𝖥𝗅𝖾𝗎𝗋 | Haikyuu!!

capítulo trece.

Al poner un paso dentro del enorme gimnasio, no tardo en escuchar mí nombre siendo gritado a los mil vientos.

— Raine–Chaaan~ —Tendō–San corre hacía mí y cuando pienso que viene a saludarme va directamente a jugar con mí cabello.

Prioridades.

— Tendō–San por favor ¿puedes dejar de llamarme por mí segundo nombre? —Pidó caminando, él me sigue pero sin llegar a soltar mi cabello

— Noup~ —Caturrea divertido haciéndome suspirar.

Ahora, ¿contexto? bueno, resulta que un día me encontraba en el parque bebiendo una fanta de uva y viendo a niños partirse la madre mientras rió... digo no, ¿cómo creen? *ofendida*

En fin, me encontre con el team Shiratorizawa y no sé como fue que una cosa llego a la otra y comenzamos a hablar. Al principio me parecían unos amargados pero cuando entre al grupito y mire desde adentro, entendí que están más pendejos que yo, y eso es llegar a extremos.

— Hola~ —Saludo al entrenador que al verme hace una mueca y se va— he~ me ama —Explico a Tendō que sonríe.

— ¡Claro que sí! —No es necesario el sarcasmo

— Hola —Saludo a los demás.

— ¡Hanako–Senpai! —Tsutomu se acerca a mí corriendo con el balón en manos.

— Hola Tsutomu–Kun —Acarició sus cabellos de coco a lo que sus mejillas agarran un suave color rosa.

— Raine–Chan, deja de moverte, trato de peinarte.

— Perdón —Inflo uno de mis mofletes.

— ¿Otra vez aquí? ¿no tienes nada que hacer? —Sonrió con una vena creciendo en mi frente ante las preguntas de Shirabu

— Oh perdón por no ser tan importante como tú —Le sonrió haciendo que él me mire molesto.

Si las miradas mataran, él y yo estaríamos tan muertos como dos cadáveres.

— ¿Cómo está tú labio? —Semi–San se acerca tomando mi mentón para ver el moretón.

— Bah, no es nada-¡ah!

— ¿Si no es nada por qué te quejas? —Ushijima aparece mirándome confundido, con el tiempo entendí que era un gigante malditamente adorable.

— Es como un decir Wakatoshi–kun —Aclara Tendō mientras yo me quejo un poco al sentir un jalón de cabello— no seas llorona, Raine–Chan

— No te preocupes no me dolió —Musito con sarcasmo mientras alejo con cuidado la mano de Semi— ¡Taichi! —Trato de acercarme a él para abrazarlo pero Tendō agarra fuertemente mi cabello provocando que chillará.— ¡me duele! —Lloriqueo.

— ¡Ay no, ya la hiciste llorar! —Se queja Shirabu fastidiado.

— ¡Lo siento Raine–Chan! —Es un mentiroso, si lo sintiera no sonreiría.

— Toma una paleta —Taichi llegando al rescate, ah~ es por eso que se convirtio en mí crush.

La tomo entre mis labios y sonrió feliz, me quedo tranquila en lo que término la paleta. Creó seriamente que mí papá, cuando yo era bebé me daba paletas para que me callara cuando lloraba a media noche.

— ¿Estaban jugando? —Les preguntó cuando Tendō suelta mí cabello ya arreglado y yo acabó mí paleta.

— Sí —Afirma Ushijima con esa mirada serie puesta en mí— ¿quieres jugar?

— Ay Ushi —Lloró— eres tan lindo que quiero morir.

— ¿Por qué querrías morir?

— No es literal, es una forma de decir —Aclaró rápidamente.— en fin, sí quiero jugar —Paso mis manos por mí cabello para saber que había hecho el pelirrojo y suelto una risilla— gracias Tendō–San, me gusto el peinado.

