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NO VINO.

Annie pasó todo el día tratando de encontrar a Mikasa, pero, resulta que le dijieron que no había ido a la universidad.

-Mierda.

¿Por qué siempre me tienen que pasar estas cosas? Se preguntó, mientras pedía la dirección del departamento de Mikasa.

Annie no recordaba de dónde salió la última vez, y agregó una nota mental, al salir de un lugar desconocido, acuérdate del nombre de la calle, puede servirte en algún momento.

Después de recibir la nota con la dirección, se apresuró en salir de la universidad.

[...]

Annie llegó al edificio, y entró rápidamente, sin importarle los reclamos del conserje.

Subió las escaleras al piso cuatro, y tocó la puerta con el número 21.

Annie creyó que no había nadie, y estaba por irse, cuándo, escucho unos fuertes golpes, y seguidos, unos pasos, entre eso, Mikasa abrió la puerta.

-¿Que quieres?-Le preguntó Mikasa fastidiada.

-Hola, buenas tardes, ¿cómo estás? Oh, yo bien, lo normal, ¿quieres pasar y sentarte? Sí, me gustaría, gracias-Dijo Annie con sarcasmo.

-Detente, pasa, pero hablas y te vas.

-Wow, se nota que no seríamos compatibles, seguro el agua y el aceite se quedan cortos al lado nuestro.

-Puede ser, pero no es que quiera correr a todos los que vienen, más bien, sería que no debería dejar que nadie entre, mucho menos tú.

-Me voy.

-No, espera, ¿Que quieres? No creo que hayas venido a decirme buenas tardes.

-Vine para ponernos de acuerdo en qué hacer para el proyecto del semestre.

-No me importa de lo que sea, si tienes algo en mente, me lo puedes decir.

-Estaba pensando en música clásica.

-Si, eso estará bien, nos vemos-Mikasa la empujaba a la salida-Bye.

-¿Es enserio?

-Te seré sincera-Dijo Mikasa, suspirando-Estoy en celo, siempre fueron muy fuertes, pero no era necesario tomar supresores, hasta el momento que te conocí, y eso empeoró, es muy doloroso y casi todo el día paso en cama, como drogadicta gracias a ellos, es muy difícil para mi que estés aquí ahora, porque tengo ganas ganas de saltarte encima.

Mierda, ¿Que hago ahora? Annie estaba muy metida en sus pensamientos, tanto que no noto cuándo Mikasa, se le tiro encima para besarla.

Un beso demandante y llegó de necesidad.

-Lo siento Annie, mis instintos me piden que te haga mía.

-Quiero que te controles.

-Rápido, me muero.

-No mientas, te ayudaré con esto, pero no quiero que me marques, porque te mataré aunque me tenga que morir yo también.

-Lo intentare, pero siempre que mis instintos me gobiernen debes darme un buen golpe para reaccionar.

-¿Quién dijo que no te golpearia?

En eso, Mikasa se empezó a quitarle a ropa a Annie, pero antes, cerró la puerta de la entrada con seguro.

La ropa llevaba molestándola todo el tiempo, y rápidamente, empezó a repartir besos en el cuello de Annie, mientras agarraba uno de sus senos.

Fue bajando hasta lamer su pezon, lo mordió, y con su mano apretó y pellizco el otro.

Annie se dio cuenta que Mikasa tenía a su 'amigo' despierto, ya que Mikasa no dejaba de restregarse contra su cuerpo, así que Annie lo agarró y llevó a su boca.

Empezó a lamer la punta, como si fuera una paleta, luego se la metió en la boca, para empezar con su felacion.

Su boca subía y bajaba a gran velocidad, la parte que no entraba en su boca, la sostenía entre sus manos.

Mikasa mentiría si dijiera que no lo estaba disfrutando, pero sabía que de aquí, no terminaría ni aguantaría.

Como pudo, se acomodó, haciendo el 69, y empezó a lamer la vagina de Annie.

Annie se sorprendió, y soltó un gemido, ya no aguantaba, por suerte estaba por terminar, se acomodo de nuevo como estaba, a Mikasa le habría gustado ver la reacción de ella, así que siguió con suyo.

Mikasa lamio la entrada de Annie, con cuidado, para luego introducir su lengua, haciendo embestidas con ella, podía sentir como Annie estaba a punto de llegar al orgasmo, así que sacó su lengua y metió tres dedos, casi al instante Annie se corrió y soltó un gemido ahogado.

Cambiaron de posición al momento que Mikasa, se dio cuenta que las piernas de Annie estaban por fallar, así que le dio vuelta sin dejar de hacer su trabajo con sus dedos, para quedar con la espalda de Annie en su pecho.

Mikasa no aguantaba más, así que sacó sus dedos de la entrada mojada de Annie, la cuál, soltó un gruñido al no sentir sus dedos dentro.

Mikasa de una estocada entró en Annie, sin dejar que ella se acostumbrara al vaivén.

Cúando la posición fue muy incomoda, la volteo, quedando frente a frente, y aprovecho para lamer los pezones de Annie.

De nuevo, lamia, mordía, y pellizcaba aquellos senos, para satisfacer a Annie.

A mikasa le gustaba el sabor de Annie, aunque jamás lo diría en voz alta, mucho menos cuando su relación no era buena, ni sabía porque estaba haciendo esto con ella. Pero hacía que su pecho que sintiera extrañamente cálido.

-Oye, muévete.

Al momento que de dio cuenta, Annie estaba sobre ella, saltando.

-¿Por qué te gusta tanto montar?

-Es una promesa que hice con alguien-Dijo entrecortado.

-¿Entonces tienes pareja?

-Joder, después hablamos.

-¿Después? Eso me dice que te quedarás.

-Yo...¡Ahh!

Mikasa cambio de posición, sorprendiendo a Annie.

Annie estaba en cuatro mientras Mikasa la penetraba, no pasó mucho para que ambas se corrieran y se formará un nudo dentro de Annie.

Mientras el nudo bajaba, ambas se recostaron en la cama, en una posición cómoda.

Al momento que el nudo se deshincho, Mikasa salió de Annie y ambas cayeron en brazos de morfeo.

XiaoLuaYue.

Si lo hubiera dichoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora