Prólogo

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Hay una historia muy conocida por todo el pequeño reino de Karasuno; se dice que el actual Rey en su juventud le habían arreglado un matrimonio con una de las hijas del gran reino de Aoba Jōsai para que ambos reinos se unificaran. La razón, como la mayoría de matrimonios arreglados era por pura conveniencia económica, pues el reino de Aoba Jōsai estaba interesado en el reino de Karasuno, ya que a pesar de ser muy pequeño, contaba con tierras muy fértiles y excelente producción de ganado y el reino de Karasuno no estaba tan interesado en los temas políticos y reales como la mayoría de los demás reinos; lo que hacía que Karasuno fuera perfecto para unificarse a cualquier otro reino.

Por lo que se decidió que el príncipe de Karasuno se casaría con la princesa de Aoba Jōsai para así unificarse.
Pero el príncipe estaba totalmente en desacuerdo, el príncipe no quería casarse con la princesa, el príncipe ya estaba enamorado de una chica de su pueblo, una hermosa costurera.

El príncipe al ver que el rey no parecía ceder ante su verdadero amor, escapó con su amada y no se supo de ellos por dos años, fue hasta que el rey enfermó gravemente que el príncipe volvió. El rey estaba realmente enfermo y en ese momento ya no le importaba la relación con el reino de Aoba Jōsai, solo quería que su hijo heredara formalmente el reino para que estuviera en buenas manos.

Así que el rey dio la bendición para que el príncipe y su amada se casaran, cancelando la posible unión entre el reino de Karasuno y Aoba Jōsai, haciendo que Karasuno aun siguiera siendo reconocido como un reino, pequeño y probablemente no tan respetado como los demás, pero seguía siendo un reino.

El príncipe se convirtió finalmente en el rey y su amada en la reina, todo el pueblo festejaba su matrimonio y el amor que se miraba ante sus nuevos reyes. Y el festejo parecía no terminar, pues después de un par de años los reyes avisaron el embarazo de la reina. De nuevo todo el reino celebró, estaban emocionados por la llegada del primogénito de los reyes.



Pero un día frío de noviembre la reina había salido para encontrarse con algunos amigos y familiares del pueblo, pues a pesar de ser reina, siempre visitaba y era constante con sus antiguas amigas y compañeras de cuando era costurera.
Ese día después de visitar el pueblo, regresaba en el carruaje real al palacio, cuando empezó a llover repentinamente y empezaba a caer granizo, los caballos se asustaron y empezaron a alterarse, el señor que controlaba los caballos perdió el total control sobre ellos.

La reina estaba realmente grave, el rey consiguió a todos los doctores del pueblo, no importaba que fueran los mejores o de un pequeño consultorio, quería a todos para salvar la vida de su amada y de su hijo. Fueron tres días de arduo trabajo de los doctores, lograron salvar la vida del pequeño, pero lamentablemente la reina no sobrevivió.

El rey y todo el reino estaba devastado, la pérdida afectó a todos, pues la reina siempre fue muy querida, tanto como cuando era pueblerina como reina. Pero sin duda el más afectado por la pérdida era el rey, estaba realmente triste y devastado, por meses no salió de la habitación que compartió con su amada. Fue hasta que algunos sirvientes convencieron al rey de ver a su hijo que el rey recobró fuerzas.

Aquel pequeño ya tenía un año, y era la viva imagen de su madre, castaño, de ojos verde oliva, bonita sonrisa y hermosas pecas por toda su cara. El rey sonrió con algo de tristeza y felicidad al ver como el pequeño reía cuando lo cargó.

— Su majestad, ha pasado un año... ¿Ya ha elegido el nombre del pequeño príncipe? —Preguntó algo temerosa una empleada, pues durante un año era como si el rey no existiera y esperaba no incomodar con esa pregunta.

Pero el rey sonrió sin apartar la mirada de su hijo.
Tadashi... Ella quería ponerle Tadashi. —Dijo sin apartar la vista de aquellos pequeños ojos.





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*Amit con un chingo de tarea, clases virtuales, próxima a las prácticas profesionales, sin terminar el servicio social, sin ni siquiera haber empezado el proyecto final y con fanfics inconclusos*

Amit: Como que se antoja hacer un nuevo fanfic 😎



Yamaguchi es un príncipe, ¿por qué? Porque quiero.

Siempre veo que ponen a mi nene como sirviente o plebeyo y pos' quise intentar ponerlo de príncipe 😎

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