Si había algo que Annie odiaba, era trabajar.
Nuevamente se encontraba atendiendo aquel bar de su barrio, dónde las mujeres iban a tomar para olvidar el pasado y los hombres iban para ignorar su presente.
Ella atendía el lugar con Marlo, un chico alto, quien lucía su impecable camisa negra con una corbata blanca y su pantalón de vestir al igual que la rubia, sólo que ésta en lugar de pantalón utilizaba una falda algo ajustada que iba de la cintura hasta cuatro dedos arriba de la rodilla.
Mientras el chico se encargaba de ir a las mesas y atender órdenes, ella recogía el desastre que los clientes dejaban en las mesas.
—¡Annie, amor mío!, ¡Traeme un vaso de vodka puro! —Gritaba una chica de cabello castaño claro.
La mencionada la miró con molestia— Hitch, sabes bien que yo sólo atiendo los fines de semana, si quieres algo pideselo a Marlo.
—Uh, qué pésimo servicio —Se lamentó la mayor— ¿Sabes?, acabas de perder un cliente.
—Esa manipulación deja de funcionar cuándo lo dices tantas veces y no lo llevas a cabo —Cuándo la tienda finalmente se vació, Annie se tomó la libertad de sentarse con Hitch.
—¿Encima los empleados se sientan a beber con los clientes?, podría demandarlos con la Municipalidad —Volvió a amenazar con poca seriedad.
—Hazlo, no tienes testigos —Atacó la rubia para luego beber del vaso con vodka que acababa de traer Marlo.
—¡Oye! —Se quejó Hitch.
—No te quejes, siempre te servimos más de lo debido a tí —Recordó la rubia.
La castaña rodó los ojos pero aceptó beber con su amiga.
—Te ves terrible, por cierto —Comentó Hitch al notar las terribles ojeras de la chica— ¿Tan mal te fue en tu primer día en la Uni?
—No se trata sólo de eso —Aclaró Annie— Normalmente mi horario de siesta era al salir del bar, pero ahora no puedo dormir completamente bien —Explicó con el cansancio marcado en su voz— Hoy dormí cinco horas antes de ir a la Universidad y una hora luego de volver, hasta que llegó mi padre y volvió a levantarme exigiendo que limpiara la casa —Se lamentó.
—Entiendo —Hitch la miró con pena, pues conocía bien la situación económica de su amiga.
—Y sobre el primer día, fue horrible —Annie tomó su rostro entre sus manos— Una niña me siguió todo el día, hay otro chico que me da mala espina que va en mi clase el cuál nos presentó a sus dos amigos, Reiner y Betholdt desaparecieron luego de llegar —Comenzó a narrar la rubia.
La razón principal por la que Annie era tan callada en todo el día, es porque le contaba absolutamente todo lo que creyera necesario a Hitch durante la noche cuándo no habían clientes.
—¿Annie socializando?, ¿Qué clase de milagro es ese? —Preguntó Hitch divertida.
—¿Acabo de escuchar bien?, ¿Annie y ''socializar'' en una misma frase sin un ''no'' de por medio? —Marlo se unió a la conversación luego de terminar de limpiar las mesas, sentándose con ellas.
—No es gracioso —Se cruzó de brazos la nombrada.
—Sí, Annie, si lo es —Contradijo la castaña— Hablanos de tus nuevos amigos, ¿Cómo son?
—No son mis amigos —Rodo los ojos con fastidio— La chica que me seguía todo el día se llama Mina, es demasiado correcta —Recordó Annie— También bastante decidida, apesar de que huía de ella, seguía intentando ser mi amiga o algo así.

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Crazy Over You ||Aruannie||
FanfictionAnnie Leonhart siempre fue reconocida por sus cercanos cómo una persona seria, distante y organizada, nunca tuvo intereses románticos y no planeaba tenerlos. Pero las cosas nunca salen cómo uno planea, y Annie fue testigo de ello cuándo se volvió co...