Hace poco le enseñé a hacer una trenza de tres –con ayuda del cabello de Tsutomu y Ushijima *inerte risa malvada*– y ahora el acaba de hacerme una, muero de amor

— Claramente pequeña preciosura —Sus manos atrapan mis mejillas— a que quedo hermosa ¿no?

Coloco mis manos sobre las suyas que estaban sobre mis mejillas y sonrió.

— Claro que sí Tendō–san —Afirmo riendo— gracias por tú súper trenza —Sonrió con las mejillas sonrojadas.

Hace una mueca y antes de que pueda preguntarle la razón, Shirabu nos separó rompiendo así el contacto de sus manos con las mías.

— Ya dejense de estupideces y juguemos, no tenemos todo el día —Me mira mal antes de seguir el camino a la cancha, escuchó una carcajada salir de la boca de Tendō–san y yo simplemente me encogo de hombros.

— ¡Taichi! —Corró hacía él felizmente y tomo su mano— Taichi es de mí equipo —Les saco la lengua y lo escucho reír.

— ¿Sabes jugar si quiera? —Preguntá sujetando también mi mano, tan lindo<3

— No —Nigó, ellos me miran con una gota bajando por su cien— es mentira, ¡claro que se jugar! no por nada soy mánager del mejor equipo de Miyaji.

— Que yo sepa, no eres mánager nuestra —Murmurá Ohira haciéndome reír.

— No me enojó solo porque esa fue buena —El me sonríe palmeando mi cabeza como si fuese un perro

— ¿En que posición juegas? —Me pregunta Hayato mirándome de brazos cruzados y con una sonrisilla sobre sus labios

— Cuando jugué junto a Aoba Josai lo hice en varias posiciones —Les digo— y en todas soy muy mala, aunque el ser setter y libero se me da mejor

— ¿Jusgaste con aoba josai?

— ¿Es lo único que escucharon de todo lo que dije? —Preguntó indignada— sí lo hice, son mis amigos, sobretodo Iwaizumi–san es el amor de mí vida... —Volteó a ver a Taichi antes de corregirme— digo no, Taichi es el amor de mí vida, sorry bro, me hackearon.

»— En fin, olvidemos esto y juguemos —Pedí para cambiar rápidamente de tema, tome uno de los balones y comenzo a golpearlo contra el suelo con la izquierda— cada equipo con su zurdo, ¿qué dicen?

— ¿Eres zurda?

— Ambidiestra —Me encogo de hombros asintiendo.

— Hubieses sido buena jugadora de voleibol, Hanako.

— Gracias, pero no gracias. Estoy bien así

— Bueno está bien —Semi se acerca a mí parándose en frente para evitar que Ushi insistiera con algo más, y omg me siento protegida por Semi–San— comencemos el juego antes de que el entrenador regrese.

— Ay Semi, eres el mejor, por eso todos te queremos —Lo abrazo por la espalda y se tensa, se pone nervioso y se sonroja, sí sí, todo a la vez

— Hanako ve a tú lugar —Balbucea alejándose de mí y yendo a setter, rió por su reacción antes de ponerme como libero.

— ¡Ustedes no se preocupen chicos! —Les pido a Taichi, Goshiki, Ohira y Semi.— ¡tratare de parar las pelotas con las manos y no con la cara!

— Eso no me reconforta —Susurrá Ohira.

— ¡Un poco de confianza acá atras ¿no?! —Le grito molesta haciendo un puchero.

— Lo siento —Dice levantando la mano y sonriendome, ruedo los ojos antes de sonreír.

— ¡Hanako–senpai, yo confió en ti!

— ¡Ay Tsutomu–kun, es por eso que eres mí segundo favorito! —Le digo abrazándolo— el primero pero shh, no le digas a Taichi.

Él se sonroja y asiente diez mil millones de veces antes de volver a su sitió. Apaludo y grito un "¡vamos equipo Hanako 2.0!"

— ¡¿Por qué 2.0?!

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