Un mes, eso había pasado, según las cuentas de Jennie.
Sus heridas estaban del todo cicatrizadas, las de su memoria no tanto. Su madre había conseguido hacerle citas con la psicóloga a la que Rosé asistía, la doctora Audrey era realmente buena y divertida, se sentía cómoda dentro de su consultorio. También paso un mes desde que Lisa empezó a ser su novia, juraba que jamás en su corta vida se había sentido tan especial como cada día que ella la visitaba. Su madre había aceptado la relación y su padre ni siquiera estaba en casa, aquello le daba la oportunidad a Lisa de dormir a su lado.
Y por otro lado, había vuelto a la escuela, no estaba recuperada del todo físicamente pero le habían dado la oportunidad de aplicar un par de exámenes para recuperar las materias que había perdido durante su estadía en el hospital. Sus actuales amigas, Jisoo, Rosé y Lisa se habían ofrecido a ayudarle a estudiar y lo agradecía.
- ¿Así que esto es lo que se siente? - preguntó Jennie cuando todos en la cafetería murmuraban seguramente sobre ella.
- ¿Que cosa? - preguntó su novia dejando de lado los libros que leía.
- Ya sabes, tener la atención de todos para mal y que susurren cosas sobre ti. - respondió Jennie ladeando la cabeza y Lisa se encogió de hombros.
- No es algo que quisiera que sintieras, he pasado por ello y la verdad ni siquiera vale la pena desearselo a alguien. - dijo Lisa tomando su mano. - Solo enfócate en estudiar, ninguno de ellos vale la pena aquí, solo tu y que apruebes los exámenes.
Jennie recargo su mejilla contra su puño y observo a su novia mejor. Había notado que la paciencia de Lisa la sobrepasaba y muchísimo, ella ya había pensado en hacerles frente y mandarlos a la mierda sin excepciones. También se había dado cuenta que estaba enamorándose de Lisa cada vez más, sus acciones, sus palabras, su forma de moverse entre la gente, su escencia, toda ella era lo que muchos llaman a la persona perfecta y sin necesidad de nadar en lujos, todos aquellos lujos que alguna vez había tenido quedaban opacados por cada pequeño detalle que Lisa le daba, una flor, una nota, un pensamiento, cualquier cosa.
— Las respuestas no están en el rostro de Lisa, están en los libros. – dijo Jisoo interrumpiendo sus pensamientos. Observo las mejillas sonrojadas de la rubia y sonrió.
— Pues déjame decirte que en Lisa he encontrado muchas respuestas que no tenía. – aseguro la castaña y disfruto la enorme sonrisa de su novia.
— Buen día, chicas. – saludo Chaeyoung de la mano de la mayor. — ¿Cómo te sientes, unnie? – preguntó dejando algunos libros en la mesa y Jennie sonrió ampliamente.
— Me duele un poco la cabeza, pero es normal. – se encogió de hombros y Rosé le entrego un recipiente.
— Es fruta, la traje para ti, Lice me ha enseñado que siempre debes tener algo en la barriga, no importa si solo es fruta. – comento antes de asentir sonriente.
Su relación con la australiana iba mejor de lo que podría imaginarse nunca. Se había disculpado con ella por todo el daño que le había causado y Rosé solo sonrió antes de abrazarla y decirle que todo estaba perdonado desde hace tiempo, aquello la daba un alivio tan grande como el que le causó que Lisa la perdonará.
— Rosie y yo tenemos las respuestas del primer examen, estudialas mientras comes un poco, haremos lo demás. – ordenó Jisoo pasandole los apuntes a la morena.
— Chicas, de verdad estoy agradecida...
— Estudia más, habla menos. – dijo Jisoo de nuevo y la castaña sonrió antes de asentir.
Se acercó un poco más a Lisa y sintió como la menor la abrazo por la cintura sin dejar de leer quién-sabe-qué. Se sentía amada, le sorprendía que de un tiempo acá no pudiese estar lejos de Lisa o al menos sentir algún pequeño toque por parte de la menor, le gustaba la sensación de sentirla y poder asegurar que ella sentía lo mismo.
— ¿Jennie?
Las cuatro chicas desviaron su atención hacia donde venía la voz que había interrumpido su cómodo silencio.
— Nayeon. – dijo la castaña sintiendo el cuerpo de Lisa tensarse y por alguna razón la dejo de abrazar, eso le molestó.
— No sabíamos que saliste del hospital. – comentó la chica y Lisa sintió la hipocresía en sus palabras. — ¿Cuál es tu problema, rara? - preguntó la castaña de dientes grandes cuando escucho una risa sarcástica, Lisa apretó sus puños antes de respirar profundo y acomodarse los anteojos. Jisoo apretó el lápiz en su mano intentando contenerse a defender a la menor, aquello era guerra de Jennie, no suya. — Vamos a nuestra mesa, los chicos se mueren por hablar contigo y ponerte al tanto de lo que estás cosas le hicieron a Tae y...
— Cállate. – ordenó Jennie poniéndose de pie. — No me interesa ir a dónde tú y esa masa de estúpidos están. Eres tan hipócrita, tampoco me interesa lo que pase con Taehyung y Yoongi ellos se lo buscaron y espero que pasen mucho tiempo en prisión o donde sea que estén espero que también les hagas compañía por maldita acosadora. – dijo la morena mirando a la chica frente a ella. — Espero que sea la última vez que le digas a mi novia de esa manera o que yo me enteré de que estuviste hablando si quiera de ella o mis amigas. – ordenó otra vez acercándose un paso a la más alta. — Puede que haya estado ausente durante unos meses, pero sigo teniendo el control, Nayeon, ahora lárgate de aquí. – murmuró antes de sonreír y sentarse a lado de su novia de nuevo.
A la chica que enfrentó no le quedó más que irse. Aquella amenaza solo fue al aire, no tenía ánimos de volver a lo que era cuando estaba sin amor en su vida.
— Fue muy sexy. – comentó Rosé haciendo reír a las otras tres.
— ¿Estás bien? – pregunto Lisa abrazando por los hombros a la castaña y esta asintió dejando un beso cortó en sus labios.
Era obvio que se sentía bien, ya era hora de que aquellas personas que solo aportaban toxicidad a su vida salieran de ella. Estuvo en el hoyo recibiendo empatía y cariño falso por parte de muchos por mucho tiempo gracias a la soledad, era momento de cambiar para bien, ahora tenía a alguien por la cuál preocuparse y por si misma dentro de ello.
Holaaaaaa
¿Cómo están? ¿Cómo se sienten? Les extrañe muchísimo. Yo me siento un poco triste por unas cosas que han sucedido pero supongo que cuando el destino no te quiere con alguien es por alguna razón, aún así le ames.
Quiero disculparme por no actualizar, mi teléfono se ha roto y he conseguido uno mientras arreglo el mío, de verdad lo siento.
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¿Ya ven como Last hope les anda prediciendo el futuro? Primero Lovesick Girls y ahora interacción con Jessi.
Nos leemos pronto solecitos, espero que estén cuidando de su salud mental y física.
Sean buenos con ustedes mismos y las demás personas.