El octavo horrocrux

Catorce.

La situación se había salido de las manos de Ron.
Por un lado, tenía a un muy furioso Neville, intentando matar al novio muggle de su hermano de otra madre, siendo sujetado por Flynn.
Por otro, a Harry tratando de poner a su pareja detrás de él para protegerlo, pero fallando en el intento pues Asami con facilidad, volvía a ponerle a él a su espalda.
Hermione y Luna en medio, tratando de razonar con Neville y lanzando hechizos de protección sobre el yakuza.
Draco, hablaba con Kirishima, Mikhail y Fuyuhiko, tratando de averiguar que había pasado.
Bill y Charlie, algo alejados, miraban divertidos la escena. No podían negar que les resultaba gracioso, el ver a Neville tratando de lanzar una maldición a ese japonés que se había quedado con Harry.

Ron miró a sus hermanos con el ceño fruncido. Esos dos no pretendían ayudar para nada. La cabeza comenzaba a palpitarle y estaba seguro que terminaría con una horrible jaqueca.

- ¡BUENO, YA ESTÁ BIEN! - espetó Ron acercándose a Neville, dejando a todos callados por su repentino arranque - ¿Quieres hacer el favor de dejar de ser tan estúpidamente impulsivo? ¿Cómo pretendes que un muggle pueda rastrear a alguien secuestrado con magia?

Neville dejó de lanzar hechizos, pero aún así, trató de pegar un puñetazo a Asami, lo que fue un error, pues Asami lo tomó del brazo y con un rápido movimiento, lo lanzó al otro lado de la habitación. El gryffindor, aturdido, se encontró con dos pistolas apuntando su cabeza.
Asami se acercó, caminando de forma elegante. Si no supieran que era muggle, pensarían que era un sangre pura.
Cuando llegó junto a Neville, se acuclilló a su lado y le miró a los ojos.

- Te aconsejaría que evitaras volver a hacer eso...mago. Te recuerdo que Feilong es mi mejor amigo, casi mi hermano. Yo estoy igual o más preocupado que tú - dijo siseando furioso, antes de incorporarse de nuevo y abrazar por fin a Harry.

- Neville, Ron lleva razón - dijo Hermione - mejor deberíamos tratar de averiguar quién se lo ha llevado.

- Apuesto todo lo que tengo a que ha sido el imbécil de su hermano - dijo Ron cruzando los brazos sobre su pecho, muy seguro de su afirmación.

- Opino lo mismo que la comadreja. Son los únicos que han podido hacerlo o tenían motivos - dijo Draco poniéndose junto a Flynn, que miraba a algún punto indefinido perdido en sus pensamientos.

Neville finalmente se levantó del suelo y abatido, se sentó en el sofá jalando su pelo desesperado.

- Dónde estarás Feilong... - murmuró Neville más para sí mismo que para los demás.

- No estoy completamente seguro, pero...yo diría que esto tiene algo que ver contigo, Harry - comentó Flynn, volviendo a la realidad.

- ¿Y eso por qué sería? - preguntó molesto Charlie. Harry era incapaz de secuestrar a alguien, ni participar en ello de alguna manera - no sé quien eres, pero no conoces a Harry, así que no puedes culparle de nada de esto.

Asami miró al pelirrojo que acababa de hablar entornando los ojos. No le gustaba como hablaba de su azabache. Quizás tendría que eliminarle y hacer que parezca un accidente.

Flynn negó rápidamente.

- Por supuesto que no...yo me refiero a lo que dijo el padre de Fei cuando estuvimos en China...Harry, es más que evidente que tú posees algo que Liu quiere - trató de explicar Flynn.

- Seguramente secuestró a Fei para asegurarse que volvieras con la Daga de Adyanti - comentó Draco.

- Pero...¿Por qué o para qué? Yo di mi palabra que iba a devolverla. ¿Para qué más la querría? - dijo Harry confuso.

- ¡Hum!...ese Liu, no me gustó la forma en que te miró, Harry - dijo Ron entrecerrando los ojos molesto - sé lo que digo. Ese tipo no sólo quiere la daga. Me lo dice mi instinto...te quiere a ti Harry. Debe ser por ese rollo del espíritu del dragón.