CAP. 3 La responsabilidad

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Narrador:

La lluvia cae en los oscuros cabellos del pelinegro, cada gota de agua caía por las puntas y culminaban en el verde cesped. Su saco negro ya estaba empapado en la sona de sus hombros mas no le tomaba importancia alguna a ese hecho, sus ojos rojos estan totalmente fijos en otro punto.

 Su saco negro ya estaba empapado en la sona de sus hombros mas no le tomaba importancia alguna a ese hecho, sus ojos rojos estan totalmente fijos en otro punto

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El cementerio esta en una completa tranquilidad ante la leve lluvia que le cae ensima. Solo alguna que otra persona esta presente para la visita a sus seres queridos ya fallecidos y dejando flores delante de sus lápidas.

Anti no es la escepción, dejando el gran ramo de rosas rojas en una lápida de piedra lisa de color blanca con los datos grabados en una sustancia negra. Claramente se leía en aquella piedra:

Abigail Azael

04-02-1903

"Una mujer valiente, humilde, carismática pero sobre todo, alguien que no se deja ver como un ser debil y levanta la mirada ante todo"

El mismo mando a hacer esos grabados, especificandose a si mismo que esa fue lo que vio en ella en el corto tiempo de cuando la conoció.

Solto el ramo justo en frente de la lapida, cuidando de no dañarlas. Nunca fue capaz de dejar de tener los ojos fijos en aquella lapida, cada visita que le hacia siempre era igual.

Venia cada mes con un nuevo ramo de rosas y cambiaba las que ya estaban marchitas, se quedaba 20 minutos mirando la lapida sin quitar la vista de esta y luego se marchaba. Era el ciclo que creo, nunca decia palabra alguna en ninguna de sus visitas, no tenia nada que decirle a una lapida que no le contestaría.

Y como ya era costumbre, se marcho a los 20 minutos luego de estar parado sin mover ni un dedo. El portero del cementerio lo vio salir a paso tranquilo por la puerta de la entrada, con sus manos en los bolsillos de su saco, como las otras 5 veces que lo vio salir y entrar cada 4 del mes.

La "historia" que la gente de la ciudad se invento y que la mayoria conocía era una completa telenovela que a veces al pelinegro lo hacia carcajear.

Se contaba que Abigail era una mujer que vivía en una cabaña en el bosque sin bajar a la ciudad o pocas veces lo hacia, que un dia conocio a un extranjero que tenia los ojos tan rojos como la sangre y el cabello tan negro como el color, que el extranjero era un demonio pero ella no lo sabia y se enamoraron para asi por desgracia consevir un hijo, solo para que la mujer no aguantara el dar a luz a un hijo del demonio y muriera en el parto.

Esa ultima parte no le agrado mucho que digamos a Anti.

Otro rumor raro, decian que el niño era un demonio eh hijo del diablo, que la casa en el bosque era y siempre fue de ese demonio de ojos sangre y por eso cada persona que se metía en ella nunca se le volvían a ver.

Niñer@ de un asesino Donde viven las historias. Descúbrelo ahora