planeta me encontraba, cuando me tocaba, olvidaba hasta mi propio nombre y cuando me miraba con esa tierna sonrisa que tenía... desestabilizaba mi mundo entero.
—¡Tatiana, joder... espera!— espeta tomándome del codo. Me detengo, sin darme cuenta, ahora nos encontramos en el patio delantero de la enorme casa de Jud.
—Quiero irme— digo sin ser capaz de mirarlo a los ojos.
Guarda silencio por unos segundos, soy consciente de como su mirada está clavada en mí. Se aleja tan solo unos pequeños centímetros.
—¿Qué sucede?— pregunta en voz baja.
¿Que pasaba? No estoy segura, solo sé que me dolió ver como besabas a alguien que no era yo, que casualmente era tu mejor amiga, esa misma que me siento insegura cuando está a nuestro alrededor, que con sus ojos marrones podría enamorar a cualquiera, ¡hasta podría enamorarme a mí si se lo propone!
